Ricardo Chamorro Delmo.- Según declaraciones de Steve Jarding, estratega de las campañas americanas y profesor de Harvard, en una reciente entrevista en el diario digital Vozpopuli, “A Rajoy sólo le queda la estrategia del miedo”. Para Jarding “Podemos ha ganado ya” (http://vozpopuli.com/actualidad/55955-steve-jarding-a-rajoy-solo-le-queda-la-estrategia-del-miedo-podemos-ha-ganado-ya )
Según este profesor:
“A día de hoy, la gente tiene menos miedo al cambio que a la falta de cambio. ¿Por qué pensaron los políticos que la gente no iba a decir en ningún momento “basta”?…
…el candidato y el partido que define el terreno antes, gana la carrera. Ahora mismo, Podemos ha hecho mejor trabajo definiendo los asuntos de debate público. Si son capaces de sostener eso, será difícil vencerles. El PP tiene que cambiar el mensaje con el argumento de que son peligrosos y que la gente debe tener miedo pero la cuesta arriba para el PP es muy cuesta arriba.”
El miedo solo no basta
Asumiendo que al centro-derecha español solo le queda la estrategia del miedo, hay que decir que esa estrategia tendría que tener un contenido, un relato contundente, unas directrices.
El relato, en el partido hegemónico del centro derecha español, está cada vez mas difuminado desde 2008. De igual manera el partido Ciudadanos tenía un relato muy claro, concreto y contundente en Cataluña, relato que arrastró muchos votos, hoy ha pasado a mantener muchas ambigüedades en el relato nacional que confunden y desilusionan al electorado, lo que le puede pasar factura.
En una sociedad en crisis, atemorizada, insegura y difusa, el azuzar el miedo, sin un relato alternativo, no basta en el ámbito electoral.
El médico especialista en neurología Pedro Bermejo, escribe en su libro sobre la importancia de las emociones en política, denominado “Quiero tu voto”, que “la emoción del miedo es una de las emociones más importante que puede llevar a bloquear una decisión racional y potenciar una emocional en un momento”
Argumenta Pedro Bermejo que todos los partidos están utilizando esta emoción de miedo de manera permanente. Bermejo recuerda en su libro, entre otros ejemplos, el “doberman” del PSOE en las elecciones del 1996, el argumento del PP contra PODEMOS a raíz de las noticias sobre su vinculación con Irán o Venezuela e incluso la famosa frase de PODEMOS que dice que “la crisis terminara cuando el miedo cambie de bando”
Hay tanta manipulación con el miedo que, según este neurólogo, la racionalidad estará muy al margen del voto en estas elecciones.
El miedo es una emoción que moviliza si va acompañada de un relato, de una esperanza, si no va acompañada de relato puede paralizar a un porcentaje importante de votantes y producir abstención.
¿El Centro ya ha perdido frente a Podemos?
En enero de 2015 escribí un artículo denominado “El Centro ya ha perdido frente a Podemos” donde argumentaba lo siguiente:
El problema ante la situación actual de España no es solo de estadística y datos macroeconómicos.
Los ciudadanos españoles necesitan de un nuevo relato, necesitan de la reivindicación de una nueva cualidad humana y social para España.
Podemos ha asumido ese rol asumiendo un relato revolucionario que se creen a pies juntillas. La reivindicación de la cualidad humana reivindicada por la izquierda de Podemos es ahondar en más de lo mismo, aunque de manera radical…
El centro político indefinido e insípido ya no tiene relato, solo tiene datos y coyunturas externas. La falta de relato les hace asumir los valores progresistas de la izquierda. El centro ha asumido que su única ventaja es una mejor gestión de la economía, una mayor confianza de los agentes económicos externos, pero asumiendo todos los valores de una izquierda progresista, de otra manera no se entendería la falta de reforma de las Leyes Ideológicas de Zapatero.
La importancia del relato
Algunos dirigentes del PP, como Esperanza Aguirre, tienen claro la importancia del relato. La ex alcaldesa de Madrid dijo de manera contundente, en su entrevista en La Sexta de hace unos días, que «Mientras los demás partidos tienen un relato muy claro, el PP no lo tiene»
España y la libertad fue el relato del centroderecha español cuando ganaba mayorías importantes, la épica y el sacrificio para defender España como síntesis de los valores constitucionales de convivencia en lugares como el País Vasco y Cataluña, la reducción de impuestos, la familia, la propiedad privada, la nación española como gran nación en el contexto mundial… todo aquello ha sido difuminado por una tecnocracia gris, contradicciones de mensaje, incoherencias y muchos intereses personales.
Para mostrar un relato alternativo, para dar esperanza a tus electores, lo primero que has de hacer es cambiar las caras de aquellos que no emocionan, de otra manera estas demostrando que solo pretendes azuzar con el miedo pero no pretendes recuperar o fortalecer el relato que ha sido difuminado. Creo que el PP se equivoca intentando hacer creer a sus votantes que el relato no ha cambiado desde tiempos de Aznar, cuando es evidente que si ha cambiado, manteniendo a las personas con las que perdió más de 60 diputados en las elecciones del año pasado.
Cuando la situación política de España exige movimientos contundentes, relatos sin ambages y fortaleza de partido, lo peor que puedes hacer es asumir una posición conservadora en relación a tus tácticas y exigir al electorado el voto sin mostrar ningún sacrificio personal o de partido, solo agitando el espantajo del miedo.
Esgrimir una gran coalición del PP con el PSOE como la única gran solución de España, no deja de tener un importante grado de patetismo, de falta de ambición o de ausencia de proyecto en el plano político, frente a lo que viene.
El valor no es la ausencia del miedo, es la conquista de este.
Si al miedo no lo mitigamos con un relato que infunda valor a tus electores no tendrás recorrido político a medio plazo. El centro derecha español se ha pasado décadas acomplejado por los valores de sus votantes y de su propia opción política, plegándose en muchas ocasiones a la izquierda.
El temor y el complejo, en estos tiempos, es síntoma de derrota, pues como decía Napoleón “Aquel que teme ser conquistado seguramente será derrotado”.
Estando de acuerdo en el fondo con la crisis del PP, cuyo relato no sólo puede ser económico y cuyos personajes deben ser otros, sin embargo creo que el miedo irá siendo cada vez menos determinante.
Más allá de la política, existe una realidad social más dinámica.
Creo que el populismo está generando anti-populismo.
Y no por miedo, sino por convicción y por reafirmación de los valores que impregnan hoy la sociedad española.
Ni todo lo anterior es malo, ni todo lo nuevo es bueno.
La libertad política, la separación de poderes y la tecnificación de las decisiones de gestión pública son irrenunciables, y hay que plantar batalla a todo lo nuevo y viejo que las amenaza.
Las generaciones de nuestros mayores quizás teman perder su pensión si ese cambio «progresista y ruinoso» se produce, pero las generaciones más jóvenes, que asumen la incertidumbre de cobrar en su día su pensión porque no son ajenos al estado de la Seguridad social, plantean los retos no con miedo sino con coraje.
De manera alguna estamos dispuestos a que unos insolventes pongan en peligro lo que con tanto esfuerzo se ha conseguido, un puesto profesional, una vivienda, un modelo educativo de libre elección, y hasta una herencia.
No hay ingenuos entre nosotros que no admitan los defectos intrínsecos de un sistema, que pese a todo funciona y favorece la prosperidad si se gestiona en las manos adecuadas. Lecciones se han aprendido.
Todo no va a volver a ser igual.
Y con convicción y con coraje, incluso contundencia, el populismo de Podemos es contestado por el Anti-populismo antipodemita.
Por parte de nosotros, la generación de los que no esperamos nada de nadie, todo lo condicionamos a nuestro esfuerzo, y a los valores transmitidos por la generación de nuestros padres, esa que superó una guerra, muchas crisis, y construyó el desarrollo económico de este país sin deberle nada a ningún político.
Ángel Manuel y Chamorro…menuda juerga,que plan más divertido
A ver si os juntáis y rememoráis los buenos tiempos de bomber y bandera
Bomber y bandera, y nos vamos de peregrinacion a Fatima y a Roma.
No, alli esos no peregrinan.
Tienes que ser simplon Poli, para asociarlos.
Solo he visto bomber y bandera, si bien distintas, en las concentraciones de perriflautis o doberman.
Nada que ver con rezar el angelus en Roma o ir de camillero a Lourdes.
No te esfuerzes, Ángel. Estos son los de el Alfon, distinguido criminal. Hace un siglo eran de Mateo Morral. Poco han evolucionado desde entonces.
Ni han tenido su Concilio Vaticano II ni lo tendran.
Solo han cambiado el disfraz ahora «socialdemocrata» y «leninismo amable», mañana si es para alcanzar el poder, se disfrazan de Calimero si hace falta.
Bueno con el corazon y la sonrisa, no son Calimero, pero sí los Ositos Amorosos.
Un artículo crítico, argumentado y muy bien elaborado. Enhorabuena. Una pena que no se prodigue más don Ricardo por estos predios.
En la política española contemporánea se ha producido lo que en física se denomina un desplazamiento hacia el rojo. Imaginemos un banco circular, el PSOE se desplaza hacia la izquierda, se radicaliza. El PP ocupa el espacio que dejan los socialistas. Este desplazamiento tiene dos consecuencias: el PP llena el espacio que el PSOE deja vacío, pero el PSOE encuentra ocupado el espacio que pretende apropiarse (Podemos, nacionalistas, etc.). Los socialistas son expulsados del banco, se han quedado sin hueco.
Otro segundo orden de consecuencias es el abandono de las señas que identificaban tanto al PP como al PSOE. El primero se convierte en un partido socialista de derechas y asume el ideario de la izquierda; el segundo… el segundo es difícil de calificar en qué se ha convertido: ¿nacionalista, populista, comunista…? Depende del lugar y el momento, es una cosa, su contraria o la distinta.
Lo más aberrante de todo es la tácita alianza de Podemos y el PP para acabar con el PSOE y los partidos reformistas, constitucionalistas y moderados. Una muestra más de la ignorancia de la derecha: cuando acaben con el PSOE y demás, ¿a por quién piensan Rajoy y sus augures que irá el señor de la coleta?
Felicidades de nuevo por el artículo. Un oasis de mesura y sensatez.
Un artículo crítico, argumentado y muy bien elaborado. Enhorabuena. Una pena que no se prodigue más don Ricardo por estos predios.
En la política española contemporánea se ha producido lo que en física se denomina un desplazamiento hacia el rojo. Imaginemos un banco circular, el PSOE se desplaza hacia la izquierda, se radicaliza. El PP ocupa el espacio que dejan los socialistas. Este desplazamiento tiene dos consecuencias: el PP llena el espacio que el PSOE deja vacío, pero el PSOE encuentra ocupado el espacio que pretende apropiarse (Podemos, nacionalistas, etc.). Los socialistas son expulsados del banco, se han quedado sin hueco.
Otro segundo orden de consecuencias es el abandono de las señas que identificaban tanto al PP como al PSOE. El primero se convierte en un partido socialista de derechas y asume el ideario de la izquierda; el segundo… el segundo es difícil de calificar en qué se ha convertido: ¿nacionalista, populista, comunista…? Depende del lugar y el momento, es una cosa, su contraria o la distinta.
Lo más aberrante de todo es la tácita alianza de Podemos y el PP para acabar con el PSOE y los partidos reformistas, constitucionalistas y moderados. Una muestra más de la ignorancia de la derecha: cuando acaben con el PSOE y demás, ¿a por quién piensan Rajoy y sus augures que irá el señor de la coleta?
Felicidades de nuevo por el artículo. Un oasis de mesura y sensatez.