El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha sido recibido esta tarde en audiencia por su majestad, Felipe VI, a quien ha trasladado su visión de España en el momento actual, los retos de futuro de la región que preside y la colaboración institucional de su Gobierno, además de pedirle el apoyo que la Corona pueda prestar en proyectos importantes para la comunidad autónoma.
Así resumía García-Page las casi dos horas de encuentro en el Palacio de la Zarzuela con el Jefe del Estado a preguntas de los medios de comunicación tras finalizar el encuentro.
Del monarca, elogiaba el Presidente de Castilla-La Mancha la labor que ha desarrollado ahora que se acaba de cumplir su primer año de reinado. «Hoy casi nadie discute ni su figura, ni el papel que está desempeñando».
Se mostraba, por tanto, «optimista, desde un optimismo razonable», ante el futuro de España, a pesar de la crisis, porque, decía «este país ha venido y ha salido de situaciones mucho peores y tiene un sexto sentido que, al final, da la estabilidad que necesita».
También a preguntas de los medios, insistía en su visión sobre una futura reforma de la Constitución. «No tengo ahora mismo nada en la cabeza de lo que diga que hay que borrar de la Constitución de 1978».
Además, aseguraba que, «puestos a abrir el melón de la reforma de la Constitución, no habría que hacerlo por cuestiones territoriales, sino para hacer que derechos como el derecho al trabajo o el derecho a la vivienda sean igual de efectivos que el derecho al voto».