Multitudinario respaldo de vecinos y alumnos en el acto de rechazo a la violencia de género organizado desde el área de Mujer en la Plaza de España. «Seguiremos señalando este 25 de noviembre mientras siga habiendo víctimas. Debemos seguir trabajando este mes, y durante todo el año, para que no haya ni una más», señaló la concejal de Mujer, Alicia Loro.
Un gran lazo de color violeta colgaba este miércoles, 25 de noviembre, del balcón del Ayuntamiento de Daimiel. Con él, la administración local mostraba su rechazo al maltrato en el Día mundial contra la Violencia de Género. Fue la puesta de largo a un acto organizado por la concejalía de Mujer y en el que participaron numerosos vecinos y vecinas y una amplia representación de estudiantes. Todos ellos, además de apoyar a la causa con su presencia, pudieron plasmar durante la mañana sus mensajes de apoyo a las víctimas y de rechazo a esta lacra mediante unas manos de papel dispuestas para la ocasión donde quedaban reflejadas anotaciones espontáneas al respecto. Un símbolo que quedó soldado en el mural expuesto junto al Consistorio.
El alcalde, Leopoldo Sierra, y la concejal de Mujer, Alicia Loro, junto a otros miembros de la Corporación respaldaron el acto junto con representantes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. Durante el recibimiento, la responsable de Mujer quiso agradecer el seguimiento al tiempo que consideró que no sólo se trata de una agresión sino de «una de las violaciones más grandes de los derechos humanos». «Seguiremos señalando este día mientras siga habiendo víctimas. Debemos seguir trabajando este noviembre, y durante todo el año, para que no haya ni una más», subrayaba la concejal. De esta manera, señalaba que «poderes públicos, cuerpos y fuerzas de Seguridad y sociedad en general se deben implicar de forma continua y constante para recuperar valores como el respeto, la igualdad y la tolerancia».
Por su parte, el alcalde recalcó la importancia de manifestar la «repulsa» a este tipo de violencia y precisó que la «educación en valores de lo jóvenes es básica para erradicar por completo esta problemática». Sierra consideró que el Centro de Mujer es un recurso que se dispone para cualquiera que necesite de sus servicios en áreas como psicología, jurídica y empleo. Animó a utilizar esta herramienta, al tiempo que alentó a «dar el paso y denunciar ante las autoridades cualquier caso de maltrato». «Entre todos tenemos que luchar por que, en un futuro no muy lejano, no tengamos que volver a conmemorar este día», zanjaba.
Seguidamente, se procedía a la lectura por parte de alumnos y alumnas de 4º de la ESO de los institutos de secundaria daimieleños del manifiesto contra la Violencia de Género elaborado por el Instituto de la Mujer de Castilla – La Mancha. En el texto, el Gobierno Regional se compromete a seguir prestando una atención integral y suficiente a las mujeres víctimas de violencia de género, así como a sus hijas e hijos, y a desarrollar campañas de prevención de la violencia de género y de promoción del valor de la Igualdad, potenciando el empoderamiento de las mujeres y el desarrollo de nuevos modelos de masculinidad.
El manifiesto señalaba la importancia de reforzar la apuesta por la igualdad real y efectiva entre mujeres y hombres «porque es lo justo y porque además contribuye decididamente, mediante la potenciación de los talentos y capacidades de las mujeres, a mejorar eficiencia de nuestra sociedad». Por último, el documento aboga por la creación de un gran Pacto de Estado Estado «por una sociedad segura y libre de violencia machista».
El evento se cerró con un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas y con un acto simbólico en el que los asistentes levantaron al cielo sus manos abiertas.
