La planta baja de la Casa de la Cultura de Miguelturra acoge, desde este miércoles y hasta el próximo lunes 29 de febrero, en horario de apertura de este centro, la exposición «El deporte en Ciudad Real, años 50, 60 y 70, del fotógrafo ciudadrealeño Manuel Herrera Piña, fallecido en 2007, que organiza la Universidad Popular de Miguelturra en colaboración con la Diputación Provincial de Ciudad Real.
Esta exposición ofrece un material muy valioso que permite conocer y apreciar en su justa medida el desarrollo que ha experimentado el deporte español hasta nuestros días, a la vez que nos reconcilia con un pasado filtrado a ratos por la nostalgia, la sorpresa, la incredulidad o la mirada sentimental
Se han seleccionado 86 fotografías que conforman en síntesis una auténtica crónica visual, histórica y social del deporte en la provincia, tanto a nivel colectivo como a nivel individual, atletas y balonmanístas que han pasado a la historia, jugadores de baloncesto o practicantes de tiro, chicos y chicas del voleibol, nadadores y gimnastas, insólitas canchas y terrenos de juegos, el piragüismo tan seguido y practicado entonces, la admiración hacia el esfuerzo de los ciclistas, motociclismo, ajedrez, artes marciales, tenis de mesa, el deporte cinegético y la pesca, hasta la hípica.
En el deporte de masas que ya era el fútbol, con dos equipos emblemáticos en su época: Calvo Sotelo de Puertollano, y el CD Manchego de Ciudad Real, reviven ante nuestros ojos, atónitos y sorprendidos por el entusiasmo y el sacrificio de tantos deportistas y aficionados, que contribuyeron a sentar las bases de la práctica deportiva en España.
La exposición tiene características de auténtica novedad para el público. Procedente del archivo familiar del autor -en cuya digitalización está colaborando la Diputación-, se han seleccionado más de ochenta imágenes que conforman en síntesis una auténtica crónica visual, histórica y social de nuestro deporte.
Esta exposición que inició su recorrido itinerante el pasado 9 de abril, dentro del marco de la celebración de la Gala Provincial del Deporte en Puertollano, es la segunda que recibe la Casa de la Cultura de Miguelturra del genial fotógrafo, tras la de «Herrera Piña: fotografías de Ciudad Real de los años 50 y 60», formada por un total de 68 imágenes, que se pudo ver, por primera vez, el 24 de abril en Miguelturra, con motivo de la celebración del Día del Participante, de las Universidades Populares, en la que se ofrecía una crónica en síntesis de estas dos décadas desde el mundo rural, los trabajadores, la vida lúdica, el papel de la mujer, los niños, hasta el estamento oficial o los reportajes del momento, en un recorrido melancólico pero ante todo humano e imperecedero.
Manuel Herrera Piña fue el único reportero de la época en Ciudad Real, un trabajo que compaginaba con su puesto de funcionario, y que le permitió estar presente en los acontecimientos más destacados de la historia de la provincia entre los años 50 y 80, dejando un importante legado histórico en imágenes.
Por los objetivos de este reportero pasó todo género de información gráfica, desde la oficial e institucional hasta los acontecimientos festivos, tradicionales, turísticos, deportivos o de interés humano de los distintos pueblos, así como infinidad de festejos taurinos, una de sus verdaderas pasiones.
Si bien como periodista gráfico cubrió todos los frentes de actualidad, el deporte, por lo que tiene de espectáculo público y de reto personal para la condición humana, ocupó buena parte de su actividad profesional.
Sus fotos levantaron acta y testimonio de los esforzados deportistas manchegos, algunos de ellos auténticos pioneros en su momento.
Los años del franquismo, la transición y la actual democracia han quedado registrados por cerca de 300.000 negativos en blanco y negro, además de una gran cantidad todavía no cuantificada de clichés en color y diapositivas, que componen su legado fotográfico, que constituyen un testimonio excepcional de su tiempo
Biografía
Manuel Herrera Piña nació en Ciudad Real el 15 de septiembre de 1934 y falleció en esta ciudad el 13 de enero de 2007. Se formó como fotógrafo en el estudio de Eduardo Matos, alternando su trabajo de funcionario con el de colaborador gráfico en distintas publicaciones. En 1955 ingresó como redactor gráfico en la revista deportiva Arco y en diciembre de 1956 comenzó a trabajar como fotógrafo en el diario Lanza y en el semanario Hoja del lunes; desde entonces colaboraría en ABC, Informaciones, Arriba, Pueblo, El Ruedo, Marca, La Tribuna, etc. Fue corresponsal de las agencias Efe, Europa Press y Fiel y, desde 1967, corresponsal-filmador de TVE en la provincia.
