El toro de fuego que después de medio siglo de ausencia volvió este viernes a recorrer de nuevo la calle Triana de Almodóvar del Campo, en el marco de los actos de celebración de san Sebastián organizados por el Ayuntamiento y los vecinos de este barrio, se conjugó con la templanza de los termómetros y el hecho de estar en la antesala al fin de semana, para atraer a cientos de personas a la tradicional candelaria y venerar festivamente a este mártir.
De hecho, el propio alcalde que fue uno de los asistentes reconocía que “nunca he visto san Sebastián, y ya llevo unos cuantos años viniendo, como hoy [por el pasado viernes] está, un día grandísimo de la gente que hay y es de agradecer que los ciudadanos quieran acompañarnos”. Por eso, José Lozano decía sentirse “muy orgulloso” de la respuesta de sus conciudadanos, apuntando que las circunstancias así lo habían hecho posible, entre ellas “el toro de fuego, que sin duda ha movilizado a mucha gente”.
Los actos en honor a san Sebastián, cuya ermita está situada en la carretera de Brazatortas, comenzaban, en vísperas de su día grande, con el encendido de la candelaria, alrededor de las 20:30 horas. Media hora después la pólvora cobrara protagonismo, con las habituales atracciones pirotécnicas a las que este año se sumó el toro de fuego que hizo varias incursiones arrancando la alegría de asistentes de todas las edades.
Manuel Hipólito, el estudioso por antonomasia de esta tradición, explicaba que fue en torno al año 70 de la pasada década cuando irrumpió por vez primera el toro de fuego. “Fue por enaltecer un poco la fiesta y darle más brío”, apuntaba este vecino del barrio de san Antón que sí fue testigo en su niñez del espectáculo.
El alcalde, que estuvo acompañado por las concejalas Lidia Paz y Virginia López, que no lo presenció entonces, recuerda que, efectivamente “hace cincuenta y tantos años, según me cuentan, esto se realizaba y personas mayores sí lo recuerdan y me dicen que se celebraba únicamente en esta candelaria”.
Tras el éxito de esta reedición, Lozano García aboga por potenciar este contenido, “para que el año que viene sea todavía más espectacular y pueda atraer a gente no solo de nuestra comarca o de la provincia, sino incluso del resto de la región y del país, para que vengan a conocer nuestras tradiciones que son tan bonitas y en particular las candelarias que son dignas de mencionar más allá de nuestro pueblo”. Y apunta que este acervo se mantiene y crece gracias al apoyo de la ciudadanía.
A la componente más lúdica del viernes, en el que no faltó la música de la Banda ‘Pablo Sorozábal’ o el habitual agasajo de aperitivos y limonada a los asistentes, o la posibilidad de recibir alguna de las 5.000 rosquillas que se ofrecieron con el donativo al patrón del barrio al que da nombre y el Pilar de Abajo, siguió ya este sábado el contenido más religioso.
Así, al mediodía tenía lugar la ceremonia eucarística a cuyo término los feligreses tuvieron la oportunidad de venerar la reliquia que la población guarda de san Sebastián. Y por la tarde, también multitudinaria, fue la procesión en la que el patrón cubrió el largo trayecto que separa el templo parroquial de su ermita, en este caso bajo los acordes de la Banda de Cornetas y Tambores ‘Jesús Rescatado’.
San Sebastián santo milagroso
En estos días se conmemoran situaciones portentosas que se atribuyen al santo, como el accidente que sufrió una vecina cuando una noche, en el día de san Sebastián de hace alrededor de tres décadas, regresaba por carretera a Almodóvar del Campo, con tan mala suerte que el vehículo acabó en el interior de la laguna de Caracuel. De allí fueron rescatadas ella misma, su hija y la conductora, por otros parientes que, milagrosamente, pasaban por el lugar con el tiempo justo ya para auxiliarles.
“Estuvimos luego tres días en el hospital porque teníamos muchas heridas de cristales, pero lo cierto y verdad es que san Sebastián bendito nos salvó la vida”. Quien lo refiere es María, que así se llama esta agradecida madre que renueva, cada año desde entonces, su particular ofrenda al santo mártir ante la oportunidad de volver a nacer que le dio junto a sus otras acompañantes.
San Sebastián tiene también una secular andadura de fervor en Almodóvar del Campo dado que, como rememora Manuel Hipólito, en las cercanías de la ermita hubo un monasterio de carmelitas descalzas que fue trasladado a Toledo desconociéndose las razones y en 2015 con motivo del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa la población recibió la reliquia referida. Otro hecho destacable, refiere, es el himno que compuso a este santo Gumersindo Miguel Baos, con música de Tomás Villajos.
Junto al Ayuntamiento, a la hora de contribuir a la organización de los actos está la Asociación Cultural de Vecinos del Barrio del Pilar de Abajo y San Sebastián que preside actualmente Isabel Corchero y que sucedió en el cargo a Roberto García-Minguillán de Gregorio, quien no obstante mantiene también su entusiasta aportación para que estas celebraciones gocen cada año de mayor pujanza.