Jesús Millán Muñoz.- Continuamos intentando indagar algo del mundo, o mejor algo de lo buscado en el mundo, algo de todo ello, expresado en forma de palabras-frases. Creo que un escrito, éste o cualquier otro, tiene el deber de intentar no hacer perder el tiempo a nadie que se acerque a él.
Por tanto, siguiendo esta máxima que siempre he intentado aplicar, espero que estas preguntas y algunas soluciones le sirvan a usted, hipotético lector, a contemplar y mirar y remirar y observar más profunda y esencialmente la realidad y lo real. Lo real de dentro y lo real de fuera. O algunos aspectos de ello.
P. ¿Qué decir del fracaso escolar?
R. Que toda persona que se sienta que ha fracasado en algún nivel de la enseñanza reglada. Se plantee que mañana, puede continuar, que no debe dejar que el fracaso tenga la última palabra. Que puede volver de una manera o de otra, al sistema educativo, que trabaje o no trabaje puede volver a la enseñanza, tenga quince o setenta años. Esta creo es la aptitud y actitud esencial.
P. ¿Cómo?
R. Ser consciente que una persona, puede tardar dos años en terminar la ESO o el bachillerato y otra cinco, una a los quince y otra a los veinte o a los cuarenta…Nunca dejar de intentarlo, creo que esa es la fórmula. Seguir y proseguir, sea como sean las circunstancias. Nunca dejar de intentarlo. Evidentemente según las circunstancias, etc.
P. ¿Se puede hablar de todo y se puede creer todo?
R. Solo lo que sea más verificable y más verdadero y más racional y más demostrado y más bondadoso. Se pueden creer cualquier cosa o dato o hecho o concepto, pero se debe contrastar qué es lo verdadero y qué es lo menos verdadero, porque si no, al final, vas acumulando cientos de conceptos e ideas y observaciones y datos, que son a medias verdaderos y a medios reales, y a medias erróneos, y a medias falsos. En definitiva, que te vas autoengañando, y diríamos que hoy el mundo, como siempre, está formando de multitud de verdades y de multitud de errores. Y estos llevan a nuevas verdades, pero también a nuevos errores.
P. ¿Somos conscientes de nuestros actos?
R. La pregunta tendría que ser ¿somos conscientes de nuestros actos sean palabras, gestos, actos en sí, sobre nosotros mismos, sobre los demás, sobre los de ahora, sobre los de mañana? ¿O solo actuamos según nuestras pasiones o deseos o emociones o intereses o fines o metas…?
¿O incluso queremos serlo? ¿Queremos ser conscientes, es decir, actuar con responsabilidad, libertad, equidad, veracidad, de que nuestros actos tienen consecuencias…?
P. ¿Eso de Sartre que los demás son nuestro infierno?
R. ¡Posiblemente nosotros para nosotros mismos, nosotros para los demás, los demás para nosotros somos nuestro infierno, nuestro paraíso y nuestro purgatorio! ¡Ciertamente unos más que otros…!
P. ¿Vivmos en un tiempo de semilocura colectiva, de semiinconsciencia colectiva, sálvese quién se salve?
R. Posiblemente, hemos pasado en muy poco tiempo, quizás una o dos generaciones de una sociedad con una impronta claramente rural, a una sociedad postindustrial, por lo cual, los grandes valores tradicionales del pasado se han dejado, muchos de ellos, en la cuneta de la historia. Además habiendo pasado por varias revoluciones sociales, económicas, y desde luego en el caso de la Península Ibérica una enorme guerra civil, con consecuencias que están durando a generación tras generación.
P. ¿Por qué unas personas tienen éxito en la vida, o tienen más éxito en la vida que otros, por qué en su vocación o profesión y por qué otras personas, no o muy poco…?
R. Creo que necesitamos una revolución teórica, o mejor dicho, una profundización en el saber. Creo que es absolutamente necesario que entendamos mejor el mundo, para ello, tendremos que dedicar más recursos a la comprensión del mundo. Creo que tenemos que aunar los conocimientos de todos los saberes y ciencias, y en segundo lugar, creo que en este problema y en todos, qué solución nos daría la matemáticas.
P. No comprendo bien, lo que nos dice usted.
R. Es fácil, creo que tenemos más de veinte ciencias, tenemos además la filosofía, las culturas en general, las estéticas y las artes, las religiones-teologías, etc. Y el grave problema es cómo aunar y sintetizarlas. En un mundo global, de enormes retos, tenemos que también sintetizar los diversos saberes. Ante un problema que nos indiquen lo que nos dicen todos los saberes y ciencias y filosofías y culturas.
P. ¿El hombre se siente perdido?
R. Valore usted cómo vivía y existía un ser humano hace cien años, en lo bueno y en lo malo. Y valore como vive hoy. Todos los cambios que ha sufrido. Imagine usted que hace cien años, alguien consumía equis cantidad de imágenes al año, cuántas imágenes recibe hoy un ser humano cada año. Ese factor, simplemente esa variable es suficiente para que todo haya cambiado en el ser humano. Dentro y fuera. Y en eso estamos en un mundo que no sabemos dónde nos llevará o, y dónde nos llevaremos.
