De las cargas policiales, las oportunidades perdidas y el discurso del Rey

ReymondeProbablemente las masas que salieron en Siria en la primavera árabe o con la independencia de Eslovenia, seguramente no imaginaron el alcance que tomaron los acontecimientos después ¿Sucederá lo mismo en España? Espero que no. Pero no puede darse por hecho confundiendo una vez más realidad con deseo, es preciso que todos seamos conscientes del riesgo y extremar la prudencia antes que desatar la exaltación, porque la tensión que nace en Cataluña y se extiende al resto de España crece demasiado rápido y con demasiada intensidad. Los símbolos, los gestos, son importantes para todos; y en un momento en que la irracionalidad sentimental sobrepasa a la contención y la racionalidad, incluso pueden derivar y alcanzar más valor que los propios hechos de base.El mes de octubre se anuncia muy distinto al de septiembre.

Cuenta una leyenda urbana que los antidisturbios toman estimulantes antes de salir a actuar. Yo no me lo creo, me parece absurdo e innecesario acudir a estímulos químicos para subir la adrenalina de los agentes. Para empezar, la motivación: cualquier policía, seguro que tiene una profunda conciencia del deber y del orden, y de la importancia de su propio papel para mantenerlos – aunque cada uno de ellos pueda entenderlo de manera más o menos acertada (al fin y al cabo, son personas). Después, el rito de prepararse para la acción: el vestuario, el cambio de impresiones con los compañeros, viajar con ellos en un furgón y llegar al escenario; como dirían los actores, con esta parafernalia ya está conseguida la mitad de la actuación. Por último, la acción, con un casco en la cabeza que distorsiona los sentidos, sabiendo que es lo más parecido a la tauromaquia, que a pesar de la aparente ventaja que proporciona el entrenamiento físico y táctico, hay que enfrentarse a una multitud probablemente alborotada y cualquier despiste puede suponer una lesión importante o irreversible. Es una suposición, claro está, pero esta realidad deben conocerla los mandos policiales mejor que yo: la actuación de los antidisturbios puede resultar por momentos incontrolada. Cualquier posible exceso podrá quedar impune mediante argucias legales, pero la fría realidad de las imágenes dará cuenta de sus actos.Esto lo tendrían que haber previsto los mandos policiales antes de actuar contra la gente en Cataluña el día 1 de octubre, pero la falta de previsión sobre las consecuencias de las actuaciones policiales ha tenido un efecto devastador. El gesto del policía sacando por los pelos a una mujer o pisoteando a una persona que se resistía pacíficamente a un desalojo (esto es, agarrarse a algo para impedirlo, que no es lo mismo que agredir) se ha convertido en la Marca España por todo el mundo. Cosa perfectamente previsible.

La presencia en Cataluña de refuerzos de la Policía Nacional y la Guardia Civil era necesaria para impedir el referéndum ilegal, mediante la anulación de las garantías necesarias en cualquier proceso limpio y de reconocimiento internacional: el censo, las papeletas, la web, etc. En cierto modo, se había conseguido el objetivo de desacreditar la celebración y los resultados de la consulta. Pero las actuaciones policiales del 1 de octubre fueron un inmenso error ¿Cuál era su objetivo? No podía ser la incautación del máximo número de urnas llenas de papeletas, porque de haber sido así, hubieran actuado sin tregua a lo largo de todo el día por la mayor cantidad posible de localidades, suficientes para alterar el resultado final. Siendo algo meramente puntual, como lo fueron, a primera hora de la mañana, resulta una actuación absurda, porque está claro que la gente no iba a dejar de votar; y si fuera preciso, las votaciones podrían producirse después de la actuación de la Policía Nacional. En resumen, si éste hubiera sido el objetivo, fracasaron estrepitosamente. O sea, que entonces era pura imagen, con una calle llena de cámaras y periodistas atentos a ver en qué momento y lugar se producía la imagen más sensacionalista y morbosa, como el Gordo de la Lotería ¿En qué cabeza cabe que la gente vote en un referéndum ilegal y que la policía no actúe contra los votantes? En la cabeza de los correligionarios del Gobierno, evidentemente ¿Acaso podría haber actuado la Policía Nacional de otra manera? Está claro que sí. Ante las manifestaciones, acoso y provocaciones que siguen sufriendo los agentes que se han desplazado allí desde toda España (y que, por cierto, se sienten desamparados por el Gobierno nacional) esta vez la Policía no actúa. Pero ya es tarde para cambiar la imagen: las oportunidades hay que aprovecharlas cuando es oportuno (valga la redundancia).

Creo que no es fácil, pero intentemos hacer un esfuerzo de imaginación. Imaginemos que el Gobierno de nuestra región, por ejemplo, después de una sequía de años impide un nuevo trasvase de agua del Guadiana al Segura, que nuestros vecinos acuden al Pantano del Vicario para impedirlo, y que ante la pasividad de la policía de aquí vienen policías de Murcia para hacer cumplir la ley, para lo cual deciden liarse a porrazos y patadas contra estas personas. Saquemos conclusiones sobre fobias creadas. Probablemente no sea el mejor ejemplo (las comparaciones son odiosas, y más contra la realidad), pero es indudable que la nueva Marca España ha causado una enorme indignación no solo en buena parte de la sociedad catalana, sino en nuestro país y en el extranjero.

Esas imágenes, que han dado la vuelta al mundo, han hecho un daño que parece irreparable. El hecho de que las imágenes no se truquen, no significa que no pueda haber manipulación informativa. Por desgracia estamos demasiado acostumbrados a ello: imágenes donde desaparecen los desencadenantes o las consecuencias, imágenes completamente fuera de contexto, etc. Anécdotas e imágenes sensacionalistas de las mismas se multiplican de tal modo que resulta difícil estar impasibles frente a ellas sin contagiarse de cierta inquietud, y creo que además es imposible ver todo cuanto hay. Sobre todo porque buscamos y nos llegan las imágenes y las noticias por los canales habituales – que refuerzan nuestro modo de pensar – y por las redes sociales: poblaciones acosando a la Guardia Civil en retirada, espontáneos indignados por el agravio que agravian arrancando una bandera de España del balcón de un ayuntamiento sin nadie que se lo reproche, partidarios de la unión o la secesión a tortas, despliegues de numerosos guardias civiles para retirar urnas en poblaciones de menos de 30 habitantes… Si esto parece poco, la imagen de Sáez de Santamaría orgullosa de esta actuación ha sido aún más lamentable. Me recuerda a George W. Bush, cuando se dirigió a sus tropas al “terminar” la guerra de Irak. Iluso. Ilusa.La batalla de la imagen la ha perdido el Gobierno de España, y con él la población española, porque se ha transmitido la imagen de un Estado europeo que ha actuado sin dialogar, y ejerciendo la violencia para impedir una votación. De acuerdo, era una consulta ilegal, pero eso ¿qué más da, si lo importante es la imagen, aunque el contexto sea distinto?En consecuencia, el independentismo se ha beneficiado mucho de esta nueva sobreactuación del Gobierno.

Dicho de otro modo, estas actuaciones suponen un enorme lastre para reconducir la confianza y la convivencia; en consecuencia, los responsables de estas actuaciones no solo han dañado a la población catalana, sino a la española. Deberían ser cesados o dimitir: hasta los sindicatos policiales lo exigen, y el PSOE pide en el Parlamento la reprobación de la Vicepresidente del Gobierno. Si el daño parece irreparable, al menos que no sea irreversible.

En esta partida de ajedrez, donde el enroque y los peones dificultan la derrota del adversario, ha sido necesaria la intervencióndel Rey, en un discurso a la Nación española. Antiguamente, antes de la división de poderes, la Justicia era potestad del Rey. No solo esa idea perdura en el inconsciente colectivo, sino que en cierto modo es el papel que le atribuye la Constitución, el papel de moderador, de rey de todos los españoles. Conviene prestar atención a sus palabras.

El discurso del Rey se ha dirigido en primer lugar a todos los españoles, recordando que el Gobierno catalán ha incumplido la Constitución y la legalidad, ha quebrantado los principios democráticos, ha socavado la convivencia pacífica en la sociedad catalana, ha pretendido quebrar la unidad de España y la soberanía nacional, poniendo en riesgo además a su economía; asimismo recuerda que es responsabilidad de los legítimos poderes del Estado asegurar el orden constitucional y el funcionamiento de las instituciones. A continuación se ha dirigido a todos, pero especialmente a los catalanes, para recordarles que desde hace décadas vivimos en un estado democrático donde se pueden defender las ideas con respeto a la ley. Luego dice, textualmente: “en Cataluña también hay mucha preocupación y gran inquietud con la conducta de las autoridades autonómicas. A quienes así lo sienten, les digo (…) que tienen todo el apoyo y la solidaridad del resto de los españoles, y la garantía absoluta de nuestro Estado de Derecho en la defensa de su libertad y sus derechos”. Por último, se dirige al conjunto de los españoles que viven con desasosiego y tristeza les transmite un mensaje de paz y esperanza, subraya su entrega al entendimiento y la concordia y su compromiso con la unidad y permanencia de España.

Sobre la actuación del Rey, nunca trasciende nada, y en este conflicto tampoco. Pero esta vez era imprescindible que trascendiera a la opinión pública. Los catalanes están divididos, pero buena parte de los mismos se están planteando ahora mismo si tras la actuación policialdel 1 de octubre merece la pena seguir formando parte de España. En lo más profundo, es algo insignificante, porque sobreactuaciones policiales las ha habido siempre y seguirán habiendo. Pero la diferencia es que, esta vez, parece que las imágenes de la sobreactuación policial han impactado enormemente a una parte importante de la sociedad catalana. En mi opinión, creo que ha sido un enorme error que el Rey no haya reconocido ningún error en la gestión del Gobierno de España,que hay catalanes y españoles queno solotienenmucha preocupación y gran inquietud con la conducta de las autoridades autonómicas, sino un sentimiento similar hacia la conducta de las autoridades nacionales: si ese es el modelo de la susodicha garantía de la libertad y del Estado de Derecho, si la falta de diálogo y el boicot es la estrategia permanente del partido gobernante ¿qué confianza se puede seguir teniendo en el Estado español y en el arbitraje de la Corona, por mucharazón(toda) que tenga el Rey en el resto de su discurso?

Era su oportunidad de revalidarse como Rey ante “todos los españoles”, en especial ante los catalanes, como hiciera su padre el 23-F de 1981 vestido de Capitán General de todos los ejércitos. Pero honestamente, por mucho seguidismo que obtenga de partidos políticos, instituciones y voces influyentes, creo que ha sido una oportunidad perdida para recuperar a buena parte de la sociedad que todavía confiaba en él como penúltimo recurso.De entre “todos los españoles”, muchos se avergüenzan de la pasividad de la actuación del Gobierno y le hacen corresponsable de todo lo que está pasando.En mi opinión, el discurso del Rey ha carecido de equidad.

Desgraciadamente, los acontecimientos suceden tan deprisa que los juicios y opiniones caducan en muy poco tiempo. El problema no ha acabado, sr. Bush.

Pares y nones
Antonio Fernández Reymonde

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27 COMENTARIOS

  1. Creo que el Rey no estaba en situación de respaldar o rectificar al Gobierno de la Nación. Su posición es TRASCENDENTE, se trata de defender el Estado social y democrático de Derecho.

    Su estrategia es acertada. Defender la Constitución, no salirse de ella y advertir a todos los Poderes del Estado ((incluida la Generalitat) que están sujetos a ella con lo que ello implica.

    Ha cambiado el ritmo y lo impulsa. Puigdemont a remolque ahora.

    No hay diálogo posible si ellos se empeñan en salirse de la legalidad.

    Y luego que cada español lo juzgue libremente. Pero mientras tengamos este orden constitucional, éste se cumple. Si hay que cambiarlo no será con la DUI, que es algo así como la píldora del día después del discurso del Rey.

  2. Me alegra mucho leer este texto que está en consonancia con la inmensa mayoría de analistas a nivel nacional.

    Demasiado ruido ahora mismo. Muchos interesados en sacar las cosas de contexto, en ponerle altavoz a pensamientos irracionales. Exceso de legitimidad y ausencia de realidad.

    Como republicano convencido no voy a decir que me alegra, porque esta situación no alegra a nadie, más bien asusta, pero deja claro que la figura del monarca no ha servido para nada en la primera cosa importante a la que se enfrenta. Ha tenido la oportunidad para enfrentarse a su 23F y, lamentablemente ha hecho el discurso que podía hacer Rafa Hernando.

    Esta noche, a la misma hora, tenemos la otra cara de la moneda. Tenemos a Puigdemont en la tele, y ya adelanto que los que le escriben el discurso no van a ser más listos que los militares y funcionarios aburridos que se lo han hecho al Rey. Otra pena y otro horror.

    Mira lo que dice el bruto de Ramón Cotarelo, que ya está el hombre fuera de sus casillas: El Borbón me ha ganado. Creí que salía a proclamar la República Catalana y resulta que también ha proclamado la española.

  3. La dureza policial proyectó en el extranjero una imagen de España que nos avergüenza.
    Parece que, después de más de cuatro décadas y tras una glorificada Transición, las costuras de la estrecha democracia española han saltado por los aires.
    Un referéndum legal y pactado hubiera sido la posible solución hace ya unos años, pero 893 heridos más tarde, hay que volver a la mesa y gobernar sin recurrir constantemente a los jueces.
    La recogida de firmas para devaluar la autonomía catalana, la falta de respeto y la intransigencia, siguen siendo ‘Marca España’…..

        • Yo creo que más que «autonomía» es «modelo de estado» y de relación. Por ejemplo, España no tiene autonomía alguna en economía, al estar tutelada por la UE y sigue siendo el «Reino de España» para solaz del facherío patrio y patriota.

          Personalmente creo que no se van a ir, porque ni España, ni la UE lo van a permitir. Lo que realmente me da miedo es la convivencia a causa de los radicales de un lado y otro. Los años que nos esperan de tensiones si esto no se arregla.

          Siempre habrá descerebrados que quieran usar la violencia y no podemos permitirnos otro conflicto vasco. Ni el más mínimo. Porque somos muchos los que hemos vivido gran parte de nuestra vida comiendo cadáveres reventados al mediodía. En su mayor parte de policías y Guardias Civiles.

          Parece que, a través del Arzobispo de Barcelona se ha abierto una puerta. Bienvenida sea. Aunque personalmente creo que la puerta que habría que abrir es la del Congreso y encerrarlos hasta que lleguen a un acuerdo sin pan ni agua. Como se hizo en 1268 del que salió elegido Gregorio X. Se agradece el papel de la Iglesia, pero es el Congreso donde habla la sociedad en general. Y, en este caso, la Iglesia catalana está muy escorada hacia el independentismo.

          Para acabar, estos políticos españoles de los que estamos hasta los huevos son muy gallitos frente a la cámara y no, hay que ponerlos frente a frente que es donde se demuestra la «hombría», término asqueroso con el que hago referencia a políticos y políticas. Que se digan las cosas a la cara y, si se matan, que sea dentro del congreso, que siempre será muy democrático y aséptico. Pero que no manden a morir a otros por sus cojones.

        • Al parecer, el Gobierno se siente molesto por la nota de los obispos sobre el conflicto de Cataluña….

      • Claro que sí, Hobbes, por lo que a mi respecta, República Federal . Y no de ahora, que se ha puesto chunga la cosa. Ayer y siempre , sin moverme ni un milímetro. Pero sin sacar las cosas de su contexto. El rey pronunció un discurso que lo ha convertido en un líder natural para algunos y en un villano para otros. Y a lo mejor hay que centrar el balón y no perder la perspectiva. Porque la intervención del monarca empieza y termina en esos minutos de ayer, defendiendo sin ambages la supervivencia de la integridad de un Estado que es a un tiempo su propia supervivencia. Y ahí acaba su recorrido, aunque bajo cuerda tenga sus conversaciones con Rajoy y Puigdemont. El famoso reina pero no gobierna.

        • Lo siento, pero el Rey lideró ayer a la Nación española, ni al Estado del que forma parte pero no lidera, ni al pueblo español que elige a sus representantes y él no lo es.

          No confundamos al Pueblo español que es un cuerpo político y el Rey no pertenece a él sino como uno más pudiendo votar, lo cual no hace, con la Nación española, que voilá existe como una realidad y no como una entelequia.

        • Las repúblicas también tienen Nación, con Jefes de Estado, como lo es el Rey.

          Este no es elegido por las urnas, sino legitimado por continuación histórica de un Estado con más de 500 años de existencia.

          Y se puede ser monárquico o republicano, pero se debe está explicación de Derecho Político.

        • Jesús, qué república tan monárquica debe ser la tuya.

          Me gustan los catalanes porque hacen cosas…

  4. La situación extrema de Cataluña, la reacción a ella de los republicanos militantes de este país, y el discurso de ayer del Rey, han convertido a la mayoría de los españoles en decididos monárquicos.

    Y eso simplemente, porque la sociedad española reacciona PORQUE NO VIVE EN LA LUNA.

    • Y porque tiene su orgullo de ser español pese a que se le ha machacado con lo contrario por todos los que en realidad, se consideran intelectual y moralmente superiores a la «plebe españolista».

      SÍ, LA NACIÓN ESPAÑOLA Y EL PUEBLO ESPAÑOL EXISTEN.

      Y ni Rajoy, y menos PSOE y Podemos y demás progrifracasados, pueden liderlas, salvo el Rey ayer.

      Su reacción es espontánea, libre, y tan racional como emocional, porque está harta de humillaciones, dirigismos políticos, y porque NO van a consentir ABANDONAR A SU SUERTE A LOS CATALANES ESPAÑOLES, QUE SON ESPAÑOLES PATA NEGRA, por todo lo que han sufrido que sufrir durante décadas por el fascismo nazionalista y la inacción del Estado español.

      • Habla por ti, o por la gente con la que te suelas rodear, pero yo creo que el discurso del borbón de anoche no ha hecho nada mas que reafirmar posiciones: Para quienes aborrecemos tener que mantener a este tipo, nos ha parecido mas de lo mismo, un representante anacrónico sin cultura democrática y representando la vieja guardia.
        Quien comparta su visión de nación y tambien apoye la manera con la que se está actuando, pues eso, le habrá parecido bien, mas de lo mismo.

        Tu a lo tuyo, engreido, creyéndote con la verdad absoluta y soltando soflamas pendencieras.
        Vemos todos con tus comentarios, la «democracia» que representas: La tuya, la tuya y la tuya.
        Pues eso, lo siento Angel Manuel, pero no es democracia.

        • Si no estamos en una democracia, la cubana o venezolana, o coño más cerca, la de Puigdemont, Junqueras y el sandalio, menos.

          No hablo del pueblo español al que tú perteneces como yo, sino de la NACIÓN ESPAÑOLA. Esa que espanta a populismos e izquierdistas.

          No estoy engreído, es que tú sencillamente me sobrevaloras porque me temes.

          No es mi verdad absoluta, es la existencia real y concreta de una Nación española.

          Y no soy pendenciero, no soy Puigdemont.

  5. Estoy hasta los mismísimos h….. de que siempre que actúa la POLICÍA O GUARDÍA CIVIL (tal cual, es decir, en mayúsculas, subrayado y en negrita ) tengan ellos la culpa.
    Que siempre, que a la postre, que son lo último de lo último, y a los que se recurre en última instancia, cuando hay un problema, o la cosa se sale de madre, (político, social, orden público, manifestaciones del 15 M, rodeo del congreso, manifestaciones de ultraderecha, ultraizquierda, contra la globalización, celebraciones de títulos deportivos, huelgas generales, anti-sistemas, destrozos, … y así, hasta el infinito) siempre , siempre y siempre acaben teniendo la culpa: por no saber medir la fuerza, que si una minoría, que si desobediencia pacífica, que si eran niños y ancianos, que si resistencia pasiva, que si desproporción en sus actos y bla, bla, bla….. etc,.
    Porque, en este caso, el de Cataluña, la culpa o los responsables, no son los Molt honorable Pujol, Más, Puigdemont, Romeva, Junqueras, ni la Presidenta del Parlament, ni la CUP, ni ERC, ni JUNST PEL SI, nacionalistas. Tampoco tienen ninguna responsabilidad los gobernantes nacionales (y digo nacionales, porque si digo españoles, parecerá que los anteriores no lo son) González, Aznar, Zapatero, Rajoy, la oposición, la ley electoral, la transferencia de la educación, los alcaldes y concejales catalanes.
    La culpa no es de la corrupción, de los partidos políticos, todos los partidos políticos, del Ministro del Interior , tampoco tienen nada que ver el Juez o los Jueces que mandaron a las fuerzas de orden público, el jefe del operativo, la Fiscalia, el TSJC, el Mayor de los Mossos, Sr . Trapero, y alguno más que hace poco ha sido imputado por sedición.
    La sociedad catalana que ocupó colegios, desobedeció una orden judicial, los padres irresponsables que acuden con niños, los profesores que adoctrinan a menores, todos unos santos. Santos, también, los medios de comunicación afines a la independencia de Cataluña, las empresas, … Por cierto hablando de santos, se me olvidaba la iglesia. Los párrocos, curas, mosen o como quiera que se llamen, esos que hacen un manifiesto por la independencia, exhiben una estelada en una iglesia, o permiten el recuento de votos durante una misa, estos, seguro que ya tienen un lugar reservado a la diestra de Dios padre.
    No importa si me he dejado a alguien o no, para que , si al final, el resumen, siempre, ahora y en todo lugar, y por el motivo que sea, es que la culpa es de la POLICÍA O GUARDÍA CIVIL, (subrayados, en negrita y más grandes aún) ¡VIVA LA POLICIA Y LA GUARDIA CIVIL!

    • A mi los tibios me repugnan. Yo imagino, que el articulista, si viera a un hombre forzando a su hija para violarla, no utilizaría la violencia. Mesurado, con temple a pesar de la situación, intentaría solucionar el problema de manera pacífica, dialogando. Por aquello de la imagen. Sigo la línea de comparaciones abierta por don Antonio. Algo odiosa. Y Nada más.

      Para mí, la Guardia Civil y la Policía es lo mejor de estos últimos días. Los únicos que, en precario y con todo y todos en contra, están amparando a las víctimas de unos totalitarios amamantados y pagados por todos los políticos, incluyendo a los nacionalistas, desde 1978.

      Yo tengo muy claro quiénes son los malos. La Guardia Civil y la Policía son los buenos.

      ¡VIVA LA POLICÍA Y LA GUARDIA CIVIL!

    • Las actuaciones policiales hay que entenderlas en dos fases: las órdenes y las propias actuaciones. Yo soy crítico con los que mandan, creo que solo éstos son los culpables, y estoy señalando (o al menos, eso pretendo), que este trabajo somete a los agentes a una tensión enorme, al límite de la capacidad. Tal vez eso explique el hecho de que a menudo un manifestante ya reducido se pueda llevar gratuitamente algún palo de más. Y aunque no sea la norma, es inevitablemente lo más llamativo. Pero tampoco justifica que pueda haber agentes que se refugien en su condición de autoridad e impunidad para hacer excesos a conciencia, que es muy probable que existan
      De la profesionalidad de estos cuerpos, da cuenta el temple con el que están resistiendo el acoso. Así, sí, viva la policía y la guardia civil.

  6. El Gobierno debe aplicar ya la Constitución que tanto le duele que sea asaltada. Ya no hay más salida, y os aseguro que los independentistas no van a recular por iniciativa propia ¿ a qué espera el gobierno para aplicar la ley de leyes?

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