Juan Carlos Illescas Díaz (Presidente ANPE-CLM)
ANPE Castilla-La Mancha ha desarrollado su campaña electoral con un único objetivo: trabajar por los docentes. Ha organizado sus reivindicaciones en un proyecto común que mantiene los rasgos de identidad que han definido nuestra gestión: independencia, eficacia y profesionalidad. La razón que nos mueve es nuestro compromiso con los 27.000 profesores castellano-manchegos. Queremos mejorar la Educación, queremos mejorar la profesión docente.
Llevamos años trabajando en pro de una mejor situación laboral para los docentes de nuestra región. No sólo tenemos enormes diferencias cualitativas y cuantitativas con los profesionales del mismo sector de otras comunidades autónomas sino que, incluso, nuestros compañeros de la Función Pública disfrutan de una serie de beneficios a los cuales, nosotros, sin saber por qué, no tenemos derecho.
Exigimos que nos equiparen en igualdades y derechos a nuestros compañeros: docentes y funcionarios, pero además que mejoren nuestras condiciones laborales. Nuestras reivindicaciones se centran en cuatro ejes fundamentales: salarios, ayudas y prestaciones, formación y promoción profesional y condiciones laborales en general.
Es prioritario que se revisen y mejoren los conceptos salariales para equipararlos con los que perciben los docentes de otras comunidades autónomas y trabajadores adscritos a la Función Pública en general. Es necesario que se creen otros complementos por tareas tales como: tutoría, desempeño de especialidad, permanencia en el centro, especial dedicación, itinerancia, puestos de difícil desempeño, coordinación de Ciclo y coordinación de Equipo de Orientación y Apoyo.
Reclamamos que se aumenten los complementos de destino, la puesta en marcha de un Plan de Pensiones y Pago de Productividad y que se regule un sistema de gratificaciones por actuaciones extra.
Igualmente exigimos la puesta en funcionamiento de una serie de mecanismos correctores para llegar a recuperar el poder adquisitivo perdido y para incorporar en nuestros contratos la cláusula de revisión salarial.
En cuanto a las ayudas y prestaciones, nuestras reivindicaciones se centran, sobre todo, en mejorar algunos aspectos del Programa de Acción Social. Reclamamos aumentar su dotación -hasta alcanzar en su cuantía el 1% de la masa salarial- y los conceptos de dicho programa. Ofrecer ayuda familiar por cada hijo menor de edad. Crear becas de estudio específicas para hijos de docentes. Prestaciones similares a MUFACE para los interinos, mejorar las ayudas económicas individuales para formación para subvencionar íntegramente matrículas, gastos de desplazamiento, alojamiento y manutención y aumentar los incentivos por jubilación anticipada, y que éstos se perciban en dos plazos para aminorar efectos fiscales.
Los docentes tenemos derecho a mejorar nuestras condiciones laborales mejorando nuestra formación. Creemos, y así lo estamos reivindicando, que dicha formación revierte en nuestros alumnos, en la mejora del sistema educativo y por ello es importante que la Administración nos ayude y nos apoye. Por eso, en cuanto a formación, consideramos conveniente aumentar el número de licencias por estudios retribuidas, hasta alcanzar el 1% de la plantilla real, permitir la formación en horario lectivo, incrementar el número de convenios que sirvan para la adquisición de habilitaciones y especialidades de manera gratuita y aumentar el número de días lectivos por curso para una formación sin condicionantes.
La promoción en nuestra carrera, también es muy importante. Si trabajamos para la Administración exigimos que sea ésta, la que nos dé posibilidades de ampliar nuestro horizonte profesional y perseguir las metas laborales que nuestra formación y capacidad nos permiten. Queremos promoción profesional basada en el concurso de méritos, que aumente el número de profesores asociados a la Universidad, acceso a otros puestos de la Administración, compatibilidad para el desempeño de otros trabajos, que se convoquen Concursos de Traslados Nacionales todos los años y la posibilidad de disfrutar de un año sabático.
Mejorar la situación de nuestras jornadas, horarios y calendarios así como ampliar la protección docente, las plantillas y la salud laboral, entre otras cuestiones, es para ANPE un objetivo a conseguir. Nuestras reivindicaciones con respecto a las condiciones laborales de los docentes ocupan buena parte de nuestro programa de acción sindical. Para conseguir dichas mejoras planteamos, en relación a la jornada, horario y calendario, la autonomía real de los centros educativos para que puedan proceder a la elección de su modelo de jornada para lo que es necesario aumentar las cuantías y recursos materiales y humanos, destinados a tal fin.
En este sentido, también, exigimos que se exonere a los docentes de vigilar el desarrollo de las actividades extracurriculares, la reducción de la jornada lectiva semanal desligando, además, la jornada lectiva del docente de la del alumno y reduciendo, de manera efectiva, la jornada para todos los docentes mayores de 55 años. La disminución de la jornada, en un tercio o la mitad, para atender problemas específicos sin condicionarla a trimestres completos y la equiparación de los permisos y licencias del profesorado con respecto al resto de funcionarios aplicando el Plan Concilia.
Para proteger al docente, exigimos la elaboración de un Protocolo de Responsabilidad Civil en el que se definan claramente las respuestas a determinadas problemáticas como accidentes, violencia escolar, ataques a la honorabilidad o situaciones de riesgo en general, respaldado de un seguro que cubra todas y cada una de dichas incidencias y que se nos considere autoridad pública.
Reclamamos la dignificación de la función docente exigiendo para ello a la Consejería un mayor reconocimiento de nuestro trabajo, la escolarización preferente de nuestros hijos en nuestros centros de trabajo, el aumento de las ofertas de ocio y la gratuidad total de los medicamentos a nuestros jubilados.
ANPE demanda la reducción de las ratios máximas actuales, la negociación de un acuerdo sobre plantillas para todo el Sistema Educativo obligatorio con especial atención a la Zona Rural y a la Educación Infantil así como, la dotación de un maestro de esta especialidad por cada tres unidades de esta etapa. Estas peticiones, necesarias para formar una correcta plantilla docente, se unen a la solicitud de separación de las etapas de Educación Infantil y Primaria en una misma aula. Igualmente pedimos que no permanezcan en una misma clase alumnos de más de un ciclo y la creación de un sistema que facilite la movilidad y estabilidad de funcionarios e interinos.
Para un mejor funcionamiento de nuestra labor educativa, exigimos la contratación de auxiliares técnicos educativos para Educación Infantil, la de personal de administración, servicios y conserjes para tareas no docentes y la contratación de un Servicio Médico Escolar.
La mejora de la situación de los interinos pasa por la reducción del empleo inestable, la posibilidad de solicitar más de una provincia para sustituciones, la existencia de Tribunales de Oposiciones de todas las especialidades (en todas las provincias), el cobro de complementos por antigüedad y la regulación del reglamento de funcionamiento de los Tribunales para objetivar los procesos de concurso-oposición.
En cuanto a las itinerancias, requerimos la actualización de su acuerdo, la revisión de la orden de accidentes y la disponibilidad de un parque móvil para los desplazamientos. Exigimos, para mejorar nuestra salud laboral, la aplicación de la normativa sobre Prevención de Riesgos Laborales y Salud Laboral, la generalización de las revisiones médicas voluntarias y la adecuación de éstas a las patologías propias de nuestra labor, un catálogo de enfermedades profesionales, formación sobre temas de salud laboral, un estudio y evaluación de los riesgos de cada puesto de trabajo y un diseño específico de segundos puestos de trabajo para profesionales que por sus condiciones físicas o psíquicas no pueden desarrollar con normalidad su función docente.
También, exigimos el urgente desarrollo de los artículos 104 al 106 de la L.O.E. sobre la mejora de las Condiciones Laborales de los Docentes, la negociación del Estatuto de la Función Pública Docente, la adaptación de los Reglamentos Orgánicos de los Centros a la nueva realidad educativa, la potenciación de la Formación Profesional, un Programa de Prevención de Riesgos Escolares y la modificación de la Carta de Derechos y Deberes de los Alumnos.
Muchas de estas reivindicaciones se han logrado en estos días de campaña, por ejemplo el Plan Concilia, exoneración de vigilancia en actividades no programadas por el claustro, reducción de jornada a mayores de 55 años, siete días de permiso para formación y la mejora en casi un 30% del incentivo por jubilación anticipada, situándose en el segundo puesto del ránking nacional.