Multimedia.- Un total de 16 alumnos, llegados de la Universidad Complutense de Madrid y de la de Castilla-La Mancha, participan hasta el 9 de septiembre de la 31ª campaña de excavaciones arqueológicas en el yacimiento medieval de Calatrava La Vieja, en Carrión de Calatrava, en el octavo centenario del abandono de su primitiva sede por parte de los caballeros calatravos.
Esta campaña se desarrolla un año más en el sector oriental de la medina, es decir, en la parte civil dentro de los muros de la ciudad. En este cuadrante ha encontrado, por ejemplo, un curioso sello para decorar cerámica labrado por los dos extremos, varios fragmentos de objetos de este material y se están sacando a la luz varias viviendas de época medieval. La alcaldesa de Carrión de Calatrava, Ana María López, ha visitado el yacimiento para conocer de primera mano los avances de esta campaña.
Desde 1984 las campañas de excavación han recuperado el perímetro amurallado de la ciudad, han estudiado la evolución del alcázar y el interior de la medina. “Tenemos desde el inicio tres objetivos claros”, explica Miguel Ángel Hervás, responsable del proyecto junto con Manuel Retuerce, “obtener conocimiento histórico de calidad, difundirlo y poder compartir con los ciudadanos la riqueza de este yacimiento”.
Este curso de arqueología es gestionado por la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid, y cofinanciado por la Viceconsejería de Cultura del Gobierno de Castilla-La Mancha y por la Asociación Española de Arqueología Medieval y cuenta este año con alumnos llegados de de Madrid, Navarra, Extremadura, Ciudad Real y Valencia.
Un enclave de gran importancia
La ciudad de Calatrava fue fundada en el siglo VIII por la dinastía omeya y durante cinco siglos fue la capital de un extenso distrito en la región del Alto Guadiana. En los siglos XII y XIII se convirtió, además, en la clave del sistema defensivo del reino de Toledo, y cambió varias veces de manos en el conflicto que enfrentó al-Andalus y el reino de Castilla. Entre 2001 y 2008 las excavaciones descubrieron una parte importante de la trama urbana medieval, lo que proporcionó interesantes datos sobre la estructura de la antigua medina islámica y su posterior ocupación en época cristiana.
El proyecto vigente profundiza en el último periodo de ocupación de la ciudad, a lo largo del cual se sucedieron en Calatrava una fase de dominio almorávide (1090-1147); un primer periodo de ocupación cristiana (1147-1195) con presencia de la Orden del Temple (1150-1157) y la posterior fundación de la Orden de Calatrava (1158); una fase almohade (1195-1212); y una nueva ocupación cristiana (desde 1212).