La consejera de Fomento, Agustina García Élez, ha avanzado este lunes que, de cara a la reunión que va a celebrar esta tarde la Confederación Hidrográfica del Tajo, el Gobierno de Castilla-La Mancha va a pedir que se pongan sobre la mesa medidas, “no solo porque se vaya a establecer un decreto de sequía en la cuenca del Tajo, sino un decreto que venga unido de obras de emergencia que necesitamos para garantizar el abastecimiento en los municipios que se vean afectados, pero también contraprestación para los regantes que se vean afectados”.
García Élez ha asegurado que es necesario “decir claro y alto que la Confederación Hidrográfica del Tajo llega tarde a poner una alarma en una situación en materia de agua que no es nueva, que lo venimos diciendo desde hace muchos años, que los pantanos se estaban secando, y que seguían mirando para el mismo sitio. Que iba a tener consecuencias para Castilla-La Mancha y ahora lo estamos comprobando”, por eso ha indicado que las restricciones que ya ha anunciado la CHT en materia de agua “van a suponer un problema para nuestra gente, para nuestros regantes y nuestros municipios. Y por supuesto desde el Gobierno de Castilla-La Mancha vamos a seguir defendiendo que el agua se quede en nuestra región”.
La responsable de Fomento ha manifestado que en la situación actual “tenemos un serio problema, pues ya se ha ido el agua por una tubería y en los pantanos tenemos menos capacidad y volumen del agua que se ha ido por ella”, y ha lanzado varios mensajes a los responsables de la Confederación, cuando desde Castilla-la Mancha ya se venía anunciando. “¿Ahora sí que somos nosotros quien tenemos que pagar las consecuencias? ¿Ahora sí que son los regantes de Castilla-La Mancha y los ciudadanos de Castilla-La Mancha los que tenemos que pagar esas consecuencias? Nuestro objetivo es claro. Que pongan en la mesa medidas”, ha enfatizado.
Así, se ha referido a que desde el inicio de la legislatura la posición en defensa del agua ha sido clara desde el Gobierno regional, pues el presidente Emiliano García-Page lo ha dicho en todos los foros posibles, en el Parlamento, en los medios de comunicación y a la propia ministra, e incluso en la Conferencia de Presidentes, “y es que no vamos a permitir en Castilla-La Mancha que nuestro crecimiento y desarrollo sea siempre a costa del desarrollo y crecimiento de otra zona. Por tanto, antes de decirle a los regantes de nuestra región que tienen que dejar de regar, lo que tienen que hacer es poner encima de la mesa otras medidas como contraprestación para paliar esta situación como ya se ha hecho en otras zonas del país”, porque como ha manifestado “ni ellos ni ningún ciudadano de Castilla-La Mancha tienen que soportar una falta de agua, cuando se la han estado llevando a otras comunidades”.
“Seguimos diciendo que lo que no es de recibo es como están los pantanos de cabecera, con menos del 10 por ciento de su volumen, y que el Ministerio no aprobara un plan de sequía para el Tajo. Le hemos dicho que no podían establecer los planes de sequía por la cuenca, sino que nuestra petición es que se establezca por subcuencas, pues no es lo mismo el problema del Tajo de los pantanos de cabecera, que en el Alto Tajo”, ha manifestado la consejera, indicando que la parte más afectada es la zona del Alberche y del Tajuña.
Mejora del abastecimiento en Campillo de Altobuey
La responsable de la Consejería de Fomento ha realizado estas declaraciones en su visita hoy al municipio conquense de Campillo de Altobuey donde ha visitado las mejoras llevadas a cabo en la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP), junto al alcalde Francisco López, y el director gerente de la Agencia del Agua, Antonio Luengo.
El objetivo, como ha explicado Agustina García Élez, “es dar calidad y cantidad de agua en una zona complicada; en una zona rural donde necesitamos sobre todo garantizar los servicios. Se encontraban un problema de nitratos que actualmente se está solucionando. Desde la Agencia del Agua se han invertido unos 90.000 euros en dos fases, una primera fase ya terminada, y una segunda, que va a consistir en la impermeabilización del depósito y una estructura para depositar la sal y actuar en la obra que se ha hecho, con la garantía de que el agua que beban en Campillo sea de calidad como se merecen los vecinos de la localidad y de Castilla-La Mancha”. En este sentido, se ha instalado un equipo de filtración y desmineralización para solucionar el problema de alto contenido de nitratos en la composición del agua de la localidad, y una segunda fase, que se verá concluida en un mes y medio.
La consejera ha señalado que la mejora en el abastecimiento, es una “verdadera obsesión del Gobierno regional”, por lo que en lo que va de legislatura se ha invertido cerca de 50 millones de euros en toda la comunidad autónoma, de los cuales cerca de cinco corresponden a la provincia de Cuenca.