La periodista puertollanera Ángela Paloma Martín Fernández ha sido elegida por The Washington Academy of Political Arts & Sciences como una de las doce mujeres hispanas más influyentes de la comunicación política. Martín se hace así acreedora de uno de los prestigiosos premios Victory Awards, los “Oscar” de la consultoría política, que se entregarán los próximos días 5 y 6 de agosto en la Georgetown University de Washington DC.
En declaraciones a este digital la puertollanera ha expresado su orgullo “por ser reconocida como una de las mujeres más influyentes de la comunicación política, y más si es un premio reconocido en Washington, en la capital del mundo”, una ciudad donde ha tenido la oportunidad de estudiar gracias al esfuerzo de sus padres, “dos autónomos conductores de autobús”.
Martín, quien ya recibió otro Victory Awards por su blog ‘angelapaloma.com’ en la mención de ‘Impacto informativo’, ha confesado que el premio que ahora recibe es «especial». «Supone el reconocimiento de las mujeres en una industria donde solo parece haber hombres, y es un paso más hacia la igualdad», ha afirmado. No obstante, ha advertido de que en el mundo de la comunicación y de la información «el reconocimiento femenino es aún un reto».
Ángela Paloma Martín (Puertollano, 1985) trabaja en la actualidad en Ideograma, el despacho del consultor político y asesor de comunicación Antoni Gutiérrez-Rubí, y dirige Ideograma LatAm desde Ecuador.
Es autora del libro “Se llamaba Alfredo… Las claves de una derrota electoral inevitable” y ha sido colaboradora y editora de la revista americana Campaigns & Elections en su versión en español. Escribe para El País artículos relacionados con el ámbito de la mujer y el liderazgo femenino, entre otras colaboraciones, y en mayo de 2014 fue destacada por la revista Vanity Fair como uno de los 30 jóvenes españoles con menos de 30 años que han despuntado en sus profesiones.
Esta «puertollanera», de Argamasilla de Calatrava, de padres y hermanos rabaneros, que todo hay que decirlo.
Enhorabuena paisana por tus éxitos y sobre todo por la alegría que devuelves a tu familia y el orgullo que haces sentir a tus paisanos.
Como no también a esos padres que día a día han sacado a sus hijos adelante con la máxima humildad.
Pues que cuente la ruina que tiene su pueblo al otro lado del charco.
Felicidades. Pero lo de «hispana» aquí no suena así. Europea sí.