Daimiel Noticias / Fotos: José Ramón García Carpintero.- La banda de Fito Cabrales llevó en la noche del viernes su última gira “Huyendo conmigo de mí” al Auditorio Municipal de la localidad. Lo hizo con un espectáculo de dos horas y media de canciones que ya son clásicos del pop rock en castellano. Los Zigarros, con puntualidad británica, fueron los encargados de abrir una velada que se alargó hasta la 1:00 de la mañana.
La última parada de Fito & Fitipaldis en Daimiel en concierto volvió a convencer y emocionar a un público que en la noche del viernes arropó masivamente las canciones de Fito Cabrales (Bilbao, 1966) en el Auditorio Municipal de la localidad. 6.000 gargantas acompañaron al músico bilbaino en un espectáculo de dos horas y media que sirvió para presentar los temas de su último disco “Huyendo conmigo de mí”, pero también para recordar composiciones que ya se han convertido en auténticos éxitos del pop rock en castellano. Y es que Fito, más allá de una masiva legión de fans que lo acompañan allá por donde va (también en Daimiel), puede presumir de haber escrito algunas de las canciones que quedarán en el imaginario colectivo de incluso aquellos que solo lo han escuchado en la radio o en el súper. Aunque no se hayan detenido a indagar en su discografía. Muestra de ellos son canciones como “Soldadito marinero”, “Por la boca vive el pez” o “La casa por el tejado”, que estribillo a estribillo fueron seguidas por todo tipo de fans, fieles y esporádicos.
Los más nostálgicos – muchos de ellos ya se habían visto las caras con Fito en Daimiel en 2004 o 2007- tuvieron su momento para el recuerdo con canciones como “Alucinante”, que fue incluida en el álbum “7” que publicó Platero y Tú en 1997. Momento íntimo y emotivo que no fue el único de la noche. Unos minutos antes los fans del desaparecido Javier Khrae tuvieron la oportunidad de escuchar en la voz de Fito una adaptación de “Nos ocupamos del mar”, tema que dio a conocer el cantautor Alberto Pérez. No fue la única versión del concierto, también hubo tiempo para “Quiero beber hasta perder el control”, de Los Secretos. Todo ello con una potente puesta en escena que destacó desde los primeros acordes del concierto, cuando en las pantallas gigantes del reciento se proyectó un resumen de la discografía de Fito con los Fitipaldis.
Precisamente de ellos, de los Fitipaldis, el único miembro original que sigue acompañando a Fito en directo es Javier Alzola, el saxofonista, que junto a Daniel Griffin a la batería, Joserra Semperena a los teclados y Alejandro Climent Boli al bajo, completan una formación encabezada por el multifacético guitarrista y productor Carlos Raya.
Los Zigarros: reivindicando el Rock and Roll desde Valencia
Justo él, Carlos Raya, hace un par de años se hizo cargo de la producción del primer disco de estudio de Los Zigarros. La banda valenciana encabezada por los hermanos Álvaro y Ovidio Tormo llegó a Daimiel en uno de los momentos más dulces de su carrera: la semana que viene se reedita una edición especial de su primer disco homónimo y estarán tocando en la Plaza de Toros de las Ventas junto a Fito & Fitipaldis. Unos acontecimientos con los que, aseguraba Ovidio minutos antes de telonear a Fito, están “encantados”. Y añadía “Mejor no nos puede ir, estamos con Fito que lo adoramos, y somos fans y encima cada noche nos ven un montón de personas”.
Herederos de la música de Tequila o los primeros M Clan, los valencianos, que en Navidad se meterán de nuevo en el estudio de grabación para trabajar en su segundo disco, no desaprovecharon ni uno solo de los pocos minutos que tuvieron para meterse al público de Daimel en el bolsillo. Y lo hicieron adaptando su repertorio a un formato menos extenso pero de la misma intensidad, como explicaban “el concierto de hoy es el mismo que podemos dar en un bar o que daremos la semana que viene en Las Ventas. Llevamos un repertorio muy directo de rock and roll. Es cierto que aquí tenemos más medios pero realmente es lo mismo”.
Reivindicaron el rock and roll sin más apelativos, que al fin y al cabo es lo que ellos hacen. “Así es el rock, y no el pop”, recalcaron durante un frenético directo en el que sonaron canciones como “Hablar, hablar, hablar…”, “Antes de los muertos”, “Dispárame” o “Voy a bailar encima de ti”. Es solo Rock and Roll, con sus clichés incluidos, pero nos gusta.
