El Consistorio capitalino, a petición de una empresa de la limpieza, ha autorizado la tala de cuatro ejemplares de pino carrasco, de entre 7 y 9 metros de altura, ubicados en el jardín del antiguo Banco de España. Los árboles no presentan problemas fitosanitarios ni fisiológicos, según los servicios municipales, pero sí estructurales, al presentar inclinaciones “acusadas”.
Tampoco existe “un riesgo inminente, peligro de vuelco o fractura de los árboles, bajo condiciones climatológicas, ambientales y de uso normales”.
No obstante, las copas de dos árboles “afectan a la pública y su posible vuelco afectaría al vallado de la parcela”. Los ejemplares no pertenecen a una especie protegida o autóctona y tienen “poco valor” ornamental o botánico.
Una propuesta de actuación inmediata…..