Es el pentagrama del ahorcado invisible. Los cables sobre los aparcamientos de la calle Copa de Puertollano presentan desde hace años una imagen parecida a esta, tomada en la tarde de este martes. Las zapatillas cuelgan como corcheas, marcando el sórdido compás de una leyenda urbana sobre clanes de la droga o, quizá, el rap de una travesura colegial. De repente se posa una paloma: suena la nota incidental de una película de Hitchcock sobre gaviotas enloquecidas…
Invisible es la música en el aire y ciegos son aquellos que no ven lo invisible….