Integrar la deliberación ética en la práctica clínica habitual para que esté guiada por los principios bioéticos y de prudencia. Bajo ese objetivo se han dado cita esta semana en el Salón de Actos del Hospital General ‘La Mancha Centro’ de Alcázar de San Juan hasta 90 trabajadores del área sanitaria de distintas categorías.
El ‘Curso Bioética en la asistencia sanitaria’ -celebrado entre el martes y el miércoles con elevada participación- fue impartido por tres profesionales que son diplomados en Bioética por la Escuela Nacional de Salud y pertenecen al grupo promotor del Comité de Ética Asistencial del área sanitaria Mancha Centro.
En concreto, los docentes fueron el jefe de Servicio de Pediatría, Ramón Garrido; el jefe del Servicio de Farmacia, Juan Carlos Valenzuela; y la médico de familia del Centro de Salud de Tomelloso II, Aurelia González.
Durante dos sesiones fueron los encargados de trasladar los principios básicos de la bioética y enseñar algunos de los conceptos básicos, como la autonomía del paciente, la limitación del esfuerzo terapéutico, la confidencialidad o el derecho a la intimidad, para afrontar los conflictos de valores en la práctica asistencial.
Además, como miembros del Comité de Ética Asistencial del área, el cual está constituido por un equipo multidisciplinar, expusieron cuáles son los supuestos en los que los profesionales pueden solicitar su asesoramiento en los dilemas éticos que se plantean en la práctica diaria.
“Mejorar la formación en una disciplina que tiene en cuenta las características del pluralismo cultural, pone en relación el conocimiento del mundo biológico con la formación de actitudes y el desarrollo de políticas encaminadas a conseguir el bien social”, según los organizadores.