Pocos establecimientos miman tanto al vino en Castilla-La Mancha como la Taberna del Cuco, situada en la antigua cafetería del mercado municipal de Puertollano. Desde hace años el local regentado por Graci Cortecero Real y su marido se ha convertido un rincón de culto para cientos de aficionados, incondicionales de sus elaboradas tapas y del especial tratamiento, selección y cuidado del vino.
Era solo cuestión de tiempo que el sector vitivinícola se rindiera a la evidencia y homenajeara a un proyecto cimentado en la pasión, en la profesionalidad y en un sacrificio a prueba de bombas, pese a los altibajos de la crisis. Así, el pasado 9 de mayo, durante la primera jornada de la Feria Nacional del Vino (Fenavin) celebrada en Ciudad Real, Graci recogió el premio al mejor tratamiento del vino de manos de la alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, y del presidente de la Diputación y de la propia feria, José Manuel Caballero.
También fue premiado otro establecimiento ciudadrealeño, el Mesón Octavio, de Ciudad Real. En ambos casos, por su excelente oferta y servicio de calidad del vino. Enhorabuena a todos.