Puertollano ha superado la eterna jornada de confinamiento en una conjura de resistencia. Los destellos electrónicos, derramados en los balcones del Paseo de San Gregorio como el mapa de una galaxia, son el gesto de reconocimiento al gran esfuerzo colectivo.
El himno de la alegría ha sonado en el gran espacio del egido. Los puertollaneros han bailado, han cantado sin miedo al vacío, plantando cara al futuro. Aquí estamos, han dicho desde los miradores, reconociéndose en sus vecinos, regalándose la música del denuedo, relevándose en esta insólita carrera de resistencia que, sin duda, vamos a ganar todos. Ánimo, pueblo de Puertollano.
Puertollano ha roto su silencio con música y un sonoro aplauso en apoyo a los héroes anónimos que luchan contra la pandemia…..