Daimiel: Ni una butaca libre en el doble estreno de ‘Los hijos de la posguerra’

Daimiel Noticias.- Sin butacas libres en el doble estreno de la primera película de la asociación ‘Aires Nuevos’: “Los Hijos de la Posguerra”. El Teatro Ayala se llenaba de actores, amigos y vecinos que no quisieron perderse esta cinta que ha supuesto más de 50 horas de metraje, en un proyecto que nació hace un año casi sin presupuesto y con actores no profesionales.
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A la cita asistieron el presidente de la Diputación de Ciudad Real, Nemesio de Lara, el alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, varios concejales de la corporación municipal; además de los principales artífices de este proyecto: Emilio Gallego, director de la película, Antonio Ruiz Cabrera, guionista y director artístico, y Mari Carmen Torija, presidenta de la asociación y actriz en la cinta.

Estreno que comenzaba con la firma del cartel de la película por todos y cada de los actores del elenco. Momentos antes del esperado visionado de la misma, María Milagros Abenójar, mujer que ha inspirado parte del guión de la película, fue la encargada de abrir el turno de intervenciones, agradeciendo la colaboración de todos y cada uno de los actores y de todos aquellos que han participado de alguna manera. Mención especial de Abenójar para el director de la cinta, Emilio Gallego, al cual agradeció su entrega y las muchas horas de trabajo, describiéndolo como “una persona que no dudó nunca de este proyecto, siempre con una sonrisa en la cara, realizando un gran esfuerzo con profesionalidad y optimismo”.

Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando explicó al público su verdadera historia y la de su madre biológica, María (que en el filme recibe el nombre de Ana) la protagonista de esta trama, las dos mujeres que han inspirado el guión de Antonio Ruiz Cabrera, marido de la propia Abenójar y al cual también le agradeció su esfuerzo y dedicación. Por último, también tuvo palabras de afecto para sus padres adoptivos “pilar en el que me he apoyado toda mi vida, quiénes me dieron tanto amor que no viviré lo suficiente para agradecérselo”, concluía Abenójar, que recibía un ramo de flores como gesto de agradecimiento “al ofrecernos la historia de su vida que nos ha permitido llevar a cabo Los Hijos de la Posguerra”, según explicaba la presidenta de la asociación, Mari Carmen Torija.

Por su parte, el presidente de la Diputación dijo “ser un placer estar en el estreno de esta película, reconociendo el trabajo de todos los que han hecho posible este proyecto”. De Lara afirmó haberse quedado enganchado de la sinopsis que había visto de la película antes de verla al completo, “porque hay muchas ‘Marías’”. Y es que momentos antes de entrar en el teatro comentaba como una señora de La Solana se sinceraba con él y le confiaba el secreto de que “para criar a sus hijos tuvo que dejarse violentar por el amo para conseguir comida para su familia”, aseguraba De Lara. Además, el presidente de la Diputación realizó una apreciación sobre el título, ya que, según afirmó, “la película debería llamarse Los Hijos de la Guerra, una guerra que dejó secuelas inolvidables en la vida de muchas personas, porque somos lo que otros han sido, no hay futuro sin pasado y no es bueno olvidar la historia para no repetirla, y a su vez no repetir la historia de tantas ‘Marías’, de tantos huérfanos, de tanta humillación, en la que los perdedores son los de siempre”. Por último, De Lara felicitó a todos los implicados en el proyecto y los lazos de unión de la asociación ‘Aires Nuevos’, destacando ese factor de unión en un grupo compuesto principalmente por personas mayores, “donde muchos se encuentran sumidos en la soledad y sin un objetivo”.

Torija recalcó el apoyo que han recibido todas las personas mayores, jóvenes y niños que hace un año se embarcaron en el rodaje de la película. Menciones también para la edil de Cultura, Pepi Lourdes González-Mohíno, para la directora del Centro de Mayores, Prado Pérez de Madrid, y para todos aquellos que han cedido sus casas, tierras, enseres y demás objetos, haciendo posible la ambientación del filme entre las décadas 40, 50 y 60”, describía Torija. Para finalizar su intervención, la presidenta de la asociación artífice de la película no quiso dejar pasar la ocasión sin agradecer “muy especialmente” esta historia a María Milagros Abenójar, a Antonio Ruiz Cabrera y a Emilio Gallego.

Precisamente Ruiz Cabrera confesaba sentirse “muy satisfecho por haber logrado ver cumplido ese sueño que suponía ver acabada esta película”. Agradecido también por todos los que les han ayudado y esperando una buena acogida y crítica de una película realizada sin muchos medios técnicos y con un grupo de personas no profesionales en este medio cinematográfico”.

En este sentido, el director de la película explicó con buen humor las vicisitudes de decidirse a participar en este reto. Además, Gallego relató también cómo había sido ambientar esta cinta que abarca, en una hora y tres cuartos, desde 1945 y hasta 1972, un “complejo trabajo de documentación previo para plasmar el retrato social de la época”. Asimismo, felicitó a todos y cada uno de los actores, destacando la interpretación magistral de la protagonista de la película, Mati Ruiz Cabrera, a la cual comparó con Naomi Watts, una de las actrices preferidas de Gallego, que contó la anécdota “del momento en que Juan Antonio Bayona le pidió ser su protagonista en el filme Lo imposible y cómo Watts se acercó a la protagonista real de la historia para vivirlo con pasión”.

Y como colofón a la noche, Gallego anunció que “desde este mismo lunes vamos a comenzar a trabajar en la segunda parte de Los Hijos de la Posguerra, además de intentar entrar en el festival de cine de La Solana de este año”.

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