El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha participado en la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente en la que el Ministerio de Agricultura Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) ha informado a las comunidades autónomas de las negociaciones sobre cambio climático de cara a la Convención que la ONU ha convocado en París (COP21) el próximo 30 de noviembre. El Gobierno de Castilla-La Mancha ha solicitado que se tenga en cuenta el peso medioambiental de la agricultura en la reducción de CO2 a la hora de hacer los cálculos en la esperada reducción de gases de efecto invernadero.
Tras la Conferencia Sectorial, el consejero ha valorado esta reunión previa con el Ministerio, en la que Castilla-La Mancha ha llevado el voto delegado de Extremadura y Andalucía debido a la “relevancia” de la COP-21, y ha señalado que “nos jugamos mucho todos”. En este sentido, ha destacado que “los objetivos de la Comisión Europea son ambiciosos para la Cumbre y el Gobierno de Castilla-La Mancha comparte esa posición del Consejo de Ministros Comunitario”.
Martínez Arroyo ha asegurado que “es muy importante que el objetivo y la apuesta de la Unión Europea sea la reducción de los gases de efecto invernadero total, de cara a 2100 y que se controle el incremento de la temperatura en un máximo de dos grados respecto al período pre-industrial”.
En cuanto a la posición de Catilla-La Mancha, el consejero ha trasladado “la necesidad de que se tenga en cuenta a la hora de hacer los cálculos el efecto sumidero (absorción de CO2) que supone el sector agrario”. Y ha insistido en que “el sector agrario es muy potente, desde el punto de vista de la absorción de gases de efecto invernadero y eso tiene que tenerse en cuenta en esas negociaciones y tiene que formar parte del acuerdo al que se llegue en París, en los próximos días».
El consejero ha manifestado también la importancia de la educación ambiental que tenemos que hacer a todos los niveles y ha asegurado que “en Castilla-La Mancha lo vamos a hacer con los agricultores y en los colegios, proyectos en los que también estamos trabajando. Todo es sembrar para el futuro pero, yo soy optimista, creo que la sociedad está cada vez más concienciada de la necesidad de luchar contra el cambio climático».
Respecto a los principales escollos que puede tener el acuerdo en París, a juicio del consejero será, “la negociación con los países en vías de desarrollo que tienen más dificultades de reducción de gases de efecto invernadero”.
A preguntas de los periodistas, respecto a la seguridad de la Cumbre el consejero ha explicado que la ministra les ha transmitido el incremento de las medidas de seguridad, pero que, en cualquier caso, “los que asisten a estas Cumbres ya están muy habituados, además se va a celebrar muy cerca del aeropuerto, en el extrarradio de París, con lo cual todo eso facilita el aumento de la protección”, ha añadido.
Oficina de Cambio Climático en CLM
En Castilla-La Mancha, la Oficina de Cambio Climático se creó en el año 2007. Una de sus primeras tareas fue coordinar el Informe sobre los Impactos del Cambio Climático en Castilla-La Mancha que publicó en el año 2009, y donde un amplio conjunto de expertos de la Universidad regional analizaron una serie de sectores de interés para la región sobre las previsiones de clima futuro.
Sobre esta base, y tras un largo proceso de participación e información pública que se inició en 2009, se elaboró la Estrategia de Mitigación y Adaptación frente al Cambio Climático, que el Gobierno de Castilla-La Mancha aprobó el 29 de marzo de 2011.
Actualmente la Oficina de Cambio Climático de Castilla-La Mancha está procediendo a la revisión de la estrategia regional de Cambio Climático para su actualización y reformulación a los objetivos europeos y la realidad regional de forma coordinada con el Plan de Desarrollo Regional (PDR) 2014-2020.
