La Escuela de Verano 2016, promovida y organizada por la concejalía de Juventud del Ayuntamiento de Argamasilla de Alba a través del Centro Infanto-Juvenil, ha comenzado el mes de agosto cargada de nuevas actividades, a las que se suman los talleres y juegos programados en el mes de julio, entre ellos el de radio y televisión o varios relacionados con el medio ambiente.
Dentro del grupo de actividades relacionadas con la conservación del entorno natural, 40 chicos y chicas de la Ludoteca de Verano participaron en el Programa de Educación Ambiental, promovido por la JCCM e impartido y financiado por Ecoembes, con la principal finalidad de sensibilizar a los asistentes en la necesaria conservación del entorno natural, no sólo el de los grandes bosques, sino también el más cercano, el de nuestros parques, comenzando en casa con el correcto reciclado de residuos.
Esta importante actividad, por la que pasaron los distintos grupos de la Escuela de Verano, adaptada a cada tramo de edad, busca inculcar la importancia de la regla de las tres “r”: reducción, reutilización y reciclaje de los residuos; además de recordarles a los pequeños de la casa los diferentes contenedores y la importancia de la separación de residuos en cada uno de ellos, un gesto que puede darles una nueva vida.
Pero esta actividad, no es la única relacionada con el medio ambiente que realizaron los mayores de la Escuela de Verano, muy interesante y enriquecedora fue la visita de los participantes en el taller de Medio Ambiente Activo y los compañeros de la Ludoteca al huerto del taller de empleo “Agricultura Ecológica, gestión de la producción y comercialización on-line” que se está impartiendo en la localidad y donde pudieron conocer diferentes plantas hortofrutícolas, su cultivo, la forma de combatir las plagas y malas hiervas de forma natural, así como las mejores formas de riego para un máximo aprovechamiento del agua.
Como señalan desde el Centro Infanto-Juvenil, “ésta es una muestra de las múltiples actividades y experiencias con las que contarán los pequeños de la casa durante el mes de agosto, gracias a la Escuela de Verano”, a través de algo tan sencillo como es el juego, “a la vez que se van desarrollando íntegramente como personas”.