La coordinadora general del Comité Electoral del PSOE en la provincia de Ciudad Real, Blanca Fernández, ha dejado en evidencia “la gran mentira” del aún delegado de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Antonio Lucas-Torres, quien ayer anunció que renunciada al cargo «por responsabilidad y ética» cuando «en realidad es porque no lo permite la Ley Electoral», afirma.
En concreto, el artículo 3 de la Ley Electoral publicada en el Boletín Oficial del Estado deja claro en su apartado f que “serán inelegibles los delegados provinciales de la Junta de Comunidades y los de las Consejerías, en el ámbito territorial de su jurisdicción”, recuerda la socialista.
Ante esta incompatibilidad, Fernández se ha preguntado “qué necesidad tenía Lucas-Torres de comenzar la precampaña electoral mintiendo a todos los ciudadanos”, al advertir que “la única verdad es que ha dimitido de su responsabilidad en la Delegación de la Junta porque si no no podría ser candidato a las Cortes Regionales, algo que ayer se confirmó al ir en el número 5 por la circunscripción de Ciudad Real».
Por ello, Blanca Fernández considera que “Lucas-Torres debe pedir perdón por sus mentiras constantes mientras ha sido delegado de la Junta en Ciudad Real, pero también debe pedir perdón por esta gran mentira”, al tiempo que ha añadido que “hay otra forma de hacer política, que es sin corrupción y sin mentiras”.
En una línea similar se ha pronunciado la dirigente socialista sobre las declaraciones realizadas por el propio Antonio Lucas-Torres cuando afirmó a principios de semana que todos los candidatos del Partido Popular a las alcaldías en los municipios de la provincia de Ciudad Real eran nacidos en las localidades por las que se presentan, “una nueva mentira que ha tenido las patas muy cortas y que incluso el candidato de Valdepeñas, que no es valdepeñero, dijo no estar de acuerdo con Lucas-Torres porque “le parecía una simpleza” y “un pensamiento pobre y mediocre”.
La también secretaria de Organización del PSOE ciudadrealeño ha dicho que por “perlas” y “mentiras descaradas” como éstas protagonizadas por Lucas-Torres comprende «por qué ha permanecido tanto tiempo sin comparecer de forma habitual ante la opinión pública, seguramente ha comprendido que el mejor modo para ‘no meter la pata’ y no mentir en su intento de tapar la gestión desastrosa y los recortes de Cospedal sea el silencio”.
