Luis Fernando Mora Rodríguez.- Permitidme que comience con un símil personal. En este caso, me pasa lo mismo que con el vino. Como buen manchego, me gusta el vino. Y aunque no me considero ni mucho menos un entendido, sé perfectamente lo que me gusta y lo que no. Y para no sentirme engañado o decepcionado suelo pasar por la Taberna del Cuco, donde Graci y Juan se encargan de sorprenderme cada día ofreciéndome lo que me gusta. No pido nada concreto porque sé que me va a gustar…
Eso mismo me pasa con la música. No soy un gran entendido pero sé perfectamente lo que me gusta y lo que no. Y desde su nacimiento, me dejo llevar de la AMC Banda de Puertollano para que se encargue de sorprenderme en cada concierto, que como el vino del Cuco, sé que me va a encantar.
Ayer tuvo lugar en el Auditorio Pedro Almodóvar de Puertollano, la clausura de Curso de Dirección de Orquesta promovido por la AMC Banda de Puertollano. Una muestra más de la labor que esta Asociación Musical hace en Puertollano y por Puertollano. El Curso estuvo impartido por la Catedrática en Dirección de orquesta Dª Mercedes Padilla que estuvo acompañada de su esposo D. Miguel del Barco (compositor, profesor y director del Conservatorio Superior de Música de Madrid). D. Ángel Parla dio buena cuenta de lo importante que fue D. Miguel del Barco en consolidar el Conservatorio de Música de Puertollano.
Pues bien, el Auditorio Municipal acogió este evento en el que pudimos disfrutar de dichas celebridades del mundo de la música, así como de la dirección de la Banda por parte de los alumnos que asistieron al Curso. Y tengo que decir que, no solo hubo sorpresa una vez más por la calidad de la Banda, sino “Magia”.
Es como cuando cierras los ojos para degustar un buen vino y necesitas abrirlos para ver la etiqueta de la botella. Pues así sucedió… Todos los asistentes descorchamos la botella de la AMC para saborear su cosecha y sentimos como si David Copperfield, en una de sus ilusiones hubiese puesto delante de nosotros una de las mejores orquestas. Y cuando sientes la necesidad de abrir los ojos, te das cuenta que no es una ilusión, que es la misma Banda que te sorprende en cada concierto, que se sacrifican y se dejan la vida por su pasión que es la música, y que en cada concierto son capaces de crear la gran “Ilusión” que hace que nos parezca “Mágico”.
¡Bravo chicos! Brindo por vosotros… Y por la oportunidad de poder volver a escucharos en este Auditorio que como apuntó muy sutilmente D. Ángel en su intervención debería ser vuestra casa. No olvidemos que ser municipal, es decir que es de todos, sobre todo de quien se esfuerza y trabaja sin límites por Puertollano.
¡¡¡Va por vosotros…!!!
Doña Aña Muñoz o a quien corresponda, negar la utilización del Auditorio a este excepcional banda de música, es cómo si al Real Madrid lo metemos a jugar en el campo del Valdemoro en vez de en el Bernabéu, dicho con todo el respeto para Valdemoro y para el colegio Salesiano de Puertollano.
Vayan tomando nota y oigan al pueblo, que ayer se expresó durante el concierto muy claramente.
Mi más sincera enhorabuena a la AMC Banda de Música de Puertollano y a su actual director, Sr. García Pozuelo.
Guardo en mi menoria un grato y entrañable recuerdo de D. Ángel Parla Candenas y de D. Manuel Mateo Carrere, fundadores de la Escuela Municipal de Música de Puertollano, con cuyo ahínco y esfuerzo en las gestiones ante el Ministerio de Educación y Cultura, lograron establecer, en 1983, el actual Conservatorio Profesional de Música «Pablo Sorozábal».
Un duro comienzo y, sin duda, un excepcional futuro…
Mi enhorabuena igualmente a la AMC.
Comprender y amar la música es tan abstracto, tan humano, que difícilmente puede ser descrito, pero quien le da forma es de carne y hueso y a ese,a vosotros, sí se os puede poner cara. Por eso sonreiré cuando paseis por mi lado por el paseo o la calle Ancha o la plaza de los Salesianos, porque realmente me estais ayudando a amar ese ente huidizo q es la música en directo y que por unos momentos me hace humano.
Lo dicho, enhorabuena.
D. Luis Fernando, queremos expresarle nuestro más profundo agradecimiento por el tiempo que le ha dedicado a exponer sus sensaciones tras haber asistido a nuestro concierto que encerraba una dinámica tan variada, con charla, seis directores y repertorio variado.
También aprovechamos para felicitarle por su claridad a la hora de expresar de un modo tan lúcido y tan claro las percepciones tan abstractas que la música y su interpretación producen.
Por último, nuestra más sincera admiración por la valentía que ha demostrado a la hora de firmar una crónica de un asunto que tanta controversia ha generado.