Una entidad sin ánimo de lucro se mantiene siempre dependiente de la ayuda de los demás. Así, el Banco de Alimentos de la provincia ve su situación económica este año muy dañada. En ese sentido, hace un llamamiento a los vecinos de Ciudad Real y alrededores para que, sin hablar de donaciones monetarias, aportes sus propias manos de cara a la Gran Recogida que tendrá lugar el 22 y 23 de noviembre.
Esta cita es cada año una de las más importantes para la Federación de Bancos de Alimentos, puesto que recaudan comida suficiente para alcanzar la Navidad. En el caso del Banco ciudadrealeño, todos los otoños han contado con una logística importante para poder afrontar una provincia tan extensa. Sin embargo, este año no será posible repetir esa situación por lo que, en palabras de su presidente Segundo Alcázar, «esperamos que las manos de todas las buenas personas que viven en esta ciudad y sus pueblos consigan que ese fin de semana sea el de la solidaridad».
La Gran Recogida se llevará a cabo el 22, 23 y 24 en toda España, pero Ciudad Real centrará su esfuerzo entre el viernes y el sábado. Habrá muchos puntos repartidos en supermercados, calles y centros de recreo en los que se podrán recoger cientos y cientos de kilos de alimentos que luego se repartirán entre las asociaciones pertinentes.
Asimismo, el Banco de Alimentos espera contar de nuevo con la ayuda inestimable de todos los colegios de la provincia y de la residencia Ciudad de Matrimonios.
Cualquiera que desee participar como voluntario puede ponerse en contacto con el Banco en www.bancoalimentoscr.org o en el 926 256 767. En el próximo mes tendrá lugar una reunión informativa.
Hay que participar en una buena causa….
Muy bien pero se debería mirar muy bien a quien se les da.se les da a familias que viven muy bien cerca de donde yo vivo Jay familias a las que se les da y las nabidades pasadas sus hijos teni an regalos que yo a mis hijos no les puedos comprar tienen buenos móviles televisores de los buenos pero claro como el Banco de alimentos les dan de todo no se preocupan si no tienen para la comida porque ya se la damos
Opino como tú. Los bancos de alimentos nacieron para que los sobrantes de productos de las empresas no se echaran a perder. A las empresas les bajaban los impuestos y las familias que lo necesitaban se beneficiaban. Pero es verdad que hay algún caso que se te quitan las ganas de colaborar
Yo ya solo ayudo a vecinos, conocidos, familiares…. si total, luego la sociedad a nosotros nos da la espalda en planes de empleo, ayudas…
Ni un duro! Y en la declaración de la renta cero patatero también desde hace ya unos años.
Menos tontás y más leyes anti okupaciones, anti delincuencia, etc
Una pregunta.
El Presidente de esta asociación es voluntario sin animo de lucro o cobra?.
Es solo por saber.
El presidente, no sólo es voluntario, no cobra nada y además le cuesta dinero de su bolsillo, con personas como este hombre, si hubiera unas pocas este mundo sería mucho mejor
Yo también opino que hay que mirar muy bien a quien se da esos alimentos,ya que en la mayoría de los casos se les da a cuentistas y jetas. Hablo desde mi experiencia y el círculo que me rodea. Ejemplos de ello son una familia, que ganando 1800€, se le dan alimentos que luego se ponen a vender en la esquina de su casa a bajo coste a l@s ancian@s. Otro caso que conozco es el de una chica que a temprana edad se embarazo tres veces (sin contar las que abortó anteriormente), ahora debe tener unos 30 años, no tiene pareja y le dan muchas ayudas además de alimentos, pues a esta chica te la veias este verano a las 11 de la mañana en la terraza de un bar con su cigarrito, su pelo de peluquería, su vestimenta a la última moda y sus tres hijos tomándose refrescos ya de buena mañana. Otro caso el de otra familia que manda a los niños al bar a desayunar y cenar por no prepararles un Colacao o un bocadillo, y encima son delicaditos cuando les dan en el banco de alimentos productos que no son de su marca favorita.
Y para terminar contaré, que hace poco llamó a la puerta de mi casa una señora de unos 70 años, diciendo que era muy necesitada, que su marido estaba muy enfermo y necesitaba una medicina que no podía pagar, que le diera algo. Tras hacerle una serie de preguntas me ofrecí a acompañarla a la farmacia y comprarle la medicina que costaba unos 20€. Pues la caradura salió corriendo las escaleras abajo..era todo una farsa.
Así es que no me extraña que haya poca gente para la campaña del banco de alimentos, viendo el panorama que hay es normal que no quieran participar. Se debería hacer un control más exhaustivo de quién necesita realmente esas ayudas, y la gente cooperaría más.