Santa Bárbara, patrona de los mineros y del barrio almodovareño de El Calvario, ha vivido hoy y como cada 4 de diciembre, las celebraciones principales en su día grande y lo ha hecho, como es habitual, rodeada de vecinos, primero en la eucaristía de mediodía y después en la procesión posterior por calles de esta zona urbana.
Pero anoche, además, fueron cientos los ciudadanos de Almodóvar del Campo que ya se congregaron allí para vivir la que es la primera de las candelarias del ciclo de hogueras de invierno, una cita a la que acudió el novillero Carlos Aranda, quien participará junto a otros en el tentadero de marzo a beneficio de la ermita.
De hecho, estuvo en su interior para, al término de la misa de vísperas, donar a la Hermandad de Santa Bárbara uno de sus capotes, que dedicó al colectivo de su puño y letra, frente a la talla de esta mártir, bajo cuyo amparo protector también se pone ahora el daimieleño para todas las ocasiones.
“Siento una gran emoción y me siento un privilegiado de poder estar aquí y, como he puesto en la dedicatoria, espero que me proteja y me guíe en el camino y me dé la luz necesaria en los momentos que se necesita, que son muchos no solo en el toreo, sino a lo largo de la vida”, apuntó Aranda.
El capote fue recogido por varios integrantes de la Hermandad, en compañía del padre carmelita fray Francisco Javier de María, oficiante anoche y este mediodía, además del alcalde José Lozano entre otros miembros del equipo municipal de Gobierno o el presidente del Club Taurino ‘Almodóvar’, Carmelo García.
Álvaro Tello, en representación del colectivo, reconocía que este gesto “era algo que esperábamos con mucha alegría, ha sido un momento muy emocionante para nosotros, que recordaremos durante mucho tiempo y esperamos que la tenga como protectora a partir de ahora y siempre le acompañe”.
Para el alcalde, por su parte, “hay que resaltar el gesto de este novillero que ojalá pase a ser torero muy pronto que así desde este Ayuntamiento se le ofrece la oportunidad para que pueda tomar la alternativa en 2020 en nuestra plaza de toros y creo que ha tenido un detalle enorme hacia la Hermandad de Santa Bárbara y le doy por ello las gracias”.
Cabe recordar, como así también aludía el presidente del Club Taurino, que el próximo 29 de marzo habrá un tentadero especialmente concebido para sufragar los gastos de la techumbre de esta emblemática ermita, la más al este en la localidad y en cuyo entorno ya actuó el Ayuntamiento urbanizando el suelo dotándolo de otros servicios y recursos.
Para Lozano, “lo importante es potenciar todos nuestros barrios y en este caso, gracias a la Hermandad de Santa Bárbara, hacemos esta candelaria, conservamos las tradiciones como alto tan valioso en estos tiempos y así lo demuestra la cantidad de gente que tenemos ahora [por anoche] en un barrio que es obrero y trabajador”.
Y en el mismo sentido se ha pronunciado un vecino ilustre del barrio, fray Francisco Javier de María, quien valora la potenciación de este enclave y fiesta como patrona de los mineros, o la presentación este año de las actividades anuales, pero “también en la parte litúrgica con el triduo o la celebración de la eucaristía, sin olvidar lo principal como es la fe y la devoción a santa Bárbara y en Cristo”.
Los actos nocturnos de la víspera se completaron con el habitual agasajo de ‘limoná’ y aperitivos, la presencia de la Banda de Cornetas y Tambores ‘Jesús Rescatado’, fuegos artificiales y los barrenos con que, este año, se ha rememorado la vinculación de santa Bárbara a los mineros.