Fernando Lamata (Consejero de Sanidad)
Siete de abril. Comienzan las vacaciones de Semana Santa. Momento de viajar, buscar lugares para el ocio y el descanso, encontrarse con la familia y amigos y disfrutar de los primeros rayos de sol con olor a verano. Momento de subirse en un vehículo y circular por las carreteras con la esperanza de no convertirse en un número más del balance final de la operación salida u operación retorno de Semana Santa. ¿Cuántos no volverán?
Hoy, día 7 de abril, conmemoramos un año más el Día Mundial de Salud. En esta ocasión, asumiendo la propuesta de la Organización Mundial de Salud (OMS), bajo el lema “La seguridad vial no es accidental”. Un eslogan a tener en mente cuando nos sentemos ante el volante, porque los costes de los accidentes de tráfico nos afectan a todos, directa o indirectamente, y las lesiones y vidas que se truncan en la carretera constituyen, tal y como alerta la Organización Mundial de Salud, “un problema mundial que afecta a todos los sectores de la sociedad”.
Según un estudio de la Consejería de Sanidad, a través de la Dirección General de Salud Pública, la mortalidad por accidentes de tráfico en España y Castilla-La Mancha en el periodo comprendido entre 1980 y el año 2000, es de 131.006 muertes en España por accidentes de tráfico.
Los accidentes de tráfico son además una de las causas principales de muerte prematura, que es la que se produce antes de los 69 años. En Castilla-La Mancha representan el 14,7% del total de muertes prematuras. Además, la mitad de los jóvenes de entre 15 y 19 años que mueren, es en un accidente de tráfico y en el mundo, aproximadamente el 50% de las víctimas mortales por accidente de tráfico tienen edades comprendidas entre los 15 y 44 años de edad.
No menos significativo es el drama de los accidentes de tráfico en lesiones y discapacidades. Según un informe elaborado por el Hospital Nacional de Parapléjicos, perteneciente al Sescam, aproximadamente la mitad de los ingresos que se han producido en este centro durante los últimos 7 años tienen como causa un accidente de tráfico. En la evolución en el tiempo se aprecia que los pacientes agudos son cada vez más jóvenes y el tipo de lesión que presentan más alta, es decir, aumenta el número de tetraplejias respecto a parapléjicas. Un análisis estadístico de las fechas demuestra que casi un 70% de los pacientes que ingresan en el Hospital de Parapléjicos han sufrido un accidente durante el fin de semana.
En Castilla-La Mancha, Gobierno, asociaciones, instituciones en general y cada ciudadano individualmente, hemos sabido situar el cuidado de la salud en el lugar que corresponde. Desde que asumimos las competencias en materia de salud pública, en el año 1982, hemos ido incrementando nuestro nivel de salud hasta situarnos hoy por encima de la media nacional.
Somos la segunda comunidad autónoma española con mejor estado de salud. La esperanza de vida al nacer es, con 80,2 años, 0,6 años superior a la media nacional. El porcentaje de fumadores, 33,9% de castellano-manchegos, nos sitúa por debajo del nivel nacional (34,4% de fumadores). En cuanto al consumo de alcohol se observa, según la Encuesta Regional de Salud, que el porcentaje de bebedores durante el último mes en Castilla-La Mancha, 40,7%, nos sitúa por debajo de la media nacional (52,1%).
Esta situación ventajosa no es irreversible y desde diversos ámbitos aunamos esfuerzos para paliar las consecuencias de esta “epidemia silenciosa” que son los accidentes de tráfico: desde Obras Públicas, con iniciativas como el Plan de Seguridad Vial o el convenio con la Asociación Española de la Carretera, que implica a los conductores en la mejora de la seguridad vial. La Guardia Civil de Tráfico y la Policía Municipal, velando por el cumplimiento de las normas de tráfico y asistiendo en los siniestros. Por medio de Educación, con iniciativas de educación vial en la escuela o informando y formando al conductor. Los fabricantes de automóviles y aseguradoras, reduciendo riesgos con mejora en las prestaciones de los vehículos. A través de los medios de comunicación, informando y sensibilizando a la ciudadanía. Desde Sanidad, con campañas de sensibilización y prevención de consumo de alcohol o drogas, entre otros, recopilando y analizando la información sobre accidentes de tráfico, promoviendo un enfoque multisectorial del problema y asistiendo, en las mejores condiciones posibles, a la persona que resulta implicada en un accidente.
Todas estas acciones requieren además de un esfuerzo personal que cada uno debemos hacer cada vez que nos sentemos al volante: el alcohol y el coche no son buenos compañeros, estar descansado y en buenas condiciones físicas y psíquicas es indispensable para empezar un viaje, en los desplazamientos cortos, no cabe bajar la guardia, el exceso de velocidad pone en riesgo a todos los conductores y pasajeros y usar el cinturón de seguridad es siempre necesario.
Hoy, 7 de abril, comienzo de las vacaciones de Semana Santa y Día Mundial de la Salud, es un día perfecto para asumir como principios propios las medidas antes mencionadas, y mantenerlas siempre como requisitos indispensables a la hora de conducir un vehículo.