En la actualidad, casi 700 millones de personas en el mundo son mayores de 60 años. Para 2050, las personas de 60 años o más serán 2.000 millones, esto es, más del 20% de la población mundial. En este contexto, Cruz Roja Española desarrolla gran parte de su labor con estas personas, siendo el colectivo con mayor número de usuarios.
Cruz Roja en la provincia de Ciudad Real atiende a cientos de personas al año a través de diferentes proyectos como, por ejemplo, Ayuda a domicilio complementaria cuyo objetivo es mejorar las capacidades de la persona mayor para continuar llevando una vida autónoma y poder permanecer el mayor tiempo posible en su entorno habitual; hasta el 30 de agosto, se habían atendido a 1.252 personas en casi 5.500 intervenciones a través de 700 voluntarios y voluntarias.
Por otro lado, según el censo del INE de 2015, un 22,4 por ciento de las personas de 65 años o más viven solas. Por ello, combatir la soledad es otro de los objetivos que persigue la organización, a través de proyectos como Enrédate. Con él, se pretende incrementar sus relaciones sociales, facilitar la realización de gestiones y mejorar sus conocimientos en nuevas tecnologías, entre otros. Para ello, 228 voluntarios y voluntarias acompañan a los 759 usuarios que actualmente tiene este programa.
El cuidado de la salud se sitúa como uno de los ejes de intervención de Cruz Roja. Mediante su proyecto Promoción del envejecimiento saludable: salud constante se promueve la vida independiente y el envejecimiento saludable, así como reducir el impacto negativo del deterioro físico. Para ello, el voluntariado realiza diversas actividades con personas mayores tales como la medición de la tensión, visitas a sus domicilios o la adquisición de hábitos saludables. 33 hombres y 49 mujeres se encargan a día de hoy de hacerlo posible en la provincia, donde se han atendido a 337 personas en un total de 3.461 intervenciones.
La organización también cuenta con servicios como la Teleasistencia en el que se ofrece una atención continuada durante todo el año, siendo un servicio de carácter preventivo que no sólo se limita a la atención de las alarmas. Su principal finalidad es mejorar la calidad de vida de los usuarios/as, proporcionar una rápida intervención en situaciones de emergencia y posibilitar la estancia en su domicilio de aquellas personas que no precisen cuidados permanentes.La utilización de Teleasistencia está dirigida a aquellas personas que por motivo de discapacidad, aislamiento social, edad avanzada, enfermedad o situación de riesgo psicosocial o físico, precisan una atención continuada. Este servicio ofrece cobertura a toda la Provincia.
Por otro lado, el apoyo a familiares que ejercen el rol de personas cuidadoras es otro de los ejes fundamentales de actuación de Cruz Roja. El programa Respiro se centra en sustituir a una persona cuidadora durante unas horas a la semana en el cuidado de una persona dependiente para posibilitar que su cuidador/as realice cualquier actividad libre de la responsabilidad de conlleva la tarea de ser cuidador/a. 27 voluntarios y voluntarias sustituyen en la provincia a 57 personas cuidadoras en más de 500 intervenciones.Además, este año la organización ha puesto en marcha una nueva app de SerCuidador para dispositivos móviles donde se puede encontrar consejos e información de utilidad, un paso más para apoyar a quienes cuidan de un familiar o persona dependiente.
Desde Cruz Roja se trabaja también en la Atención a personas con funciones cognitivas deterioradas. Este proyecto está encaminado a realizar actividades de estimulación y participación que le permitan retrasar el deterioro y mantener una vida activa. Entre el 1 de enero y el 30 de agosto se han atendido a 261 personas en un total de 3299 intervenciones, gracias a los 83 voluntarios y voluntarias de la provincia.
Otro de los proyectos es Promoción del envejecimiento activo con personas en proceso de envejecimiento, el cual, pretende que las personas usuarias mejoren la forma en que afrontan su proceso de envejecimiento, viviéndolo de manera natural y satisfactoria, y retrasando aquellos problemas inevitables que aparecen con la edad. Este proyecto se basa en tres tipos de actividades vinculadas con la personas y el entorno: actividades informativas y de sensibilización (que cuenta con charlas de alimentación saludable, prevención de caídas, toma responsable de medicación, etc.), actividades para la adquisición de competencias (donde se enmarcan talleres de memoria, nuevas tecnologías, gimnasia en sala o primeros auxilios, entre otros) y actividades de promoción de la participación y activación de la persona mayor (en las que se realizan, entre otras, zumba, circuitos biosaludables o musicoterapia y relajación).