Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha hallan, en el transcurso de una investigación de incendios en la provincia de Toledo, el cadáver quemado de un zorro, de apenas un año de edad, atrapado en un cepo entre la vegetación que estaban analizando.
Al parecer, el animal quedó atrapado en el artefacto donde pudo permanecer varios días tratando de liberarse y con la pata fracturada a causa de la fuerte presión del cepo sobre ella. Debió de estar así al menos hasta que se produjo el incendio que hizo que finalmente muriera calcinado. “Imposible imaginar una muerte más agónica”, afirma la Asociación Profesional de Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha.
El Cuerpo de Agentes Medioambientales tiene una investigación abierta para llevar ante la justicia al autor o autores de este delito.
El empleo de cepos, un medio ilegal de captura, tiene prohibida tanto su venta como tenencia y uso. En los montes y campos de nuestra región y otras Comunidades Autónomas fueron habituales en épocas pasadas, pero todavía hay personas que los utilizan y los esconden como si de una mina antipersona se tratase. Este artefacto se coloca semienterrado y se activa de manera repentina y enérgica por la pisada de cualquier animal (salvaje o doméstico) o persona que tengan la mala fortuna de cruzárselo en su camino.
Los agentes, tras levantar el cadáver y requisar el artefacto, continuaron con la investigación.
El Cuerpo de Agentes Medioambientales realiza habitualmente operativos de inspecciones para la localización, decomiso y denuncia de medios de captura ilegales, como los cepos, o aquellos que necesiten cumplir las condiciones de uso a las que les obliga una autorización, como jaulas o lazos.
Hay que tener en cuenta que éste es un problema de seguridad medioambiental, por lo que es una labor de todos colaborar y atajar el peligro para las especies animales y la ciudadanía que suponen determinados medios de captura, por eso la colaboración ciudadana es fundamental para su localización.
Así mismo, la Administración debe esforzarse en el desarrollo y potenciación de los Agentes Medioambientales aumentando su formación y medios para mejorar su ejercicio de policía medioambiental. También ha de eliminar las trabas para que estos puedan comunicarse de forma más eficaz y directa con la justicia en los ámbitos y requisitos penales a los que están obligados.
Los agentes recuerdan que ante el hallazgo de medios de captura de fauna requieran al 112 la presencia inmediata de los Agentes Medioambientales y que no manipulen ni se acerquen a ellos, ya que podrían alterar o destruir vestigios decisivos para el proceso sancionador.
“Imposible imaginar una muerte más agónica”, afirma la Asociación Profesional de Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha.
El Cuerpo de Agentes Medioambientales tiene una investigación abierta para llevar ante la justicia al autor o autores de este delito.