Las transferencias de vehículos usados han caído en Castilla-La
Mancha un 86,4% en el mes de abril respecto al mismo periodo de 2019, según datos de la consultora MSI para la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto).
En total, tan solo se han sumado 1.062 unidades. En el acumulado del año, la bajada se sitúa en la Comunidad Autónoma castellanomanchega en un 20,6% con 25.878 vehículos de ocasión vendidos.
Por provincias, las ventas de vehículos usados han bajado un 90,20% en Albacete, un 90,78% en Ciudad Real, un 91,45% en Cuenca, un 94,94% en Guadalajara y un 78,63% en Toledo.
DATOS NACIONALES
Las ventas de vehículos usados se situaron en las 17.586 unidades en el mes de abril en España, lo que supone un descenso del 89% en comparación con el cuarto mes de 2019, según datos de la consultora MSI para la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto).
Según estas cifras, en lo que va de año las transferencias de coches de segunda mano acumulan una caída del 29,3%, con 466.715 unidades vendidas, por lo que Faconauto prevé que el mercado de ocasión cierre 2020 con una bajada del 26,3%, con algo más de un millón y medio de registros.
«El mercado de vehículos usados ha sufrido también el duro golpe del freno en seco de la actividad por la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. Los concesionarios han estado cerrados casi dos meses, de ahí la fuerte caída de todas sus áreas de negocio», ha indicado el director de Comunicación de Faconauto, Raúl Morales.
En cuanto al mes de abril, todos los tramos de edad disminuyeron sus ventas, siendo la bajada más acusada la de los vehículos de mas de 10 años, con una caída del 91,7%, mientras que el segmento de 6 a 10 años se redujo un 90,6%. Le siguen los modelos de 0 a 3 años, con una caída del 83% y, por último, los vehículos de entre 3 y 5 años bajaron un 80% sus ventas en el mercado de ocasión.
En relación con los canales de venta, los recortes más acusados fueron para la importación, con un 94,7% menos; el canal de particulares, con un 91,6% menos; la compraventa, con un 91,5% menos, y para las matriculaciones tácticas, con un 91,4% menos. Las caídas, sin embargo, han sido menores para los vehículos de renting, un 65,3% menos; el canal de alquiladores, un 67,8% menos, y los concesionarios, con una bajada del 77,4%.
El combustible más demandado volvió a ser el diésel, con 10.995 vehículos vendidos, un 89,3% menos con respecto a abril de 2019. La gasolina, por su parte, cayó un 89,2%, hasta 5.995 unidades. No obstante, las ventas de coches microhíbridos de diésel aumentaron un 154%, con 64 registros.
«La reapertura de las concesionarios de toda España tendrá, forzosamente, que cambiar esta tendencia tan negativa en paralelo a la recuperación progresiva de la actividad. Nuestra previsión es una caída de en torno al 26% en las transferencias de usados, aunque esperamos que el mercado de ocasión sea, como en crisis anteriores, uno de los primeros en recuperarse e impulsar el sector», ha subrayado Morales.