Miembros de varias Plataformas de Afectados por la Hipoteca de la provincia se han concentrado esta mañana a las puertas de la sucursal de Liberbank en Torrabalba de Calatrava para reclamar que la entidad financiera se siente a negociar una salida para Luisa y Jesús, un matrimonio de ganaderos de esta localidad que no puede afrontar el pago de los préstamos contraídos años atrás.
Tras reunirse con representantes del banco, desde el colectivo antidesahucios han celebrado la «actitud dialogante» de Liberbank, que se ha «comprometido» a retomar el caso. La PAH espera que dicho compromiso sea «serio» y se encuentren soluciones «razonables y factibles» que desbloqueen la situación actual: un conflicto sin resolver desde 2012.
Luisa y Jesús solicitaron dos préstamos, uno de ellos garantizado por una vivienda sin cédula de habitabilidad y el otro por su residencia habitual. «Por causa de retrasos en el pago de la PAC y la crisis no pudieron afrontar la cuotas de las hipotecas», explican desde la PAH. Este matrimonio de ganaderos trató de negociar con el banco desde que comenzaron a padecer problemas económicos. Recuerda el colectivo que, en los primeros escritos que entregaron al banco, en 2012, solicitaban una reducción de las cuotas mensuales. La Plataforma recalca que, en aquel momento, Liberbank no se les ofreció ninguna alternativa y que, de haberlo hecho, Luisa y Jesús hubieran podido afrontar los pagos. Ante la negativa de la entidad a atender las demandas de los afectados, éstos cayeron en impagos, lo que derivó a la postre en la ejecución hipotecaria de ambos inmuebles. La PAH presentó un escrito de oposición a la ejecución por cláusulas abusivas debido a las cláusulas suelo, que se ganó, «pero aun así el matrimonio continuaba debiendo dinero al banco».
La Plataforma reprocha a la entidad que durante los cuatro años que esta pareja «lleva peleando» no accediera a realizar ninguna reestructuración de la deuda y que se haya negado a cumplir en repetidas ocasiones el código de buenas prácticas, reclamando a los afectados continuamente la misma documentación.
Tras la negociación de esta mañana, Liberbank se ha «comprometido» a agilizar los trámites y a estudiar la dación en pago en el caso del préstamo de la vivienda sin cédula de habitabilidad. La situación del otro inmueble es más complicada, pues estaría sujeto a un posible embargo. Desde la PAH han propuesto concatenar códigos de buenas prácticas para disponer de una cadencia de cinco años durante la que los afectados pagarían una cuota inferior o, una vez finalizada la ejecución hipotecaria, condonar la deuda con un alquiler social de tres años.