MICR/EGCJ.- La presencia de personas de procedencias diversas en el mercado laboral hace que las plantillas de las empresas sean heterogéneas; este es un reflejo de la diversidad existente en nuestra sociedad. Sin embargo, personas con talento por motivos relacionados con su raza, origen, su sexo o edad, en ocasiones son discriminados por los prejuicios y estereotipos que suponen una barrera en el mercado de trabajo. Estas situaciones, lejos de ir a menos, se han visto acrecentadas como consecuencia de la delicada coyuntura económica que atraviesa nuestro país, alertan desde Cruz Roja.
La campaña “En realidad no tiene gracia” de Cruz Roja pretende llamar la atención de la sociedad, y muy especialmente de las empresas, para que faciliten el acceso al trabajo a personas inmigrantes o en situación de dificultad social; también se pretende promover la gestión de la diversidad cultural en todas sus vertientes como un elemento enriquecedor, y poner en valor las diferencias sociales como una herramienta de cohesión y desarrollo.
La presidenta de Cruz Roja Ciudad Real, Lola Moreno, señala que mejora de las condiciones de vida de las personas más vulnerables pasa por el acceso al mercado de trabajo. En ese sentido reclamaba empleos «estables y dignos».
Con el humor como elemento central, esta campaña pone de manifiesto situaciones que merecen nuestra atención y nuestra reflexión; de esta manera se evidencia lo absurdo y dramático de las barreras a las que han de hacer frente, en su acceso al mercado de trabajo, las personas inmigrantes y en dificultad social; barreras que, con frecuencia, adoptan la forma de estereotipos y prejuicios, infravaloración social, y situaciones que nos pueden afectar a todos y todas en algún momento: ser mujer, ser mayor o ser demasiado joven.
El objetivo, una vez más, es conseguir la inserción laboral de las personas socialmente más vulnerables, colectivo prioritario para Cruz Roja.
En realidad no tiene gracia ha contado, desde sus inicios en 2010 cuando se puso en marcha, con la colaboración desinteresada de grandes profesionales del humor en diferentes facetas como Antonio Fraguas “Forges”, Antonio Mingote, Gallego y Rey, Soria & Barceló, Vergara y Nani Mosquera, Goma Espuma, Florentino Fernández, Anabel Alonso, Ariadna Puello, Turcios, Mariano Peña o Carlos Baute. Este año se suma a colaborar el actor y humorista Santiago Rodríguez.
EL PLAN DE EMPLEO DE CRUZ ROJA
En Cruz Roja Española se trabaja por la mejora de las condiciones de vida de los colectivos socialmente más vulnerables, una mejora que no es posible sin el acceso a un empleo estable. Por este motivo, Cruz Roja puso en marcha hace ya más de 15 años su Plan de Empleo para colectivos vulnerables. Este Plan de Empleo desarrolla un amplio número de proyectos encaminados a promover el acceso al mercado de trabajo de las personas en situación de dificultad social.
Sus objetivos son potenciar y reforzar la empleabilidad de las personas en situación de desventaja, mejorando sus habilidades y capacidades para situarlas en mejores condiciones respecto al empleo, y luchar contra las barreras sociales que existen ante ese acceso de las personas en dificultad al mercado de trabajo.
Ana Díaz, responsable del plan de empleo de Cruz Roja en Ciudad Real, ha apuntado que Cruz Roja atiende en la provincia a 1.057 personas a través de 10 proyectos de empleo, enmarcados en los programas operativos de inclusión social y de empleo joven, que se desarrollan en las asambleas de Ciudad Real, Tomelloso y Alcázar de Ciudad Real. Este año, ha añadido, se ha puesto en marcha un proyecto, Alianzas, que trabaja directamente con las empresas y que forma parte del programa operativo de inclusión social.
Asimismo, desde lo distintos proyectos de empleo se realizan talleres vinculados a la lucha contra la discriminación, algo que lejos de ir a menos, «en esta época difícil por la que estamos a travesando, va a más», añadía Díaz.
Pese a las noticias sobre la recuperación económica de nuestro país, «la realidad que observamos desde Cruz Roja es que hay poca contratación y la que se produce se lleva a cabo en condiciones bastante precarias», lamentaba la responsable de Cruz Roja.
De 789 personas participantes en estos programas 207 se han incorporado al mercado de trabajo, formalizando un total de 286 contratos, con lo que la ratio de inserción es de un 26,92%. «Nos gustaría que fuera mayor pero la situación del mercado laboral es bastante desfavorable», matizaba Díaz.
Por último, ha destacado la colaboración del tejido empresarial provincial. «Las empresas están muy dispuestas a colaborar con Cruz Roja», ha asegurado. En ese sentido ha detallado hasta el 30 de septiembre se habían formalizado 637 colaboraciones con 379 empresas, estableciendo con 58 de ellas diversos convenios, como los relativos a prácticas no laborales.
