El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha celebrado este jueves en las Cortes la aprobación por unanimidad de la Ley por una Sociedad Libre de Violencia de Género, una norma que actualiza la Ley de Prevención de Malos Tratos y de Protección a las Mujeres Maltratadas de 2001, pues según ha considerado, la igualdad entre hombres y mujeres es «la igualdad de las igualdades», ya que «no existe mayor desigualdad que la desigualdad de una mitad de la sociedad» frente a la otra.
García-Page, quien ha agradecido durante su intervención en la tribuna de oradores el apoyo de los tres grupos parlamentarios y ha tenido palabras de reconocimiento para la directora del Instituto de la Mujer, Araceli Martínez, ha puesto de relieve la importancia de esta norma, que «justifica una legislatura», y con la cual “blindamos derechos” y la propia financiación para atenderlos.
El presidente regional ha considerado que, de entre todas las estrategias para defender la igualdad, “esta región tiene el orgullo de haber sido la primera en poner el dedo en la llaga” cuando en 2001 promulgó una Ley “pionera” que sacaba a la luz el “enorme pozo desconocido de la violencia machista”.
En ese momento “dimos en lo cierto”, y tanto es así que “todas las demás comunidades autónomas y el Estado han seguido este camino”, ha asegurado el presidente regional, para quien “la manifestación más extrema de la desigualdad es la violencia”.
A pesar de que en su momento se trató de una ley “controvertida”, la norma de 2001 colocó a Castilla-La Mancha “a la vanguardia” en la lucha por la igualdad, hasta que María Dolores de Cospedal llegó al Gobierno castellano-manchego “y se cargó el 60% de los programas de igualdad”, ha lamentado el presidente.
Por todo ello, “era más que obligado” que, tras todos estos años de trabajo en pos de la igualdad real, “esta región vuelva a ser la más avanzada en la lucha por los derechos entre hombres y mujeres”. Y no solo “podemos demostrar” lo que han subido los fondos en los programas de prevención en estos años, sino que “en la medida en que se amplían los espacios de protección, independientemente del presupuesto, nunca podrá faltar dinero para la protección de esos derechos que son recurribles ante los tribunales”, ha asegurado García-Page.
Esta nueva Ley, aprobada hoy en el Parlamento regional, “sí blinda con claridad el avance en materia de igualdad” y refleja que “dimos en la diana” con el anterior texto normativo. Pero además, ahora “aportamos una ampliación muy clara del espacio de lo que consideramos víctimas, recogemos la condición de víctima para los huérfanos cuando muere la madre aunque siga vivo el agresor, una novedad que se hará también generalidad en el conjunto de España, y establecemos una estrategia preventiva mucho mayor”, ha apostillado el presidente.
“Defensa clara de los derechos de todos” en el discurso del rey Felipe VI
Por otro lado, García-Page ha recordado el discurso del rey Felipe VI tras los acontecimientos del 1 de octubre del pasado año en Cataluña que, a su juicio, supuso una “defensa clara de los derechos de todas y de todos los ciudadanos». Así, y en referencia a la Constitución, ha manifestado que “puede cambiarse y quererse mejorar”, pero sin ella “no cabe ningún derecho de los que nos han permitido desarrollarnos como sociedad avanzada”.
Por ello, ha asegurado sentirse congratulado de que “ese rey al que algunos quieren insultar desde un parlamento fuera la primera autoridad pública en decir que este país tiene que cambiar las reglas, incluso en la sucesión a la Jefatura del Estado, para que haya igualdad entre mujeres y hombres”.
Y es que Castilla La Mancha sigue marcando el camino contra la violencia machista. Sin duda, un gran avance en la legislación contra la violencia de género.
Aunque no siempre fue así. Basta recordar que el Gobierno de la Sra. Cospedal suspendió los convenios con los trece centros de acogida de mujeres maltratadas y con los ochenta y cinco de información a la mujer en enero de 2012, lo que supuso el despido de cuatro cientos trabajadores de estos centros y el desamparo de más de noventa y seis víctimas. En fin,….