Puertollano con el Santo Voto vive uno de sus días grandes del calendario festivo, que comenzó a caminar en mitad de la lluvia, que no impidió que las llamas de nuevo llenaran de luz en la noche previa a la Octava de la Ascensión.
La alcaldesa, Mayte Fernández, fiel a la tradición prendió una de las calderas situada en la glorieta de la Virgen de Gracia, en una larga hilera de ollas que también fueron encendidas por la dama del Santo Voto, Manuela Cid; el director provincial de fomento, Casto Sánchez; director de Repsol, José Luque, así como una amplia representación de la Corporación Municipal.
Mayos de los grupos folklóricos
Ya en el interior de la carpa contigua a la Ermita de la Virgen de Gracia, a resguardo de la lluvia, las voces de hombres y mujeres se escucharon en forma de canto con la Asociación Folclórica Virgen de Gracia que interpretó los mayos de Cuenca y Alcázar, mientras que la Asociación Folklórica Puertollano optó por el mayo de Corral.
Altar de la Virgen
Durante toda la noche la ermita permanece abierta para que los devotos puedan acompañar a la Virgen de Gracia en la jornada previa al Voto a la patrona. Para la ocasión la Virgen ha sido bajada de su camarín y colocada en un altar llena de rosas blancas, tras intenso trabajo de la Cofradía de Señoras.