El alcalde de Brazatortas, Pablo Toledano, y Antonio Moreno, alcalde de Cabezarrubias del Puerto, acompañaron a los ganaderos de la comarca de Alcudia en la manifestación convocada por el sindicato ASAJA de Ciudad Real en la mañana de ayer para poner de manifiesto la problemática del campo y la poca credibilidad que se va teniendo en las distintas administraciones.
«Desde la gran manifestación del campo el 29 de noviembre de 2009 en Madrid hasta hoy, han pasado más de seis años y las reivindicaciones pasan por las mismas cosas. Aquella fue la mayor concentración del campo español y esta de ayer ha sido una de las más grandes manifestaciones en la capital y cuando la gente del campo se moviliza, es con razón», señala Moreno en una nota.
«La problemática de nuestro sector ganadero y más concreto en nuestra comarca, pasa por la incorporación de jóvenes, la agrupación dentro del sector ganadero y la modernización. Sobre estos tres ejes tienen que pivotar las medidas de las administraciones para garantizar la supervivencia de nuestros pueblos». señala. «El lema de la manifestación “sin campo no hay vida”, es bastante elocuente de lo que digo».
«Los ganaderos», prosigue, «que estaban presentes son trabajadores del campo, gente que antes de venir a la capital tuvo que atender sus ganados y una vez terminada la protesta volver al campo. Gente que tiene que pagar arriendos en su mayoría abusivos, que ve que sus productos valen hoy lo mismo que hace 30 años, que los retrasos en el pago de la PAC y la incertidumbre en las reformas desmoraliza a los presentes y a los jóvenes que puedan pensar acceder al sector, por no enumerar la limitación de subvenciones a las razas autóctonas, la pésima gestión que nuestros Europarlamentarios han realizado en las negociaciones de la dehesa, ecosistema único en Europa y totalmente perjudicial con los CAP, (coeficientes de admisibilidad de pastos) y que según Barato esto se tiene que corregir».
«Falta de claridad», continúa, «en lo que tiene que ser la figura del ganadero activo, cotitularidad de las explotaciones, Subvenciones directas a la incorporación de jóvenes, falta de información en las medidas de la “condicionalidad” que llevó a nuestro sector a unas pérdidas de casi medio millón en ayudas al ser los agricultores y ganaderos de nuestra región los más penalizados en 2015, retirada de ayudas en ecológico, precios irrisorios de la leche, dificultades en la recogida, precio del cabrito en vida para cerrar las explotaciones, etc.».
A su juicio, «estos son problemas estructurales que necesitan del diálogo entre las partes y que no es así en todos los casos, ejemplo de ello, es que nadie explica cómo no se ha pagado una cuarta parte de la PAC 2016 y sin embargo en declaraciones públicas da la impresión de que todos está al día».
«La solución lo más pronto que tarde de estas reivindicaciones, junto al desarrollo de los PRD y la negociación de la nueva PAC, son argumentos suficientes para que el campo se movilice y por supuesto los alcaldes debemos estar con ellos ya que el futuro del mundo rural está en juego y nuestros pueblos casi en su totalidad dependen de ello», concluye.
