El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asistido hoy en Zaorejas a la celebración de la vigésima edición de la Fiesta Ganchera, con la que la Asociación de Municipios que integran Peralejos de las Truchas, Taravilla, Poveda de la Sierra, Peñalén y Zaorejas conmemoran cada año la ancentral tradición de transportar desde el Alto Tajo hasta Aranjuez los cargamentos de troncos entre los bosques serranos y las serrerías del municipio madrileño.
Emiliano García-Page ha compartido la jornada con los numerosos vecinos y turistas que se han congregado hoy en el paraje del puente de San Pedro, donde ha tenido lugar este año la exhibición del descenso de los troncos por el río Tajo que cada año organiza alternativamente uno de los cinco municipios que forman la Asociación. Este peculiar sistema de transporte se remonta, según algunos estudios, a cinco siglos atrás y se interrumpió con el estallido de la Guerra Civil española, retomándose sólo parcialmente en los años cuarenta entre los pueblos del Alto Tajo. La construcción de la presa de Entrepeñas impidió definitivamente la posibilidad de arrastrar las balsas con las que agrupan los gancheros los troncos hasta el destino final de la maderada.
La consejera de Fomento del Gobierno de Castilla-La Mancha, Elena de la Cruz, ha expresado el apoyo del ejecutivo regional a esta celebración, que fue declarada de Interés Turístico Regional en 2008 y que alcanzaba este año sus primeras dos décadas de existencia. “Más que una tradición hablamos de un medio de vida”, ha dicho, destacando que el trabajo de los gancheros “refleja fielmente el carácter duro y aguerrido de los hombres y mujeres de la Sierra, que son gente trabajadora y muy luchadora”. De la Cruz ha tenido palabras de agradecimiento hacia el escritor, catedrático, pensador y economista José Luis Sampedro, fallecido en 2013, “por el mimo y el cariño” con el que plasmó esta actividad en la novela “El río que nos lleva”, un libro que ha calificado de “inmortal”. La novela fue publicada en 1961 y adaptada al cine por Antonio del Real en 1988. Para Elena de la Cruz, ambas obras han sido cruciales en el conocimiento y la divulgación de la tradición ganchera y en la promoción del Alto Tajo.
Nuevas amenazas al Tajo
La consejera ha hecho referencia a la enorme diferencia en la calidad de las aguas que presenta el Tajo en su zona alta y su zona media, donde recoge las aguas residuales de Madrid a partir de la desembocadura del Jarama.
Elena de la Cruz se ha referido a las numerosas “amenazas” de las que es objeto el Tajo a partir de las presas de Entrepeñas y Buendía. “Mientras aquí se ve limpio y cristalino, en Toledo o Talavera nos encontramos con un río marrón y contaminado”, ha dicho, a consecuencia de los vertidos y de la limitación de su cauce mediante el Trasvase Tajo-Segura, “por eso desde Castilla-La Mancha, desde el Gobierno de todos, estamos muy preocupados por la situación del río”, para cuyo tramo castellano-manchego ha pedido agua limpia y abundante.
La responsable de la Consejería de Fomento ha hecho referencia a los recientes “nuevos intentos” de continuar “esquilmando” el Tajo, intentos que “no paran”. Concretamente ha mencionado una nueva petición proveniente de Murcia de un trasvase adicional para regar los campos de Cartagena debido a un problema administrativo al que el ejecutivo murciano “no ha puesto ninguna agilidad” y que permitiría conceder los 14 hectómetros cúbicos que solicitan los regantes desde la desaladora de Escombreras y que puede satisfacer esa petición “para mermar menos el Tajo”. Elena de la Cruz ha criticado que desde esa instalación se destinen 4 hectómetros cúbicos para regar campos de golf mientras únicamente se conceden 3 hectómetros cúbicos a los agricultores del campo de Cartagena.
La consejera ha confirmado que desde el ejecutivo regional se considera que el Gobierno de España en funciones “es demasiado receptivo hacia estas peticiones y demasiado poco para las peticiones que hacemos desde Castilla-La Mancha” y le ha acusado de no otorgar ninguna “agilidad” a la alternativa de la desalación “porque abren el grifo del trasvase cuando quieren”. ”Está muy bien lo del agua para todos pero también en Castilla-La Mancha queremos agua pura y cristalina para el tramo del Tajo que discurre por nuestra región”.