La campaña de la vendimia en Castilla-La Mancha, que ha comenzado ya para algunas variedades de uva, se generalizará a partir del 10 de septiembre, se prolongará durante unos 30 días –frente a los 20 del año pasado– y, según los cálculos de CCOO, generará entre 750.000 y 900.000 jornales y la contratación de entre 25.000 y 30.000 personas, la mayor parte de ellas inmigrantes.
En un comunicado, el sindicato ha destacado el «impacto laboral, que se obvia demasiado a menudo» de la vendimia, que la región afronta este 2018 con «excelentes perspectivas», tanto en cantidad como en calidad. De acuerdo a las previsiones de cooperativas y viticultores, la producción estimada aumentará respecto a 2017 no menos del 10% y hasta un 22%, según las distintas fuentes, que sí coinciden en que la calidad de la uva será «excepcional».
CCOO ha recordado que, además de su enorme importancia económica, cultural y social, «la vendimia es el mayor acontecimiento laboral de la región», según el secretario general de CCOO-Industria en la región, Ángel León, que ha apuntado que «los viticultores deben cotizar las jornadas reales de trabajo, pagar al menos lo que marca el convenio colectivo de referencia en cada provincia y, junto con los ayuntamientos, garantizar a los temporeros alojamientos dignos».
«No puede haber temporeros sin duchas ni inodoros, tirados en colchonetas junto a tractores de 80.000 o 100.000 euros», ha destacado León, que ha explicado que el sindicato está distribuyendo hojas informativas sobre la jornada, salarios, recomendaciones sobre los contratos de trabajo y alta en la Seguridad Social, alojamientos para los trabajadores inmigrantes o que se desplacen largas distancias desde su domicilio habitual, prevención de riesgos laborales y posibles irregularidades en materia laboral.
Además, CCOO-Industria Castilla-La Mancha mantiene su campaña contra los abusos y el fraude en las campañas agrícolas, así como un servicio de consulta y de denuncia online, totalmente anónimo. «A lo largo del verano estamos atendiendo consultas, pero, afortunadamente, no hay denuncias de situaciones que podamos calificar de graves», ha indicado León.
No obstante, el sindicato ha subrayado que «siguen cometiéndose fraudes, siguen produciéndose abusos y persisten los escenarios indignos en las condiciones de vida de los temporeros y de sus familias», por lo que CCOO ha abogado por «intensificar los controles, y es necesario imponer a los incumplidores sanciones ejemplarizantes. Todos los viticultores deben saber que no vale la pena incumplir la ley, que sale caro».
De otro lado, León ha advertido de que «se mantienen las diferencias regulatorias y salariales de los temporeros en función de la provincia en la que se ubiquen los viñedos», ya que el convenio colectivo de la provincia de Toledo establece un salario de campaña de 59,19 euros/día, mientras que el de la provincia de Ciudad Real fija el salario/día en 49,50 euros en jornada de lunes a viernes y en 41,25 euros en jornada de lunes a sábado.
«Estas diferencias son injustificables y no tienen ningún sentido, ni para los empresarios ni para los trabajadores. Hay que eliminar estos agravios; hay que ir a un salario/día de campaña de ámbito regional. Esta es una responsabilidad que la patronal regional Asaja tiene que asumir de una vez», ha comentado León.
De hecho, en lo que respecta a la provincia de Ciudad Real, que es con diferencia la que alberga mayor superficie de viñedo de toda la región –y de toda España–, «la propia realidad va por delante y muy por encima de lo establecido en el convenio».
«En la vendimia no hay jornada de lunes a viernes ni jornada de lunes a sábado; sólo existe la jornada de lunes a domingo. Y los salarios que se pagan en la vendimia en Ciudad Real no bajan en ningún caso de los 50 euros netos. Los dueños de las explotaciones saben que no van a encontrar temporeros a 41,25 euros brutos/día; mientras en Albacete se pagan según convenio 51,28 euros, en Cuenca 52,13 y en Toledo 59,19.»
«Hay que hay que unificar la regulación laboral de la vendimia y hay que avanzar sustancialmente hacia la equiparación salarial de los vendimiadores. Los convenios no pueden estar al margen de la realidad ni imponer agravios y distinciones provinciales entre explotaciones similares, incluso idénticas y limítrofes», ha finalizado el secretario regional de CCOO-Industria.