El discurso de la ausencia: El primer debate electoral de Puertollano se celebra sin el PSOE

Santos G. Monroy.- «Mayte Fernández. PSOE». La tarjeta con el nombre de la candidata socialista yace arrinconada en un extremo de la mesa. Detrás de ella, nadie. Los organizadores del primer debate electoral que se celebra en un recinto público en la historia democrática de Puertollano ya daban por seguro lo que se confirmó finalmente: la ausencia de la candidata del partido en el poder desde 1979. En esos instantes, la también alcaldesa participaba en los actos del Santo Voto, la más antigua tradición de la ciudad minera.

En todo caso, la Plataforma Ciudadana por el Futuro de Puertollano y la Asociación de Vecinos Las Mercedes hicieron ayer historia al lograr organizar la cita con cuatro de los cinco partidos que aspiran a formar parte de la próxima corporación municipal. Allí acudieron los cabezas de lista Juan José Jiménez Prieto (PP), Jesús Manchón (IU), Rafael López (Ciudadanos) y Verónica Milla (Convocatoria Puertollano Puede). Todos lamentaron la ausencia de Mayte Fernández, y no pudieron reprimir la sonrisa cuando Ramón Oña, uno de los miembros de la plataforma, esbozó desde los asientos del público uno de los corolarios del encuentro: «A la alcaldesa, de lo transparente que es, no se la ve».

Más que en debate, la reunión derivó en tormenta de ideas, en una conferencia a cuatro bandas sobre las soluciones para liberar a Puertollano de su marasmo. Y puso de manifiesto, dada la coincidencia «en un 70%» de las propuestas programáticas y el buen ambiente que reinó entre los candidatos, si llegado el caso no sería mejor la constitución de un gobierno de emergencia que fusionara todos colores en uno solo: Puertollano.

Pero de momento eso quedará en política ficción. Lo que sí ocurrió en la tarde ayer fue que cuatro partidos interpretaron su ciudad y disertaron sobre los derroteros por los que, a su buen entender, debiera ir la gestión municipal. Todos respondieron de forma espontánea, con honestidad y sencillez ante el público, bajo la batuta de Juan José Portero, que demostró sus dotes como moderador.

¿Cómo está Puertollano?

Los cuatro plantearon un escenario puertollanero marcado por la crisis, el descenso poblacional por debajo de los 50.000 habitantes, los recortes en sanidad y educación, el estallido de la burbuja inmobiliaria, la debacle de las energías renovables, los 7.000 parados, los 75 millones de euros de deuda, la intervención estatal de las cuentas municipales, el contraste entre las faraónicas obras del exalcalde Joaquín Hermoso Murillo y la obligada «parálisis» del gobierno Fernández. Todos señalaron el «abandono» de las instalaciones y servicios, y el malestar de algunos colectivos.

A juicio de los candidatos, Puertollano es ahora un «pueblo triste», que ha salido aturdido de una época de derroche hacia un páramo de «crisis total», atenazado entre el abandono de las renovables por parte del Gobierno de la Nación y los excesos de obras como el Terri, el Pabellón de Congresos, el Nuevo Cerrú o una Plaza de Toros que le ha valido la imputación por prevaricación al exalcalde y al secretario municipal, entre otros funcionarios.

Precisamente la transparencia para prevenir posibles casos de corrupción y facilitar la fiscalización ciudadana de la gestión municipal fue una de las grandes protagonistas del debate. Todos ven necesaria una auditoría municipal e incluso de constituir comisiones de investigación para averiguar cómo y en qué se gastó aquella lluvia de millones.

¿Con quién pactarían?

Tras recordar los principales puntos de sus programas electorales, los candidatos se metieron en harina explicando sus estrategias de pactos de gobernabilidad. Ciudadanos insiste en que respetará la lista más votada sin aceptar sillones ni prebendas. Izquierda Unida se manifiesta en los mismos términos, aunque se mostró de acuerdo en alcanzar pactos puntuales, esgrimiendo siempre el programa. Puertollano Puede lo condiciona todo a que no haya ningún imputado entre las filas de sus posibles socios, aunque advierte de que «no permitirá que gobierne la derecha», mientras que el PP se mostró partidario de acuerdos coyunturales bajo su base programática.

¿Subirían o bajarían los impuestos?

Ya a preguntas del público, la política fiscal fue la primera cuestión que centró el interés. ¿Qué pasa con la contribución (IBI) y el agua? Jesús Manchón propone una congelación del primero, pero no prometió nada sobre el precio del agua, ya que, según explicó, la gestión está hipotecada durante 50 años tras la privatización del servicio. Milla, de Puertollano Puede, abogó por una subida de impuestos según la renta familiar y la naturaleza de los bienes inmuebles, así como por «remunicipalizar el servicio». Más cauto se presentó el popular Jiménez Prieto, quien es partidario de conocer los resultados de la auditoría de las cuentas municipales antes de tomar una decisión. Similar postura adoptó Rafael López, de Ciudadanos. Él también espera conocer los resultados de la investigación de las cuentas, aunque aseguró que «subir impuestos no toca, sino ser imaginativos y sacar la pasta de otro lado».

En lo que coincidieron todos, a preguntas de otro ciudadano, fue en negociar las liberaciones de los cargos en el Ayuntamiento, de modo que sean «las menos posibles». Izquierda Unida apuesta incluso por una bajada de sueldo de alcaldes y concejales de un 15%. Igual consenso hubo en eliminar los trámites burocráticos para que los ciudadanos puedan formular sus preguntas en el transcurso de los plenos.

El botellón y la policía Local

Al acto también acudió una representación de los policías locales que demandan la instauración de una mesa sectorial para dirimir sus reivindicaciones laborales. A preguntas de uno de ellos, que inquirió sobre la redacción de una ordenanza del botellón, Ciudadanos respondió señalando que no es partidario de regularizar esa práctica, sino de «buscar sitios adecuados» pero, sobre todo, de «ofrecer alternativas a los jóvenes». IU defiende los recintos acondicionados, al igual que el PP, que va más allá y promete una ordenanza municipal que lo regule todo.

Los errores de Silicio y Solaria

También hubo un momento de reflexión para recapacitar sobre la debacle del sector de las renovables y la marcha de empresas como Solaria o Silicio Solar tras recibir subvenciones millonarias vía fondos Miner y un suelo prácticamente gratuito. Sobre este asunto, el PP no se atrevió a mojarse: «las subvenciones para las empresas son buenas y hay que aprovecharlas pero, ¿cómo saber si esas empresas se van a marchar en un futuro?». A Ciudadanos le interesa más la potenciación de la petroquímica y sus empresas auxiliares como motor de progreso, mientras que Machón (IU), que vivió en sus carnes el desmantelamiento de Solaria, se mostró partidario de revisar los convenios de incentivos y endurecer los requisitos para la instalación de nuevas industrias.

Otros temas abordados fueron la «falta de recursos» de la Policía Local, por la que todos se mostraron preocupados , o la reapertura de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT). En este sentido, Puertollano Puede, PP y Ciudadanos se mostraron más titubeantes, condicionando todo a un estudio detallado de la situación. IU sí fue tajante, señalando que todo debe acordarse a través de la Mesa General de Negociación. Respecto a la creación de la mesa sectorial policial, el PP se mostró de acuerdo; Puertollano Puede expresó su «voluntad» de abordar el asunto «con el acuerdo de todos los departamentos» e IU aseguró que actuaría  desde el respeto al acuerdo marco.

A preguntas del público el encuentro se demoró en aspectos como la reutilización de las viviendas vacías, la protección de los animales, o la recuperación de instalaciones e infraestructuras abandonadas, especialmente la antigua casa de cultura o el teatro de El Poblado.

Ecografías en un hotel

El único momento de tensión se produjo cuando una de las asistentes reprochó al candidato popular y gerente del Hospital de Ciudad Real, Juan José Jiménez Prieto, la derivación de ecografías a una empresa vinculada a un compañero de partido con oficinas en el Hotel Cumbria de la capital. Prieto salió al paso aduciendo que la derivación se firmó merced a un concierto para reducir las lista de espera ante la falta de radiólogos en el centro sanitario. «Posteriormente me enteré por los medios de que el hotel no tenía licencias, pero le puedo asegurar que la Fundación Méndez Bonal tiene todas las certificaciones de Sanidad y que el contrato se atiene a ley», subrayó.

Tras finalizar el acto, Juan José Portero manifestaba su satisfacción por el resultado. «Para la plataforma ciudadana, que sólo tiene como objetivo ser garante de la gestión municipal, el objetivo ha sido sobradamente cumplido, ya que hemos sacado el debate a la calle, sin intermediarios«.

A su juicio, el nivel de los intervinientes ha sido «muy correcto». «Han respondido a todas las preguntas sin poner pegas, incluso con comentarios jocosos en algún momento». Eso sí, reconoció que la ausencia de la alcaldesa ha «desvirtuado» la iniciativa, y ha lamentado «su callada por respuesta», a pesar del envío de dos correos electrónicos. En otra ocasión será. Quizá en las próximas elecciones generales pudiera repetirse la experiencia.