Y llegó el día deseado. El momento para el que la nueva junta directiva, patrocinadores, instituciones y colaboradores se habían preparado. Los dos equipos del club, C. B. Lineal Ciudad Real en su versión masculina y el C. B. OYE Ciudad Real en la femenina, se presentaron ante su afición con la misma ilusión de un niño que estrena zapatillas nuevas. El club que tantas alegrías ha dado a los aficionados al deporte de la canasta en Ciudad Real regresa con energías renovadas. Surge un nuevo proyecto que aglutina gente joven y veterana con ganas de aportar su granito de arena.
Antes del primer partido, fue el turno para la presentación de las dos plantillas. De la mano de los jugadores, los chicos y chicas de la cantera de la A. D. Prado Marianistas, presente y futuro del baloncesto en Ciudad Real. Junto a ellos, José Luis Rodrigo, presidente de la Federación de Castilla La Mancha, apoyando el proyecto.
Tras este breve y emotivo acto, turno para los partidos de presentación. En primer lugar el equipo masculino tras dos partidos de pretemporada como visitante se presentaba ante la afición local contra el C. B. Miguelturra. El resultado, 59 a 51 a favor de los chicos de JesualdoFernández es lo de menos en una jornada festiva para todos. Lo más positivo en el ámbito deportivo es la progresión de los chicos del C. B. Lineal Ciudad Real sobre todo en aspectos defensivos, donde por momentos como en el segundo parcial dejaron a su rival en 3 puntos, consiguiendo mostrar todo el trabajo que se está acumulando en la pretemporada. La semana que viene comienza la liga, momento en el que todas las probaturas finalizan y los puntos se ponen en juego.
Tras el partido de los chicos, el gran momento esperado por todos los que demandaban el regreso de la sección femenina al club. El C. B. OYE Ciudad Real se enfrentaba a un ya consolidado equipo, el Basket Cervantes que además militará en una categoría superior. Tras los nervios iniciales, las chicas conducidas por el entrenador Ramón Peco se quitaron los complejos y pelearon por cada balón como si les fuera la vida. El resultado a favor del equipo amarillo por 37 a 62 demostró la superioridad y la experiencia del equipo cervantino, pero también las señas de identidad del equipo que se estrenaba: la ilusión y la entrega. El segundo tiempo, como fruto del tercer y cuarto parcial, acabó en 26 a 28, prueba de que nunca el C. B. OYE Ciudad Real tiró la toalla y siempre dio la cara. Sin duda una gran experiencia para el equipo que actuó como local y una muesca más en su preparación para las chicas del Basket Cervantes.
En definitiva, una buena noticia para la ciudad y los aficionados al deporte de Ciudad Real, pues la iniciativa de un grupo de gente comprometida con el baloncesto y su gestión deportiva ofrece una alternativa de ocio y recreación para el municipio y su comarca.