Paco Acero.- Este 7 de octubre han vuelto a repicar las campanas en Almodóvar del Campo. Tres años después, la localidad ha querido rememorar así aquel 7 de octubre en el que el Papa Benedicto XVI proclamaba la más alta distinción que la Iglesia puede hacer para uno de los suyos, ser un Doctor de la fe en Dios.
San Juan de Ávila es desde entonces considerado como tal y por eso Parroquia y Hermandad de los Santos han querido tañer un gesto tan sencillo, tanto como lo era la persona de este almodovareño que, allá por aquel frenético siglo XVI, decidió desprenderse de todo lo materialmente incompatible con su entrega a Jesucristo y, por ende, a todo prójimo necesitado de espiritualidad y, en su caso, de medios de vida.
La proclamación era un anhelo entre quienes sabían de la condición docta de este hombre sencillo, cuyos sermones en vida llegaron a incomodar en determinados estamentos hasta el punto de que eso le valió la cárcel inquisitorial, pero que acabaría siendo comprendido como alguien que traía un mensaje de renovación a la doctrina católica, finalmente comprendida y aceptada por todos. Sus textos y reflexiones son hoy objeto de consejera consulta.
La decisión del Vaticano, que coincidió en ceremonia con la consideración también como Doctora de la Iglesia de la alemana Hidelgarda de Bingen, fue felizmente celebrada en Almodóvar del Campo y daría paso al año siguiente a un año jubilar que atrajo hasta esta cuna avilista a más de 20.000 peregrinos que, así, obtuvieron también indulgencia plenaria.
Parroquia, Hermandad y decenas de voluntarios se desvivieron por superar tantas expectativas que abría el jubileo. Un periodo que servía para conocer más y profundizar mejor en las enseñanzas que el maestro Ávila dejó escritas y los ejemplos de humanidad de los que dieron testimonio otros santos y seguidores coetáneos y sus diferentes biografías. Algo que también vino a hacerse palpable materialmente a través del nuevo oratorio y acceso a la cueva donde entregaba su alma al Señor antes de partir definitivamente de Almodóvar del Campo.
Terminado el año jubilar, la población ha evitado que la huella se borre y ha seguido tallando firmes piedras para que todos, vecinos y visitantes, tenga bien viva la llama de san Juan de Ávila. La recuperación integral de la fachada de su casa natal el pasado año es ejemplo, pero este 2015 lo está siendo la coordinación del programa de peregrinaje ‘Vocatio’, que espera ansiosamente su puesta en marcha definitiva y que tiene en el video-mapping 4D del templo parroquial su principal aliciente.
Agradecimiento a monseñor Algora
Fechas atrás, con motivo del alcanzar la edad límite en su condición de obispo, la Hermandad de San Juan de Ávila y San Juan Bautista de la Concepción, agradecía a Antonio Algora la implicación personal y espiritual que ha tenido en los acontecimientos más destacados de este recorrido avilista en Almodóvar del Campo.
Paqui Hipólito, presidenta de esta organización cofrade que también en breve va a ver renovada su actual directiva y a la cual llegó como vocal en 2001, destacaba en la misiva la apuesta que monseñor Algora Hernando ha mostrado por la juventud como vía de renovación de la fe en Cristo, al igual que en su tiempo representaron los hoy santos almodovareños cuando desde bien pronto decidieron dedicarse en cuerpo y alma a Dios. Un ejemplo se puede encontrar en la designación del actual párroco, Juan Carlos Torres, que ha sabido recoger el legado en la parroquia de los hermanos sacerdotes Tomás y Leopoldo Rivas y dar un impulso nuevo a la acción de la Iglesia en esta localidad.
Impulso que tuvo en el año jubilar su principal piedra de toque, que ahora va a dar paso al proyecto ‘Vocatio’. Su puesta en marcha, a falta de concluir la ejecución de la infraestructura audiovisual del mapping del que retablo parroquial será soporte, está bien definida y, de hecho, el viernes de la semana pasada se entregó ya el primer material informativo y promocional que se ha editado a los participantes en el Encuentro de Delegados de Pastoral de Juventud de España, que recalaba en Almodóvar como una de las subsedes en la Diócesis de Ciudad Real.
Año teresiano
Por lo demás, la localidad que vio nacer a san Juan de Ávila y san Juan Bautista de la Concepción se ha querido significar también en este año del quinto centenario del nacimiento de santa Teresa. A lo largo del año han tenido lugar varios actos coordinados por la Parroquia, las hermandades de hombres y mujeres de la Virgen del Carmen y la organización local del Carmelo Seglar.
A sendas conferencias monográficas, una en febrero sobre el reformador trinitario que ofreció el carmelita Lucio del Burgo y otra en mayo en torno al santo doctor que impartió el padre fray Antonio Benéitez, seguiría en junio la visita del bastón de la santa andariega, que en vida pasó por Almodóvar del Campo, profetizando la condición santa del entonces joven Juan Bautista. Con su pariente, Juan de Ávila, Teresa mantendría una relación epistolar que resultó decisiva sobre sus experiencias místicas.
Y ya la semana pasada, el templo dedicado a la Virgen del Carmen, que custodia la imagen que la localidad tiene dedicada a santa Teresa, compartió nuevamente junto al padre Benéitez, un triduo con motivo de este quinto centenario cuya fecha grande se alcanzará el próximo 15 de octubre.
