Más de un centenar de personas se han concentrado en la mañana de este viernes frente a la sede de Cáritas Interparroquial de Puertollano para reclamar la continuidad de la escuela infantil tras conocer la decisión de la institución de suspender las matriculaciones para el próximo curso. El colectivo de padres y profesionales aseguran que siguen sumidos en la incertidumbre y la desinformación sobre el futuro de la guardería y reclaman una reunión en Obispado. Precisamente han anunciado que el próximo martes está prevista una concentración frente a la sede de la Diócesis de Ciudad Real entre las 17.30 y las 18.30 horas
En declaraciones a los medios durante la protesta, el responsable del Sector Socioeducativo de la FE-CCOO CLM, Antonio Romero, ha asegurado que la decisión de no abrir el plazo de matrícula implica el cierre del centro, por lo que pide una reunión para estudiar la viabilidad de una escuela que, a su juicio, «presta unos servicios esenciales para los padres». Romero ha defendido la función social de este centro «ya que hay niños que tienen la matrícula gratuita por su situación familiar, mientras que otros padres pueden beneficiarse de matrícula reducida a la espera de trabajo en una ciudad tan castigada por la crisis como Puertollano».
Además, el dirigente sindical ha denunciado que Cáritas no ha presentado ningún informe económico ni estudio de viabilidad previos a una negociación con los trabajadores, tal y como establece la legislación laboral, y que la negociación aún no se ha iniciado «porque Cáritas asegura que aún no hay nada decidido cuando realmente sí se están tomando decisiones conducentes al cierre», ha insistido.
Por su parte, María Ángeles López, delegada sindical, ha lamentado la situación de las 55 familias y siete trabajadoras afectadas que «están muy mal» a la espera de noticias. «No podemos esperar porque el plazo de matrícula ha empezado en todos los centros», ha aseverado. En este sentido ha recordado que obispos y sacerdotes de la Diócesis de Ciudad Real han apoyado siempre a los trabajadores de las empresas en peligro de cierre, mientras que los empleados de la propia institución «no están siendo respaldados en nada». Así, ha pedido «voluntad» al Obispado y a Cáritas en la resolución del conflicto.
En los mismos términos se ha expresado la presidenta del AMPA, Rocío Sánchez, quien reclama una reunión con el Obispado para que resuelva las dudas, ya que, según ha relatado, en la reunión celebrada el miércoles con los directivos «no resolvieron nada; es más, en cuanto los padres empezaron a preguntar se levantaron y se marcharon».