El Consejo Escolar Municipal de Ciudad Real ha decidido proponer a los centros de la capital que desarrollan comunidades de aprendizaje, los CEIP Cristóbal Colón y Pio XII, y a D. José Valverde Serrano como “Menciones Municipales a la labor educativa en Ciudad Real en 2018”.
En la sesión celebrada en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, se procedió a la votación para la concesión de las menciones a la labor educativa, tanto individual como colectiva, que serán entregadas en el acto homenaje a los profesionales de la educación previsto para el próximo 14 de junio. Las propuestas realizadas deberán ser aprobadas por la Junta de Gobierno Local.
En la mención individual, otorgada a D. José Valverde Serrano, se ha tenido en cuenta su trayectoria personal y profesional vinculada a la educación tanto como docente, en diversos destinos incluyendo el mundo rural, como su labor como sindicalista y como primer Consejero de Educación de Castilla-La Mancha en la gestión de la transferencia de las competencias en materia de educación por parte del ministerio.
La mención colectiva pone en valor el desarrollo de proyectos de Comunidades de aprendizaje como experiencias educativas dirigidas a garantizar el éxito educativo y social en contextos deprimidos fomentando actuaciones de innovación pedagógica, participación social e implicación de la comunidad. Comparten la mención los centros Cristóbal Colón y Pio XII, que son los únicos de Ciudad Real que vienen desarrollando este modelo a partir de las convocatorias realizadas por la Consejería de Educación y con la colaboración de distintas instituciones y entidades. Este modelo educativo está en consonancia con las teorías científicas a nivel internacional que destacan dos factores claves para el aprendizaje en la actual sociedad: las interacciones y la participación de la comunidad.
Además, en esta sesión plenaria, los miembros del pleno han tenido ocasión de abordar otros temas como el avance del trabajo realizado en materia de absentismo escolar, la participación de Ciudad Real en la Red de Ciudades Educadoras, el desarrollo de los presupuestos municipales para educación en el año en curso, y el seguimiento del programa de actividades extraescolares y complementarias organizado desde la Concejalía de Educación.
Espero que las menciones a los colegios no sean puro postureo y se traduzca en acciones eficaces por parte de la administración. Tuve la «suerte» de trabajar en uno de ellos hace dos años y realmente es un trabajo muy muy duro, que te deja tocada psicologicamente y que te sientes dejada a tu suerte. Redefinir el papel de estos colegios y/o ir más allá de las comunidades de aprendizaje y sobre todo proteger al docente debería ser tarea obligatoria de la administración. Todo lo que pone en el artículo queda muy bonito pero solo los que hemos trabajado allí sabemos la clase de situaciones que se viven, nada agradables ni gratificantes.
Maika, de acuerdo contigo.
Totalmente de acuerdo Mayka. La Fundación Secretariado Gitano con muchos menos medios ayudan bastante más que la propia junta y en fin, como tú has dicho, no son sitios donde trabajar sea un placer por ser muy suave.