Manzanares es una localidad “con una cultura muy viva”, y así se está demostrando este mes de enero con los numerosos actos culturales que se están celebrando. Uno de los últimos tuvo lugar en la tarde del pasado jueves, cuando el manzanareño aficando en Arganda del Rey Vicente Martín Crespo presentó “en mi pueblo” su debut como escritor: ‘Casa Trona’.
Silvia Cebrián, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Manzanares, estuvo presente en la puesta de largo de ‘Casa Trona’, una novela histórica con componentes autobiográficos que se desarrolla en la primera mitad del siglo XX, de la que destacó que cuenta “con infinidad de detalles perfectamente descritos y muy cuidados”. Cebrián finalizó su intervención agradeciendo la presencia del público en la Biblioteca Pública Municipal ‘Lope de Vega’ “por apoyar la cultura y por interesarte por la novela de este autor, un manzanareño que lleva muchos años fuera de aquí, pero que se siente parte de este pueblo”.
Franco Llobera, buen amigo y antiguo compañero de trabajo del escritor, fue el encargado de introducir la obra explicando que ‘Casa Trona’ es un libro que engancha, “cuesta mucho dejar de leerlo”, y que, a pesar de ser la ópera prima de Vicente Martín, “no lo parece porque está muy trabajada y sus 400 páginas son una delicia”.
Según reza su sinopsis, la novela narra las peripecias que le suceden al acaudalado agricultor manchego Roque Ronquillo, que tienen su origen en el enfrentamiento con el conde y terrateniente local por el suministro de agua. El conde, único dueño del manantial que suministra al pueblo, no tiene ningún interés en paliar la sed que padecen sus paisanos, agravado en verano debido a las epidemias de tifus y cólera que provoca la falta de agua. Las circunstancias se complicarán con el desgarrador escenario que proporciona el estallido de la Guerra Civil española, que llevará a la familia Ronquillo a una situación límite.
Algarrobares
El pueblo manchego ficticio en el que transcurre ‘Casa Trona’ resultará familiar a los lectores. “Yo lo bauticé como Algarrobares, pero los manzanareños reconocerán fácilmente que en realidad se trata de Manzanares”, explicó el autor, al que su jubilación permitió recuperar una vieja afición a la que no había podido dedicar demasiado tiempo por su trabajo: escribir. “Me ha llevado un año y medio ‘vestir de domingo’ la novela, pero llevaba muchos años conmigo. Con ella quiero resaltar la dura vida que tuvieron muchos manzanareños durante la Guerra Civil y la posguerra, además de contar la historia de mi familia. Soy de una generación que no sufrió el conflicto bélico, pero sí sus consecuencias, y no conviene olvidarlas”.
Finalmente, Vicente Martín indicó haber publicado ‘Casa Trona’ le ha reportado “dos momentos sublimes”: hojear por primera vez su obra terminada y recibir los comentarios de las personas que ya la han leído. “Me gustaría que la novela fuera muy gratificante para los lectores. Para mí, como autor, recibir su reconocimiento es mi mejor premio”, concluyó.