Por unanimidad ha aprobado el Pleno del Ayuntamiento de Ciudad Real la última moción que ha presentado y defendido el concejal de Vox, José Antonio Ruiz-Valdepeñas, que al término de la sesión presentará su renuncia. La propuesta recogía requerir a las empresas adjudicatarias de la zona azul, tal como estipulan los contratos, el mantenimiento y repintado de la señalización horizontal que delimita las áreas de estacionamiento regulado.
No corrieron la misma suerte las otras dos mociones que Ruiz-Valdepeñas elevó al máximo órgano municipal. Por un lado, VOX proponía la creación de un Plan de contingencia fiscal “para reducir las cargas fiscales de las familias en la situación de confinamiento o aislamiento y compensar las pérdidas derivadas del incremento del paro o paralización actividad empresarial”. Además, la formación abogaba por la reducción y aplazamientos de tributos municipales, todo esto acompañado de un Plan de reducción del gasto innecesario.
También reclamó sin éxito que Ayuntamiento de Ciudad Real ordenara la suspensión de la ejecución presupuestaria de cualquier ayuda o subvención a sindicatos, organizaciones empresariales, fundaciones, asociaciones o cualesquier entidad privada en las que el proyecto, actividad, programa o actuación que la motivara no tuviera por objeto directo la ayuda a los afectados por el coronavirus o la creación de empleo. De esta forma, Ruiz-Valdepeñas defendía la transferencia de dichas partidas presupuestarias a las finalidades de lucha contra el coronavirus y sus consecuencias económicas. Asimismo, ha solicitado que se autorice a los grupos políticos a destinar íntegra o parcialmente la dotación económica establecida legalmente a su favor a las asociaciones de afectados por el coronavirus o proyectos sociales de ayuda a los afectados por el coronavirus.
Una obligación contractual que debe satisfacerse….