Los integrantes de Juventudes Socialistas de la Provincia de Ciudad Real, están preparando un acto de calle para sensibilizar a la población, con motivo del Día Internacional Contra la Violencia de Género que se celebra el 25 de noviembre.
Su acción será manifestada en la Calle General Aguilera de la capital, a partir de las 12 horas del día 21 de noviembre. Una demostración, por parte de estos jóvenes del Partido Socialista, de que condenan y muestran todo su apoyo a las mujeres «que sufren o han sufrido violencia de género», han manifestado.
En lo que va de año, ya son 51 las víctimas mortales que se ha llevado este tipo de violencia, 48 de ellas mujeres y en 3 de los casos menores. Y para las que están sufriendo, desde Juventudes Socialistas se les quiere lanzar el mensaje de » que no están solas, que el infierno por el que pasan, al igual que tiene un principio, tiene un final».
También recuerdan que la sociedad es cada día más consciente de este grave problema, como se demostró el pasado 7 de Noviembre, cuando tuvo lugar la Marcha estatal contra las Violencias Machistas. Una marcha que invadió Madrid, y a la que acudieron personas de todos los rincones de España. «Por eso les decimos que no están solas, que acaben con el silencio y el sufrimiento en el que se encuentran atrapadas y acudan a los medios que hay para protegerlas y ayudarlas cuando decidan acabar con esa relación que puede terminar con su vida», ha explicado Rubén Sobrino, secretario provincial de Juventudes Socialistas.
Y desde la organización no quieren olvidar «que el gobierno central no hace sino empeorar las posibilidades de ayuda a las víctimas», según manifiestan, al hacer desaparecer el principio de igualdad del discurso político y «no considerar a la violencia de género como una de sus prioridades». Un hecho que concretan con cifras, ya que desde que llegara el Partido Popular al gobierno, se ha recortado en un 22%, la partida destinada a la lucha contra la violencia de género.
Datos que no entienden, al considerar que las políticas de igualdad y la educación en igualdad deben ser prioridades de cualquier gobierno, independientemente de su signo político. Y exigen un acuerdo político, social e institucional para erradicar esta lacra, porque «la lucha contra la violencia de género es un asunto de Estado», ha concluido Sobrino.
