«Cómo vender vino en países emergentes y no morir en el intento: ejemplos prácticos en México y Senegal» ha sido el tema de la ponencia expuesta por Francisco Gómez Zarcero, gerente territorial de Globalider, que de la mano de la empresa de artes gráficas y diseño, Impresiona Rotulación, ha dado una serie de consejos prácticos para lograr la internacionalización de bodegas y sus vinos.
El sector vitícola español atraviesa un momento de expansión y reconocimiento internacional, por lo que ahora es el momento de poner los medios para abrir nuevos mercados, según acredita la compañía Globalider, una promotora de negocios internacionales, cuya labor es facilitar a las bodegas, en concreto de Ciudad Real y Toledo, su internacionalización en alguno de los 40 países en los que opera.
En su intervención, Gómez Zarcero ha analizado la situación del sector en los mercados de México y Senegal, aportando diez claves para crear una empresa internacional. Entre ellas, ha destacado la importancia de la adaptación de la imagen y etiquetado de los vinos, fundamental para la venta, así como tener apoyo en destino.
Ha explicado también la metodología para la introducción de vinos españoles en estos países. Sostiene Gómez Zarcero que la elección de México y Senegal como países emergentes responde a tres razones: «Son mercados con escasa penetración de los vinos de Castilla-La Mancha y son claramente dos alternativas de diversificación en comercio exterior para nuestras bodegas, cuyas ventas están muy concentradas en el mercado europeo. Asimismo, son mercados difíciles y que requieren la presencia física comercial en destino si se quieren obtener resultados».
En lo que respecta a Senegal, ha dicho que se trata de un país que lidera el área económica de la Unión Económica y Monetaria de África Occidental, que ha experimentado un crecimiento demográfico y económico muy interesante en los últimos años y cuya capital, Dakar, se convierte en puerto de entrada de mercancías del oeste africano. Básicamente Francia y España son los países que venden en este mercado en el que todavía no hay mucha competencia. Ha especificado que una botella de 1 euro en origen costaría 2,90 euros al importador/distribuidor. El consumidor de este país africano se inclina por vinos tintos económicos y de alta graduación.
En el caso de México, con 120 millones de habitantes, se presenta como uno de los principales destinos de interés para las bodegas castellano-manchegas; al fin y al cabo, ha dicho que España es el primer país exportador a México. Una botella de 1 euro en origen llega a costar 1,7 euros al importador/distribuidor.