Pedro Guerra enciende en Ciudad Real la chispa de su revolución de la poesía y el silencio

Eusebio Gª del Castillo Jerez.–   Al margen del compromiso social y político, la poesía es algo necesario para la vida, decía Pedro Guerra momentos antes del concierto que ha ofrecido esta noche en la tetería Pachamama. El cantautor canario inicia en Ciudad Real una gira basada en su poemario ‘Hurgando en la caja negra’, en la que recita sus versos y canta poemas de otros autores que ha musicado a lo largo de su carrera.

Con este formato de conciertos pretende dejar un espacio a su «relación con la poesía». Lo que va a pasar aquí hoy, comentaba, es revolucionario, «en la medida en que está a años luz de la oferta que hay en la calle, en los medios y en una sociedad en la que todo es ruido, velocidad y consumo». Encontrar un momento para el silencio y la poesía «es una propuesta comprometida y diferente», afirmaba.

«La música ocupaba todo mi tiempo, y casi todas las ideas que se me ocurrían acababan convirtiéndose en canción», apunta para el explicar por qué ha dejado pasar tanto tiempo hasta decidirse a escribir un poemario. Con el tiempo, recuerda, comenzó a tener contacto con poetas, como Ángel González, con quien colaboró en ‘La palabra en el aire’. Guerra relata que en aquella época le mostró unos poemas que había escrito y González le recomendó que «trabajara más». Aparte de tiempo para escribir, argüía, necesitaba encontrar «una voz propia» como poeta. «Creo que la tengo como autor de canciones, pero no es lo mismo, porque la poesía es un terreno diferente».

‘Hurgando en la caja negra’ es su primera incursión en la poesía, «no muy ambiciosa -reconoce-, pero me pareció una buena manera de empezar». El título de la obra se inspira en el término con que algunos psicólogos se refieren al inconsciente. «La poesía es el lugar que me guardo para hablar de cosas íntimas y que tienen más que ver conmigo», una temática alejada del compromiso social que imprime a muchas de sus canciones. La poesía, asevera, sirve para mirarse adentro,  evocar recuerdos y aquellos lugares por los que se transita para llegar a ser lo uno es. «Dejar al inconsciente fluir a través de la palabra escrita», añade. La poesía, remachaba, es un espacio para el recogimiento, en contraposición al mundo de la canción, que es «más expansivo».

El concierto de esta noche en Pachamama, cuyas entradas se agotaron hace días, estaba restringido a cien personas. Un formato íntimo en que el que cantautor ha realizado un recorrido por su poemario y ha cantado un repertorio de canciones basadas en poemas de Ángel González, Joaquín Sabina y otros autores. El concierto finalizaba con algunas de sus temas más conocidos.

Pedro Guerra compagina esta gira con la de presentación de su último disco, ‘Arde Estocolmo’, que ha sido incluida en el Circuito de Artes Escénicas de Castilla-La Mancha.