He escuchado por casualidad las primeras preguntas de la oposición durante la sesión de control al gobierno. En la exposición de las propias preguntas ya se llevan su merecido los portavoces.
¡Pregunta y sufre, valga la redundancia! Esto que exclamo no es un juego de palabras, he asistido con sorpresa a momentos en los que quienes formulan las preguntas se autoinfringen más daño aún que el que reciben cuando (golpe a golpe) les llegan las respuestas gubernamentales, ministeriales y vicegubernamentales, a veces jocosas, a veces desabridas y, como era de esperar, con poco fondo político (pues a unos no les hace falta tenerlo frente a semejantes contrincantes, y a otros no les es necesario demostrarlo y se refugian en algunos lugares comunes que levantan un fácil aplauso reconfortante).
Todos sabemos que hay preguntas con respuesta inducida y que los políticos suelen abusar de ese tipo de retórica con mejor o peor estilo. Pero nunca había quedado tan a las claras que hay preguntas políticas con autocastigo implícito, tan inducido que nada ni nadie podría evitárselo, porque, aunque obtuvieran la callada de parte de sus interlocutores, quedarían heridos y maltrechos. Las derechas, divididas y despistadas, están sufriendo sus pecados, qué karma, pero no seré yo quien les aconseje. En estos momentos de «paz utilitarista» de las izquierdas y «guerra civil» de las derechas, sólo algunas grandes desgracias, o muchas adversidades pequeñas pero encadenadas sobre el fondo de la crisis del sistema político, podrían venir en ayuda de unas derechas españolas tan necias y montaraces, dirigidas por generales y generalas que se comportan como tontos y tontas solemnes con banderas a la calle. Tienen complicada su salvación. Padecen y purgan. Magnum et salubre purgatorium.
Pedro Oliver Olmo
Sobre el muro
Un disparate.
El Gobierno evita a la prensa, felaciona a los independentistas incluso a los condenados, discrimina descaradamente a regiones no partidarias, sufre ataques psicóticos tan solo cuando le citan a Venezuela y el destino de 40 maletas de la chavista, la crisis económica y la subida del paro se les echa encima, están ya marcados en Europa con la sospecha de que es un gobierno de tendencia autoritaria…
Y el karma lo ha perdido la oposición.
Considerando que mediante un fraude electoral llegan al gobierno (mentir a sus votantes) y mentiendo compulsivamente como programa fundamental de gobierno…el karma lo pierde más bien…el que mal empieza porque mal acaba.
Y el resto es la Pose constante de la nueva casta galapagariana y falconiana.
La nueva tiranía de mentirosos y sinvergüenzas.
La verdad acaricia con su Karma a quienes no la temen.
Y azota fuertemente a los auto satisfechos.
a la derecha les queda un camino muy duro por la estepa de la oposición. siguen si digerir una derrota en las urnas y eso ya les produce un estreñimiento que les afecta al riego cerebral… pobriños ellos…
Yo veo al Gobierno haciendo oposición y a la oposición trazando las líneas fronterizas de un gobierno.
Su legitimidad está en duda, su popularidad también. Es el gobierno posiblemente más desacreditado de la Democracia.
Y también el más autoritario.
Cualquier atentado contra la Constitución y la unidad de la Nación española sin un proceso de reforma ahondará en su crisis de legitimidad…y autoridad.
Si el destino es tener una República del Frente Popular virtual, también habrá una Monarquía parlamentaria real.
Viviremos de espaldas como hace Cataluña en su bipolaridad, y que la crisis económica decida.
A la izquierda la pilla en el poder esta vez.
Y la realidad habrá de ser feroz con ella.
En estas circunstancias, quemará más el poder que estar en la oposición.
No hay propaganda que ponga barreras a la indignación con el gobernante.
Y razones hay, porque no se puede estar mintiendo a todos todo el tiempo.
La ‘derecha’ española sigue deprimida y desorientada…..
Esta será la oportunidad para que el Frente Popular y el independentismo definitivamente quiebren.
La realidad siempre es la verdadera y más feroz oposición a un gobierno totalitario.
En Europa occidental y en pleno siglo XXI, no se perdona la mentira.
España llega tarde a ese tren, pero llega.
Por copiar una tesis doctoral han caído Ministros en Europa…
Aquí la oleada acaba de llegar.
No va a haber espacio y región que escape a la indignación.
A la de verdad, no a la que respondía con esa pose que ha conducido a unos a Galapagar y a otros al Falcon.
Como todos hemos visto.
Y todos hemos sido testigos.
España seguirá estando unida en una Monarquía parlamentaria con mayoritario apoyo popular por una sencilla razón, la prosperidad está asociada a ella.
Y habrá mucho anhelo de prosperidad porque la INEPTOCRACIA no se perdona.
Su narcisismo patológico le impide ver su fracaso renovado. El error esta la derecha, que es ese lugar donde se envía al disidente. A falta de argumentos, el insulto: «Derechas españolas tan necias y montaraces, dirigidas por generales y generalas que se comportan como tontos y tontas solemnes con banderas a la calle». Resulta más fácil suprimir a «tontos y tontas», a «necias y montaraces», que suprimir la libertad.