Manuel Cabezas Velasco.- Ayer regresaba de un corto viaje en el que me adentré por el conjunto patrimonial de una de las poblaciones cuya riqueza en sí está en serio peligro, a pesar de que desde 1974 posea la declaración de conjunto histórico – artístico. La población en cuestión es Villanueva de los Infantes.
Conocida por la relevancia que la puso en primera línea hace pocos años por ser el supuesto “lugar de La Mancha” que el príncipe de los ingenios nunca despejó gracias a un estudio realizado por un equipo multidisciplinar de la Universidad Complutense de Madrid encabezado por Francisco Parra Luna (“El lugar de La Mancha es… el Quijote como un sistema de distancias – tiempo”), y cuyos ejemplos vinculados a esta temática son variados en la ciudad, como la señalética de la Ruta del Quijote, las figuras de don Quijote y Sancho con sus cabalgaduras en la Plaza Mayor o la Casa del Verde Gabán, entre otras.
Sin embargo, su notabilidad hay que asentarla en la importante riqueza patrimonial que posee tanto en el plano civil como religioso, la devoción o la arqueología: su reconocible Plaza Mayor, la iglesia de San Andrés, los conventos de las Franciscas, de Santo Domingo y de los Trinitarios, el yacimiento arqueológico de Jamila, los palacios de diversas familias de relevancia como los Ballesteros, los Melgarejo o los Buenache entre otros, algunas casas vinculadas al tribunal de la Inquisición – tanto la su antigua cárcel como la de su Tribunal –, la Alhóndiga – que cumpliría sucesivamente funciones como de casa de Contratación, cárcel e incluso biblioteca y área de exposiciones como se da en la actualidad – o el Santuario de la Virgen de la Antigua, patrona de Villanueva de los Infantes, por citar sólo algunos, además de la obligada visita a los conocidos patios que tanta relevancia adquieren cuando nos encontramos en fechas más benignas.
Cabe recordar la estrecha relación que tuvo el literato madrileño Francisco de Quevedo y Villegas, que falleció en una celda del antiguo convento de Santo Domingo (1645), el santo Tomás de Villanueva nacido en Fuenllana, de cuya casa se conserva el escudo esquinero y frente a ella se puede contemplar el oratorio del siglo XVII, y otros personajes que no habría que obviar: Bartolomé Jiménez Patón, humanista, gramático y retórico, el pedagogo y matemático Juan Hurtado, el trinitario descalzo oriundo de la localidad Tomás de la Virgen, el escritor y dramaturgo local Juan de Cueto y Mena, el escritor Fernando de Ballesteros y Saavedra, el escritor ascético Antonio de Molina, el pintor Matías de Arteaga y Alfaro, el escritor Fray Esteban Pérez Pareja, el político liberal Ramón Giraldo de Arquellada, el gramático y humanista Pedro Collado y Peralta, el arqueólogo e historiador del Arte Antonio García Bellido o el pintor Carlos Saura Riaza.
No obstante, muy a pesar de esta riqueza, de los iconos patrimoniales que se muestran tanto en su casco urbano como dentro del término municipal, la desesperanza parece hacerse dueña de muchas personas que allí residen a pesar de las actividades que llevan a cabo.
Este pesar obedece al no sentirse amparados a la hora de acometer la defensa y protección del patrimonio existente como la localidad mereciera. Ejemplo de ello es el mal estado de muchas edificaciones que o bien han sido abandonadas a su suerte por sus dueños, o el estado de ruina hace realmente costosa su rehabilitación. Otros, los más afortunados, a pesar de las reticencias, han logrado reconvertirlos y, aunque mantienen su estructura original y su esencia, han adquirido otros usos como el de convertirlos en casas rurales. Uno de esos ejemplos fue la morada donde pude escapar de la crudísima ola de calor que azotó el territorio español durante estos días llegando a superar en días sucesivos los 40 grados centígrados diurnos a la sombra y acercarse a los 25 en las horas nocturnas: los Girones Pacheco.
A todos los elementos que conforman el conjunto patrimonial de esta población – para los que pude ahondar en algunos de sus entresijos de la mano del historiador Carlos Sánchez Molina y del también historiador y erudito local Luis Riaza García – no voy a referirme en esta ocasión, pues ya habrá oportunidades para ello, pero aquí queda plasmada esta reflexión.
Por otro lado, casi a modo de colofón de mi mencionada visita asistí a la presentación de una exposición que, mediante una serie de paneles explicativos y muy bien documentados gráficamente, nos hacía profundizar en el mundo de los castillos, de la arquitectura defensiva en sí, de los avatares sufridos en su evolución histórica, del valor que poseían estas construcciones, de ejemplos prototípicos que mostraban aciertos y errores en los procesos de rehabilitación y sus causas, del expolio o venta de algunos de estos edificios, de su nueva utilidad como posibles Paradores Nacionales e incluso de su vinculación con el mundo del cine, gracias a la cual algunos de estos edificios no desaparecieron décadas atrás. Dicha exposición, de la mano de la Asociación Española de Amigos de los Castillos, con el nombre de “El valor de los castillos” se encuentra en un lugar próximo a la celda del literato Francisco de Quevedo y Villegas, el antiguo Convento de Santo Domingo, en su galería, y se prolongará en el tiempo desde el día de ayer, 30 de junio, hasta el 6 de octubre del presente año. Merece la pena su visita, pues se recuerdan numerosos ejemplos de los castillos y fortalezas existentes en el territorio español, por extensión de su arquitectura defensiva, quedando plasmado un ejemplo que os resultará familiar: la antigua muralla de Ciudad Real.
Una VERGÜENZA.
Con todos mis respetos Infantes no tiene nada de Ciudad, es un pueblo igual que los de su alrededor, cada uno con su historia.Solo espero que vaya todo bien y no caiga en el olvido.
Grata experiencia compartida con vos, en la villa de Infantes. Buen articulo, Manuel. Un saludo y un abrazo
Merci beaucoup et enchanté!! À la prochaine!!
Resulta fundamental incorporar el valor de la preservación y fomento del patrimonio de forma transversal en el conjunto de actuaciones que se emprendan desde las Administraciones Públicas……
Sería interesante que la alcaldesa aclare un poco sus ideas para evitar lo que ha ocurrido este fin de semana. El sábado se hacía una foto con la bandera gay mostrando su apoyo al colectivo, y 24 horas después posaba junto a un destacado miembro de la Fundación Francisco Franco, como es el presidente de la asociación española de amigos de los castillos. Un señor que hoy sigue ensalzando la figura del dictador como ya hizo en su día cuando era delegado nacional de la juventud.
Anda que no habrá exposiciones, que tienen que traer la de una asociación relacionada con el franquismo.
Sra. alcaldesa; Soplar y sorber, no puede ser.
Sr Luisin, cuando una persona es Alcalde lo es para toda la ciudadanía, independientemente de la ideología de cada uno.
Luisin, perdón por mi desconocimiento: ¿los castillos los construyó Franco? Mejor pásese a ver la exposición y vea la información de los paneles.
Gracias
Son fanáticos. Gran artículo.
Manuel, afortunadamente no. Los castillos no los construyó Franco, aunque no dudo que habrá quien piense que si, porque últimamente parece que todo lo hizo el. Por eso mismo creo que sería mejor disfrutar de exposiciones sin que estén relacionados con nada que tenga que ver con el dictador. En los paneles supongo que pondrá el nombre de esa asociación de la que Franco fue presidente de honor y ayer estuvo por aquí su actual presidente que, como decía anteriormente, es un destacado franquista y que por cierto es de los que también dicen que la seguridad social es obra de Franco. (está publicado por ahí). Simplemente me parece un poco incoherente que una persona muestre su apoyo a un colectivo y al día siguiente reciba a alguien que es afín un régimen donde ese colectivo no vivió sus mejores momentos precisamente. De todos modos, es mi opinión y así la he expresado. Saludos.
Estimado Luisin
Todos los políticos en general deben velar por el fomento de la cultura, de toda la cultura. El mundo de los castillos pertenece a nuestro pasado, a nuestra historia, siendo el causante del nombre de parte de nuestra Comunidad Autónoma, Castilla.
Por cierto, en el cartel anunciador de la exposición que se inauguró ayer aparece el nombre de la asociación. A ella yo también asistí.
Buenas noches
Fé de erratas: el oratorio de santo Tomás corresponde al siglo XVIII (1713)
Tu pueblo no existe cuando se transforma en un parque temático. Venecia es Disneylandia.
Casi es mejor que te expropien o que te invadan militarmente, porque no hay defensa contra el turismo y sus consecuencias antisociales.
Oh, si, si, si. Apostar por el turismo de calidad… ecológico, cinegético y cultural.
La gente joven seguirá emigrando.
En efecto. Infantes se muere porque nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos no pueden trabajar allí. Apenas hay natalidad y abandonamos nuestras casas , las de nuestros abuelos, para ir a vivir a Leganés o a Casteldefells a pagar medio sueldo por un piso minúsculo en alquiler.
La España rural se despuebla y la industria se sigue aglomerando en la periferia de las grandes ciudades …hasta cuando? Señor Page, usted iba a rescatar a los talentos emigrados. Menos mal que no han vuelto, porque ¿dónde piensa usted que iban a trabajar? ¿En una sucursal de la NASA o de Silicon Valley instalada en el Campo de Montiel?