El pasado 18 de diciembre la Federación de Empresarios de Ciudad Real (FECIR) hacía saber, por boca de su presidente, su opinión sobre el inmueble que han venido ocupando de forma intermitente, en lo que anteriormente había sido el Sanatorio 18 de julio, obra de Isidro Vital Gutiérrez de 1947, y dependiente de la Obra Sindical 18 de Julio.
En unos momentos de creciente intervencionismo sindical en la vida económica y social española, como muestran el catálogo de las diferentes Obras Sindicales desplegadas entonces. Instalaciones asistenciales que en su momento prestaron indudables servicios médicos, con escasos medios y con unas instalaciones avanzadas para el momento, comparadas con la precariedad de las Casas de Socorro. Como mostraba elárea de quirófanos, entre otros aspectos constatables. Pero todo ello, debería de contarlo la pendiente Historia de la medicina provincial, que está por hacer.
Y digo que han venido ocupando los empresarios de forma intermitente, porque el citado edificio rehabilitado por el Ministerio de Trabajo –que sigue siendo su actual propietario – en 1991, fue la sede de la desaparecida patronal provincial CEOE-CEOPYME.Hasta que, en tiempos de esplendor económico aparente, en el año de 2006 se optópor la construcción de una nueve sede en la localidad de Miguelturra, previa cesión de suelo gratuita por parte del ayuntamiento, en un gesto tan incomprensible como criticado en su día.
Tan desproporcionada la sede de Miguelturra en sus instalacionesy complementos, como en su coste inasumible por la organización empresarial. Suscitando tal acontecimiento, que el traslado supusiera el principio del fin de la organización patronal del momento, procedimientos económico-judiciales contra los responsables, mediante. Concluyendo la historia con la pérdida del edificio construido, con el procesamiento de presidentey secretario general y con la pérdida de las siglas patronales de CEOE-CEPYME.
Dejando, mientras tanto, en estos catorce años de calvario inmobiliario, el edificio en condiciones de abandono funcional, como paso previo al lamento actual del mal estado de salud. Por ello, enuncian y concluyen con la petición de un nuevo edificio para la renacida sede empresarial de FECIR. Que probablemente sea objeto –o lo pretendan– de subvenciones públicas. Todo ello, cuando su actualpropietario,Ministerio de Trabajo, no ha opinado sobre elprocedimiento a seguir.
Y este procedimiento del abandono edilicio e inmobiliario, es una técnica refinada de especulación muy habitual en la ciudad y de sobra conocido. La técnica susodicha es la del imperativo de los hechos que provoca el abandono inmobiliario, para desde esa situación de deterioro reiterado, y en ausencia de las oportunas Ordenes de Ejecución municipales sobre el Deber de Conservar, que es la contraparte obligatoria de los propietarios de los edificios, instar la consecuente declaración de ruina. Fulminante. Y efectivo ante la pasividad de las administraciones competentes. Por más que lo conceptos patrimoniales –y sus consecuentes declaraciones– suspenden la realidad económica de los edificios e inmuebles afectados.
De ello, de toda esa genealogía de la ruina, del abandono y de la demolición, dan cuenta los periódicos hallazgos arqueológicos –como restos de una memoria, ni querida ni consentida, que vuelve y nos atormenta– y la desmedida preocupación y sorpresa por esos hechos, cuando anteriormente fueron consentidos los actos y hechos determinantes de su ocultación, abandono y sepultura.
Es igual que hablemos de los restos de cimentación de la Muralla en la Plaza de Toros; de los restos del Torreón del Alcázar, descubiertos al excavar un aparcamiento hace años; de los restos de la edificación civil del siglo XV, de la calle del Lirio o de la villa romana del paraje de La Torrecilla. Porque, al paso que vamos, todo el patrimonio edilicio de Ciudad Real –que no sea estrictamente religioso– estará bajo tierra y bien desaparecido. Aplíquese a los casos en litigio de permanencia, que nos remiten a similares quejas de principio de los sesenta: Casa dela Torrecilla, convento de las dominicas de Altagracia, Escuela de Comercio; desde el colegio de laFerroviaria, a la Casa de Cultura de Miguel Fisac, desde la mutilada y casi impedida casa de la Cruz Roja a estructuras conventuales como el convento de las Terreras. Todo ello, por más humo que quieran vender, como explicitaban los
titulares de La Tribuna del 22 de diciembre. “Una provincia protegida al máximo nivel”.Para dar cuenta del centenar de BIC aparecidos en el catálogo del Patrimonio Cultura de Castilla-La Mancha. Donde cada vez cobra más cuerpo la incorporación del mantenido y debatido conceptodelPatrimonio Inmaterial. Y así desde el Corpus de Porzuna, a la cerámica de Talavera o el campaneo manual de Alustante, al amparo del decreto estatal del 18 de febrero de 2019 sobre la declaración como Patrimonio Inmaterial en favor del toque manual de campana. Y es que, con el paso del tiempo todo el Patrimonio declarado será ya eminentemente inmaterial. Porque si el órgano que no se emplea acaba produciendo atrofia, el edificio que no se utiliza acaba produciendo ruina.
Periferia sentimental
José Rivero
Una sociedad que no cuida sus pocos edificios históricos está renunciando a su propia memoria.
La historia del urbanismo local define muy bien al prohombre culipardo…
Y es que,de ser una capitaleja con algunas casas familiares bastante interesante, nos hemos convertido desde los 70 en un Leganés, Torrelodones o Torrejón cutre sin la menor posibilidad de modificación que nos devuelva a lo que fuimos, por muy poco que sea.
José Rivero: BRAVO POR SU INTERESANTISIMO Y DETALLADO ARTICULO!!!
Lo triste es, que los que pudieron en su momento evitar tal destrucción y, los políticos actuales, que pueden prevenir «que se caiga» lo poco que queda, carecen DE SENSIBILIDAD PARA conservar el POCO PATRIMONIO QUE QUEDA.
Saludos
Confiemos en que los antiguos errores no se vuelvan a repetir y que los ciudadanos seamos conscientes de nuestro patrimonio. Esto último es muy importante porque a nadie nos pertenece, es un legado que nos dejan nuestros antepasados y que hemos de conservar intacto para que las futuras generaciones puedan disfrutarlo……
Pues Charles, lleváis mal Ferroviaria y Cruz Roja!!
La rehabilitación y adaptación del emblemático edificio de la «Ferroviaria», que ha permanecido sin uso desde 2006, supondrá una inversión de unos 1,7 millones de euros por parte del Gobierno regional…..
Por cierto, ahora también se adecentará el emblemático edificio de la Cruz Roja con una aportación de 850.000 euros…..
Cuando lo vea hecho y con «contenido» te lo agradeceré. Hemos llegado a un punto es que «obras son amores…».
Precisamente los edificios que cita Hobbes de luto hace muuuucho tiempo ya que deberían estar lustrosos, restaurados y utilizados, que también hubo mandanga con la Cruz Roja, salvada por la campana electoral (sin ñ) para dejarla morir administrativamente silenciosa.
Así, «semos»…y así nos va. Desde Lorenzo que nos trajo el AVE…na de na…
1,7 mill el edificio de la ferroviaria
850.000€ el edificio de la Cruz Roja.
Y cuánto para la restauración del Arco del Torreón?
Como se nota donde meten el dinero y cuáles son sus prioridades