Esta impresionante Puerta fue mandada erigir en el Camino Real de Toledo a Sevilla, de ahí su nombre, por el Rey de Castilla y León Alfonso X en el siglo XIII en torno al año 1255, terminándose en 1328 en tiempos de su bisnieto el Rey Alfonso XI; si bien son fechas aproximadas pues no hay documentación ni de su comienzo ni de su finalización sino sólo la orden del inicio de su construcción y un letrero en la misma puerta con la fecha de 1328.
Fue declarada Monumento Nacional el 4 de febrero de 1915. Se puede decir que es el Emblema monumental de Ciudad Real, pues aparece en su Escudo Municipal.
Constituye un buen ejemplo de la arquitectura militar gótica con algo de influencia Normanda, su originalidad está en que han llegado pocas puertas de este tipo hasta nuestros días y la mayoría están situadas en castillos. La forman dos sólidos torreones de planta rectangular que flanquean la puerta, formada por dos arcos apuntados muy peraltados; que cumplen la función militar de matacán a modo de fortificación, dos arcos de herradura apuntados forman el vano de la puerta, y descargando las bóvedas de crucería interiores se encuentran dos arcos apuntados, con escudos heráldicos cada uno, en su interior entre los dos arcos se encuentra el espacio para el hueco del rastrillo. Su Historia como sitio defensivo registra el asalto de las tropas Napoleónicas el 27 de marzo de 1809 tras la batalla por los puentes del Guadiana y La Atalaya.
Hay que destacar el Escudo del Rey Alfonso X “El Sabio” con las armas de Castilla y León en policromía roja y azul, único en toda la provincia y de los pocos que han quedado de la Edad Media en España.
El espacio interior entre la puerta exterior y la interior está dividido en dos mitades iguales, por el hueco del rastrillo situado entre dos arcos apuntados de estilo gótico, los espacios entre ambos están cubiertos por dos bóvedas góticas de gruesos nervios coronadas por blasones. También cuenta con una puerta y una escalera de 2 tramos para subir al techo de la puerta y manejar el rastrillo y vigilar, hoy en día le faltan las almenas y eso hace que olvidemos su función militar.
En el matacán de la puerta interior se halla una curiosa inscripción el latín en las que están inscritas la fecha de construcción y el nombre del Rey que la terminó. En la cara que da a la calle Toledo se hallan en los sillares 7 de marcas de cantero, cuya explicación está en la reutilización de los sillares de los edificios y muralla del cercano cerro de Alarcos, en especial de su muralla, alguna Marca presenta similitudes con las Marcas de la Orden del Temple, otras son claramente similares a las de la Catedral de Toledo y otras son de Canteros Navarros.
La Puerta también cumplía una función recaudatoria para Ciudad Real, cobrar el Portazgo a los comerciantes que quisieran pasar a Ciudad Real.
Tiene una Inscripción en Latín en el lado Sur que dice más o menos así:
“Visita, Señor, te pedimos este lugar y aparta de el todas las acechanzas del enemigo, que tus Santos Ángeles guarden la Paz de sus habitantes y que tu bendición sea siempre con nosotros. Sálvanos Dios Todopoderoso y concédenos tu Luz. Por Nuestro Señor Jesucristo. Hecho en la Era de 1366 (Año 1324). Reinando el Rey Alfonso el Ilustre” (Alfonso XI).
Historia e Historias de Ciudad Real
Antonio José Martín de Consuegra Gómez
https://ciudadreal.wordpress.com/
Una pena que el entorno urbano donde está sea tan soso y luzca tan poco, hace desmerecer mucho a la puerta.
Por dios,…hay que cuidarla que si se nos cae nos quedamos sin casco histórico…
Una inscripción que, a modo de oración, se rezaba en nuestra Catedral por los Canónigos en las horas canónicas, antes del descanso nocturno……