El próximo miércoles 15 de abril la Facultad de Educación de Ciudad Real celebra a partir de las 16:00 horas una jornada dedicada a la conocida como educación libre. El evento arrancará con la proyección del documental Enséñame pero bonito, sobre metodologías y teorías educativas alternativas. Para contextualizar y conocer de primera mano este tipo de proyectos, la Universidad de Castilla-La Mancha contará con la experiencia de la comunidad educativa de Caracolín, un proyecto pedagógico libre puesto en marcha en Ciudad Real.
Documental
Enséñame pero bonito, un documental obra de Sara Moreno, contabilizó cerca de 80.000 reproducciones en apenas diez días después de su lanzamiento. Su objetivo es presentar alternativas educativas eficaces para la formación integral de los niños. Una apuesta por la renovación pedagógica, que parte de pensamientos críticos, experiencias reales y que se desarrolla en y para la libertad.
Con esta obra, su autora pretende mostrar y promover la reflexión sobre la pedagogía que conocemos «y ayudar a cuestionarnos si fue la más eficaz y si existen otras maneras más respetuosas y actuales». Este trabajo muestra experiencias educativas que motivan la reflexión profunda sobre el concepto de Escuela.
Caracolín
El proyecto Caracolín está impulsado por un grupo de padres de Ciudad Real que ha puesto en marcha alternativa educativa para la etapa de Educación Infantil inspirada en la pedagogía Montessori. La finalidad de la iniciativa es «contribuir al desarrollo los niños a través de un modelo educativo que respete sus ritmos y necesidades, que sea inclusivo, no coercitivo, promovido por la familia e interrelacionado con la comunidad”.
Miembros de esta asociación explicarán en la jornada su experiencia, tras haber puesto en marcha el pasado mes de septiembre el espacio Caracolín.
Este colectivo consideran fundamental el cuidado de las emociones y de las relaciones personales y defiende un modelo educativo en el que la familia participe activamente en el día a día de la escuela, en el que el juego sea el motor principal del aprendizaje y en el que niños de diferentes edades interactúen entre sí.
Caracolín, explican, no tiene ánimo de lucro, es un proyecto autogestionado, democrático y basado en la cooperación. El proyecto educativo ha sido elaborado por los propios padres, algunos de ellos vinculados profesionalmente a la educación. Se trata de una iniciativa laica que promueve el respeto, la igualdad y que pretende ser asequible, de tal forma que sea accesible a todos aquellos padres comprometidos con la educación de sus hijos, sin que llegue a suponer una excesiva carga económica para las familias.